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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 04/11/2025 10:52
Los empleados bancarios perciben un ajuste salarial alineado al índice de precios divulgado por el organismo oficial (Imagen ilustrativa Infobae) El sector bancario de Argentina atraviesa noviembre bajo nuevas condiciones salariales, tras la actualización paritaria que definieron la Asociación Bancaria y las entidades del ámbito público y privado. El acuerdo contempla un incremento alineado a la inflación oficial, el cual repercute en la totalidad de los ingresos del personal alcanzado por el convenio colectivo vigente. El salario básico más la participación en las utilidades empresas, conocido como ROE, configura el ingreso inicial para los trabajadores que inician funciones en sucursales argentinas. De acuerdo a la escala oficial, el haber bruto correspondiente al mes de noviembre se ubica en 1.915.982,88 pesos. Esta suma incluye tanto el monto base como la participación en las ganancias, lo que marca un estándar uniforme para todos los encuadrados bajo el mismo acuerdo colectivo. La modalidad de actualización busca mantener los salarios atados a la evolución de los precios, despejando focos de conflicto que afectaron otras áreas del empleo registrado. En todos los casos, la suba impacta sobre las remuneraciones mensuales brutas, normales y habituales, tanto remunerativas como no remunerativas. En la práctica, dicho piso brinda la base para el cálculo de adicionales contemplados por categorías, función, antigüedad u otros estipulados gremialmente. Durante este mes, además, los bancarios celebran su día profesional, una jornada tradicionalmente acompañada por el pago de un bono extraordinario que integra los ingresos de miles de empleados. El monto del bono por el Día del Bancario, cuyo pago se efectiviza el jueves 6, llega a 1.708.032,46 pesos para los trabajadores que cumplen su primer año en la actividad. El valor del bono, al igual que los haberes mensuales, se ajusta considerando los índices de inflación oficial y se sujeta a eventuales revisiones posteriores en línea con el índice de precios publicado por el INDEC. La suma del salario inicial más el bono extraordinario por la jornada profesional sitúa el ingreso bruto de referencia de un trabajador bancario, sin adicionales por títulos, presentismo o antigüedad, en 3.623.961,34 pesos para el mes de noviembre. Los salarios pueden crecer a partir de aquí según la aplicación de los adicionales previstos para quienes cuentan con más años de trabajo o antecedentes en el sector, alcanzando así montos aún superiores. El convenio, sellado entre la Asociación Bancaria y las cámaras representativas de bancos públicos (ABAPPRA), privados nacionales (ADEBA) y extranjeros (ABA), junto al Banco Central, establece un régimen de actualización automática que evita dilaciones administrativas en la homologación y habilita la aplicación directa de las mejoras salariales. Esta característica distingue a la actividad bancaria en un contexto donde otras negociaciones paritarias avanzan con mayor demora. El bono por el Día del Bancario supera el millón y medio de pesos, impactando en el ingreso total de noviembre (Imagen Ilustrativa Infobae) El impacto de la suba no se limita a la remuneración básica. Según lo informado oficialmente, la actualización alcanza a todos los conceptos convencionales y no convencionales, tanto remunerativos como no remunerativos. Esto incluye adicionales por función específica, horas extras y premios por presentismo o productividad, consolidando un esquema que se plantea como referencia en la puja salarial del mercado formal argentino. El acumulado de recomposición salarial en lo que va del año asciende a un 22 por ciento sobre los valores de diciembre 2024, un dato que coloca a los empleados bancarios entre los gremios que afirmaron haber superado el ritmo de la inflación, ofreciendo una perspectiva de estabilidad dentro del sector. Este porcentaje engloba las revisiones correspondientes de enero a septiembre, integrando así los últimos ajustes pactados entre las partes. La secretaría de Trabajo homologó los acuerdos y el retroactivo correspondiente se abonó con los sueldos de octubre, lo que permitió que el impacto de la mejora se reflejara de inmediato en los haberes mensuales. Esto consolidó una práctica frecuente en el sector, donde la actualización salarial no requiere demoras administrativas adicionales, garantizando así que los trabajadores perciban los nuevos valores en tiempo y forma. Sergio Palazzo, titular de la Asociación Bancaria, reivindicó el esquema negociado, al sostener que el sindicato volvió a asegurar que los trabajadores bancarios preservan el poder adquisitivo frente a la inflación. La conducción gremial expresó su compromiso con la defensa del salario real y recalcó que el esquema actual resulta un modelo de referencia en el marco de la negociación colectiva argentina. El pago del bono extraordinario por la jornada profesional mantiene su condición de ingreso no habitual. Su elevación a 1.708.032,46 pesos en noviembre establece un nuevo récord en la actividad financiera formal y premia el esfuerzo y la trayectoria del personal. El beneficio se adiciona al salario del mes y es reconocido por el sistema bancario como una compensación vinculada tanto al desempeño como a la permanencia en la carrera financiera. Las diferencias en las escalas salariales de bancarios, tanto en bancos públicos como privados, desaparecen con la aplicación de la paritaria sectorial. El monto definido corre como piso mínimo para todos los empleados del sector cubiertos por el convenio, lo que refuerza la posición de los bancarios dentro de los trabajadores mejor remunerados del ámbito formal argentino. El sector financiero no dejó de experimentar situaciones de tensión en algunas entidades específicas. En el caso de Banco Santander, se conformó una mesa de diálogo donde el gremio discute condiciones de trabajo y la preservación de los puestos laborales. A pesar de episodios puntuales, la actualización atada a la inflación evitó conflictos gremiales estructurales durante el período. En el marco de discusiones más amplias sobre la estructura del empleo en Argentina, la Asociación Bancaria marcó una postura crítica frente a proyectos de reforma laboral impulsados por las autoridades. El gremio manifestó su oposición a iniciativas que impliquen la pérdida de derechos adquiridos, modificaciones en los regímenes jubilatorios y eventuales privatizaciones de la banca estatal. Durante el 164° Plenario Nacional de Secretarios Generales, el sindicato expuso su defensa de la banca pública y del trabajo registrado, argumentando que estos son pilares del desarrollo nacional y advirtió sobre eventuales intentos de modificar de forma regresiva la legislación vigente. Los participantes del encuentro plantearon su disposición a mantenerse activos en la defensa de las condiciones laborales alcanzadas por el sector. La estructura de incremento salarial y el bono extraordinario para noviembre se sostienen como factores centrales en la organización gremial del sector. La práctica de las actualizaciones automáticas mediante la aplicación de la inflación registrada establece un esquema que, hasta el momento, logra mantener el poder de compra de los sueldos bancarios en un entorno de alta volatilidad económica. Los bancarios recibirán los montos acordados en tiempo y forma, dado que los pagos no se atan a procesos burocráticos de homologación, sino que las subas impactan de inmediato sobre las remuneraciones. Este mecanismo fue ratificado tanto por la dirigencia sindical como por los representantes de las cámaras bancarias que intervinieron en las negociaciones de la presente etapa. El funcionamiento del esquema paritario actual consolidó la referencia salarial de los bancarios en la dinámica sectorial. A su vez, el resultado de la negociación influyó en otras ramas que atraviesan procesos de revisión salarial, potenciando la postura de varios sindicatos durante las discusiones colectivas de fin de año. La jornada conmemorativa del jueves 6 adquiere especial repercusión este año, por la cuantía del bono y por la negociación que acompañó su actualización automática. La suma final posiciona el beneficio como uno de los más altos del mercado del trabajo formal, según lo acordado entre las partes y en función de la evolución de la inflación relevada oficialmente. Las condiciones detalladas para noviembre contemplan la integración de todos los trabajadores bancarios registrados en el país. No existen distinciones para los empleados de bancos estatales respecto a los de firmas privadas y el piso salarial básico más el adicional está garantizado para toda la nómina encuadrada en el convenio colectivo sectorial vigente. El sector mantiene su posicionamiento diferencial dentro del conjunto de gremios tradicionales. La articulación entre la actualización periódica y los beneficios extraordinarios refuerzan la competitividad salarial bancaria en la economía formal, constituyendo un atractivo relevante tanto para el ingreso de nuevos trabajadores como para la permanencia del personal experimentado.
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