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» Diario Cordoba
Fecha: 30/07/2025 17:29
Mientras asistimos al exterminio de un pueblo, dejándolo morir de hambre entre el mar y el cielo que lo ignora, aquí nuestros queridos políticos andan jugando al juego de los ‘currículum vitae’, un juego desenfadado que consiste en descubrir quién ha falseado su CV y con qué gravedad, demostrando así que, de todas las cosas importantes de las que debieran ocuparse y atender, lo que más les inquieta en estos días es saber si cursaste esta o aquella carrera y si la acabaste o si fuiste digno alumno de un máster que avale tus habilidades en, digamos, alcanzar la gloria a través de sarcásticos tuits que ponen de manifiesto todo tu ingenio y cualifica al citado máster de acierto total. Sin duda, cosas de locos en un mundo que ha perdido la decencia y malgasta la poca suerte que le queda en disfrazar el horror y colocar al débil en el lugar más inestable del tablero, invitándolo a caer y ser devorado por cocodrilos, caimanes, leones y sobre todo por el propio hombre que se ha vuelto insensible. Porque sí: las imágenes de Gaza nos conmueven a diario, pero lamentablemente nos quedamos con eso, insultamos algo a Trump, maldecimos a Netanyahu y nos vamos a dormir con el deseo de que mañana vuelva a tener una lógica, un respeto y un orden que no sea solo el del dinero y sus fieles cortesanos. Pero ese mañana no llega y todo sigue desordenado y en ruina y, de repente, salta la noticia de que una diputada del Partido Popular, Noelia Núñez González, ha trucado su CV, indicando tanto en el portal del Congreso como en el de su propio partido que había cursado un doble grado de Derecho y Ciencias Jurídicas y estudios en Filología Inglesa, cuando en realidad no concluyó ninguno de esos estudios y es, en ese instante, cuando los leones se lanzan sobre la presa, que es débil, y su partido, que no sabe qué hacer con tantos nombres manchados, le exige la dimisión y ella dimite. Tiene 33 años, ha cometido un grave error, imagino que por algo tan humano como aparentar lo que no se es o decir tener lo que no se tiene. Quizá todo por ser admitida en el grupo de los elegidos. La demagogia lo mueve todo en estos tiempos, porque es el arma del opresor para hacer del oprimido un ser sin nombre ni rostro al que todo se le puede arrebatar. Es como borrar un dato inexacto de un currículum. A unos se les permite hacerlo y aquí paz y después gloria y otros pagan por ello con un viaje a los infiernos. *Periodista y escritora
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