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» Clarin
Fecha: 08/08/2025 14:40
Recibir una multa de tránsito puede traer más inconvenientes que una sanción económica. Podrías enfrentar una acumulación de puntos en tu licencia, aumento en el seguro de vehículo, suspensión del registro e incluso, en algunas ciudades de Estados Unidos, riesgo de encarcelamiento. No todas las infracciones ameritan ir a juicio. En muchas ocasiones, puede ser más práctico pagar la multa o acudir a la escuela de manejo, especialmente si se trata de tu primera infracción en años. Sin embargo, algunas multas pueden ser impugnadas con éxito. Por ejemplo, si el oficial de tránsito comete errores en el proceso, usa radares sin calibrar o no puede demostrar que cumpliste con todos los elementos de la infracción Además, si decides pelear la multa, prepárate: el proceso puede implicar comparecer varias veces, presentar evidencia, testificar con claridad y, en algunos casos, incluso aprovechar defectos procedimentales del oficial. Cómo impugnar con éxito las multas de tránsito en Estados Unidos y no ir a la cárcel Algunas multas pueden ser impugnadas con éxito. 1) Evaluar la multa y sus consecuencias: Revisa bien el tipo de infracción: velocidad, cruce en luz roja, uso de celular, etc. velocidad, cruce en luz roja, uso de celular, etc. Infórmate sobre las posibles sanciones: multa, puntos, aumento del seguro o suspensión de licencia. sobre las posibles sanciones: multa, puntos, aumento del seguro o suspensión de licencia. Pregunta si puedes elegir entre pagar o asistir a una escuela de manejo para evitar puntos. 2) Considerar si vale la pena pelearla: Si es tu primera multa en años y no produjo consecuencias graves, puede ser más sencillo pagar o hacer escuela de manejo. Pero si acumulas puntos, el seguro puede subir o hay riesgo de suspensión de la licencia, podría ser mejor no impugnarla. 3) Investigar la ley específica infringida: Identifica el artículo del código de tránsito citado en la multa. citado en la multa. Busca el texto legal exacto para entender sus “elementos” y qué debe demostrar el estado. 4) Detectar posibles defensas: Defensas técnicas: demostrar que no se cumplieron todos los elementos del delito (por ejemplo, no era zona residencial o no había una señalización adecuada). demostrar que no se cumplieron todos los elementos del delito (por ejemplo, no era zona residencial o no había una señalización adecuada). Desafíos a la percepción del oficial: cuestionar visión, distancia, calibración de radar o legitimidad de la prueba. cuestionar visión, distancia, calibración de radar o legitimidad de la prueba. Situaciones justificadas: evalúa si hay un “error de hecho” (como una señal tapada) o de “necesidad” (si la infracción cometida la hiciste para evitar un daño mayor). 5) Prepararte para la audiencia: En la audiencia inicial (arraignment) , decides: pagar, declararte culpable, solicitar escuela de manejo, o declarar inocente. (arraignment) pagar, declararte culpable, solicitar escuela de manejo, o declarar inocente. Si optas por la audiencia, prepara tu estrategia: practica tu testimonio, enfócate en las dudas sobre elementos del delito o errores del oficial; reúne pruebas: fotos, testigos, documentos, calibración del radar, etc.; está atento a la ausencia del oficial (si no comparece, la multa podría ser desestimada automáticamente). 6) En la audiencia: Primero, el oficial presenta su versión o evidencia. Puedes objetar si hay testimonios fuera de su experiencia directa (hearsay) o una ectura directa de notas. Luego, tú tendrás oportunidad de contrainterrogar: pregunta sobre calibración, condiciones del radar, visibilidad, etc. Más tarde, expón tu caso con orden y claridad, explicando por qué la infracción no cumple con los elementos o se justifica. 7) El veredicto y opciones posteriores: El juez emite condena o absolución. En caso de pago o culpabilidad, podrías negociar reducción de multa o pedir escuela de manejo. Si pierdes, puedes apelar según las reglas locales y plazos establecidos. Pelear una multa de tráfico puede ahorrarte dinero y puntos en la licencia, pero exige tiempo, preparación y compromiso. Si la infracción no implica consecuencias graves, a veces es más práctico pagar o acudir a la escuela de manejo.
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