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  • Confirman un segundo caso de miasis en un bebé de dos meses

    » Data Chaco

    Fecha: 23/11/2025 02:26

    Este viernes, se confirmó el segundo caso de miasis en el Hospital Pediátrico "Juan Pablo II" de Corrientes, en menos de una semana. Se trata de un bebé de dos meses de la ciudad capital vecina, que se suma al caso de la pequeña de 11 años de Santo Tomé, que fue trasladada por larvas en la cabeza. El segundo caso encendió nuevamente la preocupación por las condiciones de higiene y el control de heridas, factores directamente asociados a esta parasitosis. Según explicaron especialistas, se trata de cuestiones parasitarias, muy común en esta zona subtropical y más en verano. "El niño muchas veces tiene pediculosis o heridas que, si no se lavan bien con agua y jabón, si no se los baña, si no se plancha bien la ropa, son caldos de cultivo para que se instale la mosca y ponga sus huevos y ahí crece está infección parasitaria", agregó. Además, sostienen que "se asocia a una falta de limpieza en general, entre ello, lo de las heridas". Puede presentarse en todas las edades, especialmente cuando no se realiza un adecuado cuidado de la piel. ¿QUÉ ES LA MIASIS? La miasis es una infestación causada por larvas de moscas de diversas especies, como Sarcophaga, Dermatobia, Cochliomyia, Lucila y Chrysomya, que depositan sus huevos en heridas, pliegues o zonas vulnerables del cuerpo. También conocida como "bichera", "agusanamiento" o "gusanera", se produce cuando las larvas invaden la piel y se alimentan de tejidos vivos, muertos o fluidos orgánicos del hospedador. Existen tres formas clínicas principales de miasis: La forunculoide: produce lesiones similares a forúnculos, con secreción y presencia de larvas visibles. La larva suele salir al exterior en 2 o 3 semanas. La lineal rampante: la larva migra bajo la piel dejando trazos serpenteantes. La subcutánea con tumores ambulatorios: genera tumefacciones dolorosas que aparecen y desaparecen durante varias semanas, hasta que la última lesión se ulcera y expulsa la larva. El tratamiento puede ser ambulatorio u hospitalario según la gravedad. Sus métodos incluyen la oclusión de la abertura para obligar a la larva a salir, la aplicación de sustancias paralizantes o larvicidas —como ivermectina— y la extracción mecánica de los parásitos. Mientras continúan internados los dos pacientes, profesionales insisten en la importancia del control de heridas, el aseo corporal y la consulta médica temprana para evitar complicaciones. Notas Relacionadas

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