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» El Ciudadano
Fecha: 08/12/2025 13:09
Por Luciana Mangó y Daniel Zecca Desde la JP Descamisados, Alejo Díaz trabaja para el armado de la candidatura presidencial de Axel Kicillof. Lo acompañan dirigentes de diferentes espacios que creen que el gobernador de la provincia de Buenos Aires es la mejor carta que tiene el peronismo para el 2027. Hijo de militantes socialistas, suma voluntades dentro del espacio “Derecho al Futuro”. En su paso por el stream Política de El Ciudadano, advirtió que no alcanza con el “no a Milei”. Y aclaró: “Tenemos que ser propositivos, tenemos que tener una propuesta”. —¿A qué organización pertenecés dentro del PJ? —Soy militante de la JP Descamisados, que es una organización política, una corriente peronista que es una corriente federal. Nosotros estamos instalados acá trabajando desde 2015. Hacemos un trabajo en el territorio, trabajamos con los clubes, con la militancia barrial. No hemos llegado a tener organización universitaria, pero siempre participamos dentro del espacio del PJ, que es el espacio que nos nuclea. —¿En qué territorio están trabajando? —Nosotros tenemos un centro cultural que lo usamos como base, que está en Riobamba 65 bis, se llama Oveja Negra. Ahí desarrollamos actividades de distinto tipo. Está abierto más que nada a la comunidad. Nosotros como organización lo utilizamos también para las cuestiones políticas, reuniones, etcétera. Pero la gente que circula por ahí son vecinos, se dan talleres. A partir de eso, como hay compañeros que están ahí presentes en el Oveja, se hace un trabajo de relevamiento de las problemáticas de las personas. Porque muchas veces llegan por un taller y después te encontrás con que esa familia tiene algún inconveniente, y se encuentran contenidos por los compañeros. A partir de ahí se busca alguna acción concreta que pueda colaborar con esas personas. Se dan talleres para los chicos. Por ejemplo, de dibujo y apoyo escolar. Muchos chicos terminan la escuela, porque a lo mejor en la casa no pueden hacer la tarea, y ahí los ayudan. De hecho, hay un caso de un chico que consiguió trabajo porque aprendió a leer y a escribir en el Oveja, porque también se daban talleres de alfabetización en su momento. Es un trabajo que a uno lo renueva entre tanto quilombo con la política que hay. Vos le podés transformar la vida a una persona a través de un trabajo militante. Además, los compañeros que están ahí son personas que no viven de eso. —¿Y cómo llegás vos al peronismo? ¿Familia peronista? —Mis papás eran socialistas. Ellos hacían un trabajo territorial también. Por eso también yo me metí después a militar en Descamisados, porque era una organización que trabajaba en el territorio y era lo que yo había aprendido cuando era pibe. Nada más que mis papás lo hacían en el socialismo. —¿Y vos por qué te cambiaste? ¿Por qué te fuiste al peronismo? ¿Qué encontraste ahí? —Lo que pasa es que, claro, yo empecé a entender un poco más los debates políticos en la adolescencia. Yo escuchaba cosas que decía (el ex gobernador) Miguel Lifschitz que no me cerraban después con cómo trabajaban de verdad dentro del partido. “Acá hay algo que no se condice con la realidad, con el discurso”, decía yo. Ahí es donde dije: «A mí esto no me cierra». Entonces, a razón de que tenía un círculo de amistad más peronista, empecé a vincularme con otra política, con otra lectura, empecé a pensar de otra forma. —¿Y qué dijeron en tu casa? ¿Cómo son esas charlas políticas ahora? —No, no dijeron nada. Nosotros siempre fuimos de militar mucho para que a la gente le vaya bien, para que las personas puedan progresar. Por ahí la línea era más “nosotros hacemos la militancia para los otros”. Entonces, se generaron debates que estuvieron buenos. Después mi mamá también empezó a cambiar un poco, por algunos enojos que tuvo en su momento con su partido —¿Y ahora en qué está tu organización? ¿En qué están trabajando, más allá de la militancia barrial? —Estamos organizando lo que es el movimiento “Derecho al Futuro”, con un conjunto de compañeros. Eso nace de lo que era una organización, que es “La Patria es el Otro”, que surgió en el 2023, inmediatamente después de las elecciones nacionales y provinciales de Buenos Aires, cuando gana Axel Kicillof. Fue una línea que empezó a trabajar (Andrés) “Cuervo” Larroque. La consigna en su momento era que, a pesar del quilombo en el que estamos, no bajemos los brazos, que hay que seguir militando, desde el minuto cero, pero no en un sentido de solo resistencia a este gobierno liberal, sino también para construir algo nuevo. Ese proceso empezó en el 2023 y se trasladó acá a Rosario, a través de unos compañeros. En parte, Hugo Ríos, que es el representante de la corriente peronista de Descamisados, que se alineó con Axel Kicillof, que empezó a ser el que tenía que defender al pueblo de este gobierno. Y también, en esa conversación se suma Marina Magnani, ex concejala de La Cámpora, que también participa en el PJ provincial. Y también un ex diputado provincial de Nuevo Encuentro, que es José María Tessa, que también fue secretario general de Amsafé. Y ellos empezaron a gestar acá en Rosario lo que era “La Patria es el Otro”, más o menos en el 2023, para que entiendas que este proceso que estamos haciendo ahora, que es el movimiento “Derecho al Futuro”, no es algo que empezó necesariamente ahora. Sí se lanzó oficialmente en mayo del 2025, pero ya se venía organizando esa agenda. Nosotros empezamos a trabajar con otro compañero que se sumó también, que es Matías Benítez, que me dice: «Che, está bueno esto lo de Axel, quiero ver si podemos empezar a hacer algo en conjunto». Matías Benítez es también primer congresal de la JP departamental y es consejero directivo de la UTN, también un tipo de mi edad. Ahí nos pusimos en contacto y empezamos a organizar un grupo de jóvenes para empezar a caminar esta transformación, que tiene como finalidad un proyecto nacional. —¿En qué está ese proceso de organización? —Nosotros estamos tratando de ser propositivos, de empezar a organizarnos en el sentido de no solo resistir las políticas neoliberales o liberales de Milei. Tenemos que ser propositivos, tenemos que tener una propuesta. No podemos ir sólo con el «no a Milei». Tenemos que plantear nuestra mirada, pero para eso hay que trabajarlo con las personas que se supone que son las que saben del área o las que están involucradas. Por ejemplo, cuando hablaban de la reforma laboral, nosotros estamos en contra de una reforma laboral que no beneficia a ninguno de los trabajadores. Bueno, ¿con quién tenemos que hacer una reforma laboral? Porque a lo mejor la que está ahora no da resultado. El tema es ser propositivos en decir: vamos a proponer cuál es la reforma laboral nosotros que creemos que necesita el país para tener más producción, que le haga bien a los trabajadores. Y eso, ¿con quién lo tenemos que discutir? Con los trabajadores, con los gremios. —¿El aglutinante es el liderazgo de Kicillof? —Sí, el aglutinante es el liderazgo de Kicillof. La idea nuestra es armar este proyecto para el 2027, es decir, cuando él tenga que ir por la presidencia. Cuando vaya por la Presidencia, tener nosotros ya armado un proyecto para aportarle a lo que es Axel Kicillof. —¿Cómo analizás la interna de Kicillof con la ex presidenta de la Nación, Cristina Kirchner? —A nivel nacional, nosotros no desconocemos a Cristina. Sabemos que es una, si no la militante más importante que tiene el país, es una gran mujer. Creemos que tal vez Cristina no tiene que hoy tomar la conducción sobre el Partido Justicialista o determinaciones sobre estrategias electorales. Más bien ella tiene que estar en un lugar de -ya hizo un montón por el país- darle paso a las nuevas generaciones. Nosotros estamos trabajando en esto y después el resto lo resolverán los compañeros, seguro. —¿Cómo se relacionan ustedes con el resto de los sectores del peronismo provincial? ¿Qué pensás de las candidaturas que hubo en el peronismo durante este año? —Más allá de que la lista fue de unidad y fue lo que definió el PJ, si nosotros teníamos una instancia de no querer elegir eso era previa, era para generar un debate anterior en el PJ. Es por eso que ahora estamos trabajando para que no vuelva a suceder eso, que a lo mejor no fue tan amplio el diálogo antes de salir con esa propuesta. Después, nos parece que está bien la definición que tomó el PJ. Nosotros tenemos una compañera que es Miriam Vázquez, que de hecho fue en la lista de Juan Monteverde también en las elecciones a concejales. Ella quedó número seis en la lista, y entraron cinco. Hoy tenemos que pelear por lo que queremos. Nosotros, si tenemos algo para defender, tenemos que trabajar para defenderlo. Por eso estamos empezando con esta construcción de sumar más espacios, sumar más compañeros. Estamos haciendo un trabajo de tratar de empezar a charlar con los sindicatos. Está bueno para el relevamiento de un montón de datos de cómo hoy están viviendo los trabajadores, de cómo empezar a construir esa agenda que Axel necesita para el 2027. Así que venimos con ese trabajo de sumar más militantes, más compañeros, o personas que quieran participar. Axel fue muy amplio y muy claro cuando dijo: «Acá no sobra nadie. Hay que sumar a la mayor cantidad de fuerza que podamos. No importa si está más a la izquierda, si ellos tienen la voluntad de construir un proyecto nacional. Hay que tener ese debate y avanzar con eso». —¿Qué dice la gente en los barrios de Kicillof? —Tiene muy buena recepción. De hecho, nosotros, que ya empezamos en el 2023 a charlar un poco con el tema de Axel, sin mencionárselo me decían: «Che, a mí me gusta Axel Kicillof, es un tipo que es joven, es de una nueva generación política». Que es también lo que peleamos: a lo mejor los tipos más grandes, que ya llevan un montón de años, nos tienen que brindar otras herramientas, pero estamos en un contexto totalmente distinto al de militancia o de intereses que tenían hace un montón de años esa generación. Entonces, Axel va un poco con eso. Y nosotros creemos que ellos tienen que colaborar con darle paso a las nuevas generaciones. —¿Cómo analizás o qué lectura hiciste de lo que fue el triunfo en su momento de Axel en Buenos Aires en septiembre, pero después la posterior derrota en octubre? ¿Con qué creés que tiene que ver? —La verdad, me sorprendió que hayan ganado las elecciones, que les haya ido tan bien. No esperábamos ese resultado, pero evidentemente tuvieron que darse alguna estrategia para que les vaya así de bien y les resultó. Yo creo que un poco fue la campaña del miedo, si se puede decir, o eso de que todo podía explotar. Y es tan delicado el tejido social, que a nadie le sobra nada, todo lo contrario. Tenés que tener dos, tres laburos, entonces si encima se dispara todo, es peor.
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