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Parana » Uno
Fecha: 14/08/2025 16:40
Las personas que viven con obesidad, diabetes y/o enfermedades cardiovasculares tienen más riesgo de complicaciones, hospitalizaciones y muerte por gripe. Las personas que viven con obesidad, diabetes y/o enfermedades cardiovasculares tienen mayor riesgo de complicaciones, hospitalización y muerte por gripe. La vacuna antigripal es una herramienta gratuita y efectiva para reducir ese riesgo, por lo que autoridades sanitarias y especialistas refuerzan el llamado a vacunarse a quienes todavía no lo hayan hecho en esta temporada. En lo que va de 2025, de acuerdo con el último Boletín Epidemiológico Nacional, se registraron 159 muertes con diagnóstico de influenza, el virus de la gripe. Una comunicación epidemiológica del Ministerio de Salud emitida a principios de junio destacaba que, de las 38 personas fallecidas hasta ese momento, casi todas (89,5%) contaban con información sobre comorbilidades o factores de riesgo. De ellas, el 91,2 % registraba al menos una comorbilidad o factor de riesgo para enfermedad grave, pero solo dos casos contaban con registro de vacunación antigripal en la temporada actual, aunque todos la tenían indicada. La vacunación antigripal, que desde 2011 se encuentra incorporada al Calendario Nacional, tiene como objetivo reducir las complicaciones, hospitalizaciones, muertes y secuelas de la infección por virus influenza en los grupos poblacionales de alto riesgo para el desarrollo de enfermedad complicada, entre los que se encuentran las personas con enfermedades cardíacas crónicas, obesidad y diabetes, entre otras. Gripe y enfermedades cardiovasculares Diversos estudios demostraron que la infección por influenza puede desencadenar infartos y ACV en personas con o sin enfermedad cardiovascular previa. "La relación entre influenza y enfermedad cardiovascular es bidireccional. Los pacientes que tienen enfermedades cardiovasculares están más predispuestos a padecer influenza y, al mismo tiempo, la influenza puede generar un empeoramiento de una cardiopatía preexistente o desarrollar una en personas que no la tienen", advirtió Sebastián García Zamora (MP 20.294), jefe del Departamento de Cardiología del Sanatorio Delta de Rosario, Santa Fe y director del Consenso de Inmunizaciones de la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC) y la Federación Argentina de Cardiología (FAC) para pacientes con cardiopatías. La vacunación antigripal puede reducir el riesgo de infarto hasta 10 veces y el de ataque cerebrovascular (ACV) hasta 8 veces. "Por eso desde las sociedades científicas empezamos hace algunos años a trabajar en la concientización acerca de la importancia de inmunizar a nuestros pacientes para prevenir estas complicaciones", destacó García Zamora. No obstante, admitió que queda mucho trabajo por hacer para mejorar las coberturas: "A pesar de que existe evidencia del beneficio de la vacuna contra la influenza para la población en general y sobre todo para las personas que tienen cardiopatías, todavía las tasas de vacunación siguen siendo insuficientes". Diabetes, obesidad y gripe En Argentina, seis de cada diez adultos viven con exceso de peso (la mitad con sobrepeso y la otra mitad con obesidad), mientras que el 12 % de la población tiene diabetes (la mayoría mellitus o tipo 2), según la última Encuesta Nacional de Factores de Riesgo (ENFR 2018). En muchos casos, esas enfermedades se presentan como comorbilidades (es decir, se dan juntas) y no solo predisponen al desarrollo de otras enfermedades crónicas, sino que también agravan el curso de infecciones respiratorias, a tal punto que las personas con diabetes tienen hasta seis veces más riesgo de complicaciones por influenza, por lo que todas deberían estar vacunadas, subrayó Carla Musso (MN 86.363), médica endocrinóloga, presidenta de la Sociedad Argentina de Diabetes (SAD). "Las personas con obesidad tienen mayor tasa de hospitalización, mayor necesidad de internación en unidades de terapia intensiva, menor respuesta a antivirales o antimicrobianos, una eliminación viral más lenta y menor respuesta a vacunas", dijo Musso, coordinadora del área de diabetes de la Fundación Favaloro, quien destacó que esa es una lección aprendida ya desde la pandemia de gripe H1N1, en la que se observó que más de uno de cada cuatro fallecidos en Argentina tenía obesidad. "La obesidad es la madre de muchas enfermedades, incluida la diabetes, con la que convive: una lleva a la otra. Y es probable que las personas con obesidad y diabetes tengan también enfermedad cardiovascular establecida, enfermedad renal, lo que incrementa aún más el riesgo", añadió.
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