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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 28/10/2025 04:58
Las conversaciones informales pueden mejorar la salud mental, el bienestar y el sentido de pertenencia, según diversas investigaciones (Imagen Ilustrativa Infobae) Hablar con personas en contextos informales suele parecer una habilidad innecesaria o trivial. Sin embargo, diversas investigaciones coinciden en que estas conversaciones tienen un efecto considerable en la salud mental, el bienestar y el sentido de pertenencia. Lejos de limitarse a romper el hielo en situaciones incómodas, las interacciones breves abren puertas a nuevas perspectivas, amplían las redes personales y contribuyen a construir comunidades. Aunque muchas personas consideran que iniciar o continuar estos intercambios resulta difícil o poco placentero, existen técnicas y hábitos sencillos que pueden transformar el modo en que se vive el día a día y abrir posibilidades de relación y confianza, tanto en situaciones casuales como en entornos laborales o educativos. ¿Cuáles son los beneficios de las conversaciones informales? De acuerdo con un artículo de la revista Time, la psicóloga Gillian Sandstrom, conferencista en la Universidad de Sussex, inició su investigación tras experimentar el efecto positivo de una conversación casual en el metro de Toronto. La experta concluyó en diálogo con ese medio que estos contactos efímeros pueden elevar el ánimo, la energía y el bienestar en general. Además, señala algo relevante: “Todos tenemos una voz negativa en la cabeza que nos dice que no somos muy buenos en las relaciones sociales. Pero los datos sugieren que, en realidad, la gente te aprecia más de lo que crees”, un fenómeno conocido como “la brecha de agrado”. En las páginas de Psychology Today, Gwendolyn Seidman, profesora asociada de psicología en Michigan State University, cita investigaciones coordinadas por Esra Ascigil de la Universidad de Sabanci y su equipo. Estos trabajos recopilaron datos de miles de personas en Turquía y Reino Unido con el objetivo de analizar la frecuencia de interacciones tanto con conocidos como con extraños. El artículo científico reporta que “tener conversaciones con desconocidos y lazos débiles, así como simplemente saludar y agradecer a los lazos débiles, predijo una mayor satisfacción con la vida”. Pequeños gestos como el contacto visual o una sonrisa contribuyen a que las personas se sientan reconocidas y conectadas en su entorno (Imagen Ilustrativa Infobae) Los lazos débiles son vínculos sociales que se establecen con personas poco cercanas, como conocidos, compañeros ocasionales o individuos con quienes solo se comparte una parte limitada de la vida cotidiana. Estas relaciones no incluyen intimidad ni frecuencia de contacto, pero funcionan como puntos de conexión que facilitan el intercambio de información, oportunidades y perspectivas diferentes en distintos contextos sociales o profesionales. La evidencia sugiere que incluso gestos sencillos, como saludar o agradecer, impactan de forma positiva en la satisfacción vital, sin importar si se produce un vínculo duradero. En el análisis firmado por Linda R. Tropp, profesora de psicología social en la Universidad de Massachusetts Amherst, para The Conversation, se destaca el rol de estos intercambios como manifestaciones de “generosidad psicológica”. La especialista sostiene que “pequeños gestos como el contacto visual o una sonrisa, incluso de un desconocido, pueden fomentar sentimientos de conexión al indicar que nuestra existencia importa”. Un obstáculo frecuente, según la visión expuesta por Tropp, son las distracciones tecnológicas y la tendencia a minimizar el contacto visual o las sonrisas. Estas actitudes pueden traducirse en señales de desinterés y reforzar la desconexión social: “Como seres sociales, es natural que los seres humanos deseen ser vistos y reconocidos por los demás”. Estrategias para mejorar en las charlas casuales cotidianas Aunque los efectos son positivos, la práctica universalmente despierta reticencia e incomodidad. Sandstrom reconoce en Time que ella misma evitaba estos contactos. No obstante, después de una charla espontánea, notó que una simple interacción puede abordar temas inesperados y renovar el interés en las pequeñas conexiones cotidianas. A la hora de perfeccionar la capacidad de entablar este tipo de intercambios, los expertos enfatizan varias estrategias. Imaginar las conversaciones como una búsqueda del tesoro puede ayudar a descubrir detalles valiosos o curiosos del interlocutor durante el diálogo (Imagen Ilustrativa Infobae) 1 - Aceptación y el concepto de “búsqueda del tesoro” Alison Wood Brooks, profesora en la Escuela de Negocios de Harvard, también detectó desagrado entre sus propios estudiantes al afrontar el arte de conversar, según comentó en el artículo del mismo medio. Para la experta, el primer paso consiste en aceptar que los encuentros breves son inevitables en la vida social. Propone, a modo de recurso, imaginar esas charlas como una “búsqueda del tesoro”, con el objetivo de descubrir algo curioso o valioso de la otra persona. 2 - Aprovechar la información gratuita Debra Fine, autora de libros sobre comunicación, recomienda aprovechar la “información gratuita” del entorno inmediato. Si dos personas coinciden en un evento, el simple hecho de compartir ese contexto abre la puerta a preguntas fáciles y naturales sobre cómo llegó cada uno allí o qué expectativas tiene. 3- Evitar los temas que no son prioritarios En opinión de Fine, resulta conveniente evitar ciertos temas como el estado civil, la paternidad o la ocupación, ya que pueden resultar incómodos o demasiado personales. Como alternativa, sugiere preguntar, por ejemplo, “¿Qué haces fuera del trabajo o la escuela?”. Ante conocidos, la clave pasa por pedir que pongan al día sobre sus novedades. 4- No hacer comentarios sobre el aspecto físico Sandstrom sugiere evitar comentarios sobre el aspecto físico, que podrían resultar invasivos. Prefiere halagar elementos de expresión personal, como los accesorios, el peinado o la indumentaria. Un cumplido específico suele interpretarse como una invitación a compartir la historia detrás de ese objeto o elección. Cerrar una conversación de manera sencilla agradeciendo el intercambio ayuda a consolidar una experiencia positiva y deja la puerta abierta a nuevos contactos (Imagen Ilustrativa Infobae) 5- Avanzar hacia diálogos significativos El artículo de la revista Time detalla una táctica práctica para avanzar hacia diálogos más significativos. Según Brooks, conviene imaginar los temas como una pirámide: la base son asuntos rutinarios (clima, tráfico), pero la meta es escalar hacia cuestiones más personales tan pronto como el interlocutor sugiera alguna pista. Si alguien menciona un evento reciente, como un concierto, conviene preguntar por el momento preferido o la emoción más fuerte que vivió gracias a esa experiencia. 6- La presentación personal Otros consejos útiles incluyen preparar una breve presentación personal, una sugerencia impulsada por la Universidad Canada West. El texto indica que “es una forma de presentarte brevemente, transmitir un mensaje crucial y establecer una conexión con alguien”. Entre los pasos sugeridos figuran comenzar por el nombre, compartir un dato relevante o divertido, y buscar formas de intercambiar contacto futuro de forma natural. 7- El cierre de la interacción La experta en comunicación Diane Windingland recomendó a Time alguna fórmula sencilla para cerrar una interacción sin incomodidad: conectar a la persona con alguien más del entorno, resumir lo positivo del intercambio o simplemente expresar gratitud por la conversación antes de despedirse.
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