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  • A la espera del momento clave para iniciar una nueva etapa en la vida

    Parana » Informe Digital

    Fecha: 26/07/2025 07:41

    En la expectativa de un momento decisivo, el sector agropecuario aguarda los anuncios que realizará hoy el presidente Javier Milei durante la inauguración de la 137° Exposición Rural de Palermo. Luego de una reunión que se extendió por más de dos horas entre el Presidente y la Mesa de Enlace, los dirigentes rurales le presentaron los números de la actividad, lo que hace que la posibilidad de que el Gobierno adopte una postura más audaz en relación con el agro sea más cercana de lo que se había percibido hasta ahora. De acuerdo con lo anticipado por LA NACION el miércoles pasado, la posible reducción de los Derechos de Exportación (DEX) no solo abarcaría el remanente de la carne, que actualmente se sitúa en un 6,75%, sino también a los granos. Tan pronto como se conoció esta información, las operaciones en el mercado de granos se detuvieron a la espera del discurso presidencial de hoy. Fuentes oficiales, por otra parte, descartaron la implementación de un bono como mecanismo de compensación para el pago de los DEX, según una versión que circuló con insistencia durante la semana, originada en el ámbito financiero. Estos rumores se propagan en un contexto fértil, ya que el sector agropecuario espera que el presidente Milei comience a cumplir su promesa de campaña de eliminar los DEX. El propio ministro de Economía, Luis Caputo, antes de ingresar a la reunión con la Mesa de Enlace en la Exposición Rural, afirmó que la cuestión de las retenciones era una “obsesión” del Gobierno y que tenía en “la mira” eliminar ese tributo tan pronto como las condiciones fiscales lo permitan. Durante la semana, el ministro cometió un traspié en su comunicación a través de la red social X, cuando presentó una proyección de crecimiento de las exportaciones de petróleo, gas y minerales para los próximos años en comparación con el sector agropecuario. “En seis años, entre Energía y Minería, vamos a tener un saldo exportador equivalente a dos veces el agro,” explicó, refiriéndose al superávit por US$47.000 millones de ambos sectores para 2031. La diferencia en el tratamiento oficial entre estas actividades y el agro es evidente: mientras a las primeras se les diseñó un programa de incentivos para atraer inversiones como el RIGI, al sector agropecuario se le ha mantenido una elevada presión tributaria. En un segundo mensaje, el ministro enlistó una serie de medidas que, a su juicio, se han tomado en relación con el campo, incluyendo el tipo de cambio, y también pidió “paciencia” respecto a la baja de las retenciones. “La paciencia no te da renta,” respondió Ignacio Kovarsky, presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap). El panorama que presenta el ruralista bonaerense se refleja en los números de la próxima campaña de granos gruesos: en la mayoría de las regiones, los márgenes son negativos, sobre todo para aquellos modelos de campo alquilado. Por ello, la decisión que tome el Presidente resulta clave. Una reducción substantiva de los DEX podría marcar un momento decisivo para el agro. Esto es lo que se espera, dado que fue el propio Milei quien, durante la campaña, posicionó al campo como un actor principal en un futuro próspero para el país. Con el actual nivel de retenciones, el sector solo crecerá si las condiciones climáticas son favorables, como ocurre en este momento con el área sembrada de trigo. Todas las proyecciones de los especialistas del agro indican que tanto la superficie como la producción podrían incrementarse en los próximos años si se produjera una baja o eliminación de los DEX. Esto se traduciría en mayores inversiones y gastos que generarían ingresos en los lugares que más los necesitan: el interior del país. Mientras la agricultura enfrenta estos desafíos, la ganadería presenta un panorama más esperanzador. “Nunca como en los últimos años hemos tenido condiciones tan favorables como ahora,” afirmaba con entusiasmo el consultor Fernando Canosa en la Exposición Rural. “Hemos tenido casi 20 años de restricciones,” añadía, refiriéndose a la intervención en los mercados de carne promovida por el kirchnerismo. No obstante, ahora surgen nuevos desafíos para la actividad, como las cargas impositivas provinciales y municipales, la infraestructura y las disparidades en el estatus sanitario de la industria. Sin embargo, la mejora del tipo de cambio en las últimas semanas y la recuperación de los precios internacionales de la carne parecen ofrecer un nuevo impulso a este negocio. El entusiasmo palpable en Palermo refleja las favorables perspectivas que se abren para la ganadería.

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