12/10/2025 06:49
12/10/2025 06:48
12/10/2025 06:46
12/10/2025 06:45
12/10/2025 06:44
12/10/2025 06:43
12/10/2025 06:42
12/10/2025 06:41
12/10/2025 06:40
12/10/2025 06:38
Buenos Aires » Infobae
Fecha: 12/10/2025 04:45
María Laura Santillán Con Emiliano Brancciari Algo muy argentino es intentar apropiarnos de lo que no es nuestro pero podría serlo, eso nos pasa con el grupo “No te va a gustar”. Es una banda claramente uruguaya, pero solemos decir que es rioplatense porque nos gusta mucho. Y porque Emiliano, fundador y el motor de la banda, talentosísimo compositor, es argentino y es uruguayo, padre argentino, madre uruguaya. La banda cumplió 30 años y lo festeja todo el año con una gran gira mundial que llena estadios con público de varias generaciones. – La banda nació allá, pero ahora tenemos dos integrantes nacidos acá. – Una gira por los 30 años por todo el mundo ¿cuánto tiempo estás en Uruguay? – Bastante poco. Una gira como esta que nos ha llevado por tantos lugares, 18 países y no sé cuántas ciudades, hemos estado bastante poco en casa, pero estamos acostumbrados a que así sea. En cierta época del año paramos un mes. – Un mes por año, nada más. – Un mes donde no nos vemos. Después hay pequeñas ventanas de diez días o de 15 como mucho porque tenemos familias que nos precisan y precisamos nosotros. – ¿Un descanso de la convivencia para tener un poco de aire? – Sí, eso también, es necesario, pero no tenemos grandes inconvenientes en pasar tanto tiempo juntos. Es más que nada el hecho de extrañar a nuestros hijos, todos tenemos hijos y necesitamos tiempo real con ellos. "Mi madre se casó con mi padre, argentino, y nosotros nacimos en Munro, provincia de Buenos Aires", contó Emiliano Brancciari (Fotos de Gastón Taylor) – Cuando me ponía al tanto de tu vida más allá de la música se destacaba la figura de tu mamá, es clave. En primer lugar fue clave para que nacieras acá, porque su familia estaba exiliada. – Exactamente. Se exiliaron porque la dictadura dejó sin trabajo a mi abuelo y se vinieron para acá. Mi madre se casó con mi padre, argentino, y nosotros nacimos en Munro, provincia de Buenos Aires. Desde eso hasta que me enseñó los primeros acordes en la guitarra, sí, ella fue muy importante en todo esto. – Ella canta, toca. ¿Cuál es la relación de tu mamá con la música? – Era la que cantaba, la que tocaba en las guitarreadas familiares. Todos cantábamos, era una familia súper numerosa, mitad uruguaya, mitad argentina. Todas las reuniones terminaban en guitarreadas y con un repertorio súper heterogéneo. Ella era la que tocaba la guitarra y después cantábamos todos. – Por eso se llama ‘Tu única voz’ la canción que le dedicaste. Estabas en contacto con el folklore, había mucha música en tu casa. – Sí, mucha música, se escuchaba de todo y sobre todo folclore y tango siempre sonaba. Yo investigaba en la radio también, después heredé discos de mi madre de rock, ahí empecé a mezclarme con ese género. – Hay folklore también en canciones tuyas, ¿es la influencia de la infancia? – Folklore y tango, sí, es de ahí, la música melancólica que nos caracteriza en esta parte del mundo. "Todos cantábamos, era una familia súper numerosa, mitad uruguaya, mitad argentina. Todas las reuniones terminaban en guitarreadas", contó Emiliano Brancciari en entrevista con María Laura Santillán – ¿Tu mamá te acompañó cuando empezaron con la banda? – Sí, pero no estaba del todo convencida de que yo me fuera a dedicar a eso, sobre todo en ese Montevideo de mediados de los 90, no había un panorama alentador al respecto. Ya, de por sí, no hay un mercado que se sostenga solo para que puedas dedicarte a la música sin trabajar en otra cosa. Mucho menos en ese momento, salir afuera era mucho más difícil porque no existían las plataformas, no existía Internet, no existía nada que te ayudara. Ahora las fronteras se borraron un poco. “DECIR ‘QUIERO SER MÚSICO’ ERA COMO DECIR ‘QUIERO SER ASTRONAUTA’ PARA UN PADRE” – Estabas fuera de la industria. – Sí, decir ‘quiero ser músico’, era como decir ‘quiero ser astronauta’ para un padre. Entiendo perfectamente que existiera esa duda y esa preocupación, ‘¿pero qué vas a hacer productivo?’ – ¿De qué vas a vivir? – ¿De qué vas a vivir? Por suerte, después de tener cinco años como banda ganamos un concurso que nos permitió grabar el primer disco. Eso en nuestras casas fue como un bálsamo y como una cuota de fe. Por suerte después por el entorno o por estar en el lugar indicado o haciendo lo que la gente estaba esperando escuchar se nos fueron abriendo puertas. “OBLIGÁBAMOS A NUESTRA FAMILIA Y AMIGOS A QUE FUERAN A VERNOS, VENÍAN OBLIGADOS” – ¿Los primeros cinco años tu mamá te iba a ver igual? – Ella, su marido, mi hermana, mi abuela, mi tía, toda la familia, los amigos. Después empezó a aparecer gente que no conocíamos. Primero obligábamos, era llamar por teléfono para obligar a nuestros amigos y familia que fueran. Venían obligados. A medida que fueron apareciendo las canciones propias, empezó a aparecer gente desconocida. "Después de tener cinco años como banda ganamos un concurso que nos permitió grabar el primer disco", recordó Emiliano Brancciari – ¿Qué pasó después con tu mamá cuando y las canciones que ella cantaba? ¿Dejó de cantar? – Una vez que nos fuimos de Argentina ese tipo de reuniones, multitudinarias, desapareció porque la familia, el núcleo familiar, se fue achicando. – Tus viejos se separaron. – Eso por un lado, sin duda, nos quedamos con la parte uruguaya de la familia. Mi papá se quedó en Munro, obviamente seguimos teniendo relación, lo veo cuando vengo acá. – Te criaron mujeres en Uruguay. Nombraste a tu mamá, tu hermana, tu abuela, tus tías. – Mi tía, la hermana de mi abuela materna, es la que nos abrió las puertas de su casa para irnos a vivir. Sí, siempre rodeado de mujeres. “CRECÍ RODEADO DE MUJERES. PARA HACER CANCIONES HAY UNA SENSIBILIDAD FEMENINA QUE ESTÁ SIEMPRE” – ¿Qué aprendiste de las mujeres? – Aprendí todo, jajaja. Lo que te transmiten es la sensibilidad sobre todas las cosas. Aprendí a respetar a las mujeres por sobre todo también, eso es como ley. Para hacer canciones hay una sensibilidad femenina que está ahí siempre. – El lado femenino desarrollado lo tenés asumido. ¿Y cómo es la relación hoy con tu vieja? – La mejor. Me acaba de hablar recién porque el lunes nos va a ver, tocamos en un show allá. Y está preguntándome si podía reservarle un lugar para estar mejor ubicada. – Con tu hermana tenés una relación muy cercana también. – Sí, claro, nos fuimos juntos de Argentina, tengo una relación súper cercana por supuesto. "Para hacer canciones hay una sensibilidad femenina que está ahí siempre", explicó Emiliano Brancciari – Le escribiste dos canciones. – Sí, por lo menos dos, ‘Tu nombre’ y ‘Me ilumina hoy’. Le hice a mi abuela también, una que se llama ‘Josefina’. Mi abuela se llama Vilma Josefina y nunca le gustó su segundo nombre. Ahora está recopada, le encanta saber que es para ella y le encanta su nombre. – Me encanta que asumas que son las mujeres las que te crían, te rodean, les cantás, les escribís, me parece súper sexy. ¿No te dicen eso las otras mujeres? – No, ni idea… – ¿Ni idea? Jajajaja No todos los hombres tienen esa percepción de la naturaleza de las mujeres. – Yo lo noto y lo veo claramente. Fue lo que me tocó y por suerte fue así. – ¿Qué tiene Uruguay, Montevideo, el lugar donde elegiste vivir? Podrías haber vivido acá y decidiste radicarte ahí. ¿Qué tiene esa vida que te gusta? – Primero que nada yo pasé la mejor adolescencia posible, maravillosa, me fui de acá e hice la secundaria en Uruguay. Nos fuimos de un país que no era tan seguro para un adolescente en la calle, a un lugar donde yo podía volver a las cuatro de la mañana caminando a mi casa y que mi vieja no estuviera preocupada. Ahora no es lo mismo, era como irnos a vivir a una ciudad del interior. – A un pueblo. – Exactamente. Si bien no había tanta variedad de cosas para hacer, viví una adolescencia hermosa. Primero me costó un poquito y extrañaba mucho, después una vez que me acostumbré, hice mi barra de amigos. “EN URUGUAY TODO ES MÁS LENTO, NO EXISTE EL ROCKSTAR. HACEMOS UNA VIDA NORMAL, DESDE HACER LOS MANDADOS HASTA PAGAR LAS CUENTAS” – Los amigos de la secundaria son los amigos de siempre, de toda la vida. En tu caso además conociste a los integrantes de la banda. – Claro, son los amigos con los que te formás. Tuvimos en algún momento la opción de venirnos a vivir acá con la banda ya establecida, sin hijos aún. Para nosotros era mucho más fácil mudarnos a Argentina y salir desde acá al resto de Latinoamérica y al resto del mundo por una cuestión de logística y hasta de costos. Y decidimos que no, que estábamos bien, que nos hacía bien ese cable a tierra que es Uruguay donde todo es un poquito más lento, donde no existe la figura de rockstar ni nada de eso. Eso sigue hasta el día de hoy, nosotros vivimos una vida absolutamente normal, desde hacer los mandados a ir a pagar las cuentas personalmente. MARÍA LAURA SANTILLÁN CON EMILIANO BRANCCIARI DE ‘NO TE VA A GUSTAR’: “TUVIMOS LA OPCIÓN DE VENIRNOS A VIVIR A ARGENTINA Y DIJIMOS QUE NO. EN URUGUAY NO EXISTE EL ‘ROCKSTAR’ Y VIVIMOS UNA VIDA NORMAL “EN MONTEVIDEO PODÉS TENER 3 O 4 PLANES EN EL MISMO DÍA, EN UNA CIUDAD GRANDE TENÉS QUE ELEGIR” – Hay temas que se reiteran en tus canciones, uno es el tiempo. El paso del tiempo en Uruguay es más lento, va más despacio, es más silencioso. – Tener tiempo es calidad de vida para mí. Es una ciudad hermosa, que está mirando al agua y donde podés tener dos, tres planes o cuatro en un solo día. Podés ir a hacer lo que tenés que hacer, ir a visitar a tu abuela, ir a ver a un amigo, ir a un cumpleaños. Capaz que en una ciudad grande tenés que elegir: hoy voy a Capital porque tengo que hacer tal cosa y no sé si me da para llegar a otro lado. Que te sobre un poquito de tiempo para mí es calidad de vida. – Tiene más silencio además, menos ruido. – Sí, también disfrutamos del ruido, de venir acá y de tener momentos de ruido y de un montón de cosas que no nos pasan. Pero está bien tener un poquito de cada cosa. – Me impresionó cuando hace ocho años escribiste la canción ‘Para cuando me muera’. Eras muy joven para estar pensando qué querías cuando te murieras. – Sí, habla de eso un poco. De disfrutar las cosas que son intangibles, que no tienen precio. Que a veces estamos atrás de alguna zanahoria y te vas perdiendo las cosas que son realmente importantes y que eso que estás persiguiendo en un momento no va a servir para nada. – ¿Cuáles son las realmente importantes? – La familia sin duda, el dar y recibir amor por supuesto. Escuchar la música que te gusta, disfrutar del tiempo libre. Un montón de pequeñas cosas que son enormes, que a veces perdemos de vista. – ¿Llegaste a pensar en serio ‘en algún momento me voy a morir’? Uno a los 40 se cree inmortal. – Sí, pero nos va a pasar a todos, es inevitable. No estoy pensando en que me va a pasar, me va a pasar cuando me tenga que pasar. No es algo que me dé mucho miedo, ni que me preocupe, ni que esté pensando en eso. Pero todos vamos para ahí. "A veces estamos atrás de alguna zanahoria y te vas perdiendo las cosas que son realmente importantes", expresó el líder de No te va a gustar – Tenés un don en ese sentido. En general, tenemos que atravesar un momento muy límite para ponernos a pensar en la muerte. – Puede ser que me haya pasado algo, que haya visto algo que me haya despertado esa alarma. – Hablamos de que escuchabas folklore en tu casa cuando eras chico. ¿Qué seguís escuchando de esa época? ¿Jaime Roos? ¿Zitarrosa? – Mercedes Sosa, Yupanqui, todo eso lo recontra escucho. De hecho a mi hijo por ejemplo, cuando era chiquito, le ponía un disco que se llamaba ‘Mercedes Sosa canta Atahualpa Yupanqui’ que es maravilloso, él se quedaba dormido con eso y a mí me fascinaba. Es un disco que me encanta, lo tengo en vinilo y sigo hasta hoy escuchándolo. – ¿Cuántos años tiene tu hijo? – 15. Adolescente. Un poco rebelde, como tiene que ser. Porque tenés que ser un poco rebelde con tus padres. – Y los padres le tienen que poner límites. – Sí, pero también aceptar que la rebeldía es parte y que si es rebelde con nosotros también va a poder saber decir que no a un montón de cosas. – ¿Lo disfrutás? – Sí, lo disfruto. Lo extraño un montón. – ¿Hace cuánto no lo ves? – Ahora hace bastante porque se fue de viaje con la mamá. Él vive un poco con la mamá y un poco conmigo, según el momento. Se fueron de viaje a España y yo justo volvía de otro viaje, entonces no nos cruzamos. – ¿Más de un mes? – No, no, pero diez días, 15 días. – 15 días para vos es un montón. ¿Lo ves mucho? – En cuanto llego a Uruguay salgo corriendo para donde esté. Hemos hecho viajes juntos, ha venido también a shows a Buenos Aires, que es más fácil, pero a cosas cortas. La gira no es para la familia porque es incómoda. Tenemos horarios, dormimos poco, hay que salir a veces a las cuatro de la mañana para la otra ciudad. “PARA ÉL YO SOY UN PAPÁ NORMAL, SU NORMALIDAD ES QUE YO ESTOY CADA TANTO, A VECES EL CIEN POR CIENTO DEL TIEMPO” – Es una vida de locos la de los músicos en relación a la familia. ¿Cómo hacés para pararte con un papá normal en medio de todo ese caos? – Lo que pasa es que para él yo soy un papá normal, más allá de que soy diferente a los papás de los compañeros. Su normalidad es que yo estoy cada tanto, a veces estoy el 100% del tiempo con él y no como otros padres que llegan a las siete de la tarde a su casa. Entonces son cosas distintas pero ya creció con eso, es nuestra realidad. MARÍA LAURA SANTILLÁN CON EMILIANO BRANCCIARI DE ‘NO TE VA A GUSTAR’: “PARA EL YO SOY UN PAPÁ NORMAL. ESTOY CADA TANTO, A VECES EL CIEN POR CIENTO DEL TIEMPO, NO COMO OTROS PADRES QUE LLEGAN A LAS 7 DE LA TARDE A SU CASA” – ¿Qué tiene de vos? – Físicamente un montón de cosas. Y es un poco tímido. – Vos te asumís tímido. – Sí, claro. – ¿No venciste la timidez? – No, bastante con el tiempo. Pero sí, soy re tímido. A veces parezco más serio de lo que soy por esa timidez en ciertos ámbitos. Hasta que entro en confianza y ya está. – ¿O sea que sos más jodón de lo que parece? – Mucho más, hago cualquier pavada con el grupo. En mis vínculos más cercanos, la banda, la familia estoy paveando todo el tiempo. “CUANDO EMPEZAMOS CON LA BANDA NO MIRABA AL PÚBLICO. YO TOCABA A UN COSTADO, MIRABA A MIS COMPAÑEROS O PARA ABAJO” – Y no vimos nada de eso todos los demás. – Mejor, jajajaja. Antes, cuando empezamos con la banda, no miraba al público. O sea, yo tocaba en un costado. Miraba a mis compañeros o para abajo, no miraba a la gente. – Me intriga saber cómo te fuiste corriendo al medio del escenario. – Me obligaron. Yo quería tocar con un compañero que es el otro guitarrista que está en la banda y mis compañeros me dijeron: bueno, está bien, entrá pero vos pasás al medio. Y pasé al medio. – ¿No te resististe? – No porque estaba bien, era lo lógico que tenía que ocurrir en una banda numerosa, que el cantante esté en una punta era raro. Y lo hice. – ¿Cómo fue el momento de estar en el medio? – Lo fui llevando de a poco. Fue raro. El primer show fue en un Cosquín en 2009, con un montón de gente. Esa fue la primera vez que toqué en el medio del escenario. – Leí que tomabas algo de alcohol para arrancar. – Sí, bueno, eso sigue pasando hasta ahora, jajajaja. María Laura Santillán Con Emiliano Brancciari - MARÍA LAURA SANTILLÁN CON EMILIANO BRANCCIARI DE ‘NO TE VA A GUSTAR’ : “CUANDO EMPEZAMOS CON LA BANDA NO MIRABA AL PÚBLICO Y TOCABA EN UN COSTADO. MIS COMPAÑEROS ME OBLIGARON A PASAR AL MEDIO” – Necesitás algo que te dé valor. – Sí, que me desinhiba un poquitito. – Pero solo en esa situación. – No, tomo vino porque me encanta el vino, pero no necesito. – ¿En el escenario es vino? – No. A veces tomo un poquito de vino blanco antes porque el tinto me tiñe los dientes. Entonces queda raro, no me gusta. – ¿Te quedaron amigos de la etapa argentina, de la primaria? – Sí, sobre todo de cuando empecé a volver a ver a mi papá. Gente del barrio, de Munro, que hasta el día de hoy es mi barra de amigos de acá. Tengo un montón de amigos y siempre se vincularon mucho mis diferentes grupos de amigos entre sí. Los de acá fueron para allá, los de allá para acá. Siempre fui un buen nexo entre diferentes grupos de gente, eso me gusta, me encanta. Después entre ellos quedaron amigos y siguen su relación hasta el día de hoy. Me pasó muchas veces eso. “ME GUSTARÍA TENER MÁS CANAS, ME PARECE QUE QUEDAN BIEN” – ¿Por qué no tenés canas, Emiliano? ¿Cuál es el secreto de estar igual como si el tiempo no pasara? – No, no tengo secreto. La verdad que me gustaría tener más porque parece que me tiño sin hacerlo. – No, no parece que te teñís, parece que no tenés canas. – No tengo, pero no sé por qué, mi padre tiene. Tampoco tuve caries si te sirve el dato, jajajaja. Pero me gustan las canas, quiero tener. Me gustan, me parece que quedan bien. "Tengo un montón de amigos y siempre se vincularon mucho mis diferentes grupos de amigos entre sí", contó Emiliano Brancciari (Fotos de Gastón Taylor) – Termina la gira de los 30 años de “No te va a gustar”en el Estadio Uno. – El estadio Uno de La Plata. Una ciudad que amamos mucho, en Argentina fue donde primero vimos gente cantando nuestras canciones, en un barcito donde tocamos. Nos quedó para siempre eso, formamos una relación con la ciudad muy linda y nos va a ver un montón de gente. Entonces está buenísimo terminarla ahí. Acá empezamos en Vélez, después hicimos cuatro Movistar y ahora se cierra en La Plata y va mucha gente desde acá también. – ¿Sos así de relajado como se te ve? Se te ve muy relajado. – Sí, soy bastante relajado. Soy ansioso con algunas cosas, pero. Pero con el tiempo cada vez me relajo más. – ¿Algún tip? – Rodearte de la gente en la que podés delegar sin preocuparte. – ¿Lo que te estresa? – No, hago cosas que me estresan, hago cosas que considero que tengo que hacer yo. A modo grupal si a alguno le sale mejor algo, nos encolumnamos detrás de ese y a la vez hay gente que a veces se encolumna detrás mío, logramos ese funcionamiento. “TODOS MIS VÍNCULOS SON SANOS, EL QUE NO LO ERA YA NO ESTÁ. SIEMPRE HAY VÍNCULOS QUE NO SON SANOS Y ES MEJOR ALEJARSE” – De entregarse, no resistirse. – Sí, porque sabemos que todos estamos buscando el bien grupal. Hablo de la banda, pero con mi familia me pasa lo mismo, con los amigos me pasa lo mismo. O sea, todos mis vínculos son sanos. El que no lo era ya no está. Siempre hay vínculos que no son sanos y es mejor alejarse. Separando la paja del trigo, limpiando. La vida es juntarte con la gente que te querés juntar.
Ver noticia original