13/07/2025 11:01
13/07/2025 11:01
13/07/2025 11:01
13/07/2025 11:00
13/07/2025 11:00
13/07/2025 10:56
13/07/2025 10:55
13/07/2025 10:54
13/07/2025 10:53
13/07/2025 10:52
Buenos Aires » Infobae
Fecha: 13/07/2025 04:39
María Laura Santillán Con Santiago Korovsky Es un personaje en sí mismo, muy talentoso y muy querible. A fines del año pasado, la serie “División Palermo” ganó uno de los premios internacionales más importantes de la industria audiovisual, Mejor comedia de los Emmy Internacional. Llamé a Santi para entrevistarlo por el premiazo y me dijo: estoy con el montaje de la segunda temporada de “División Palermo”, quizás en cinco, seis meses puedo. – Estuvimos negociando porque se iba estirando. Se nos hizo larga. – El tipo se gana los Emmy y no da una nota. – Porque fue verdad. Vos me dijiste: no andes dando notas por ahí y no dí ninguna. Santiago es el creador, el guionista, el director, el protagonista de “División Palermo”, de la primera y de la segunda temporada a punto de estrenarse. Cuando se mete en el montaje ya no puede hablar de otra cosa, ya se está comiendo las uñas. – ¿Estás metido ahí, enfrascado, sin hacer nada más que eso? – Sí. A pesar de que soy actor, no soy muy amigo de la exposición. Después de la primera temporada me sorprendió la abrumadora cantidad de notas. – Me mandaste fotos y estaba todo el tiempo encerrado. – Sí, no es que estaba en mi casa, estaba todo el tiempo editando. Yo soy una persona muy obsesiva y necesito concentrarme mucho. Son muchos procesos porque al mismo tiempo que estamos editando, estamos haciendo color, estamos haciendo el sonido, estamos haciendo la música. Yo paso de, por ejemplo, editar el capítulo tres, a hacer la música del capítulo dos a hacer la gráfica de algo, hacer el efecto especial de la sangre en el capítulo uno. Todo ese proceso simultáneo, estoy de un lado al otro, es bastante abrumador. “NO SOY UNA PERSONA QUE SE CARACTERICE POR EL DISFRUTE, TIENDO A PASARLO UN POQUITO MAL” – ¿Es un sufrimiento? – Es un sufrimiento y es un privilegio y es un placer. Es una mezcla de todo, es una mezcla de todo. Yo no soy una persona que se caracterice por el disfrute, digamos. "Yo soy una persona muy obsesiva y necesito concentrarme mucho", reveló Santiago Korovsky (Fotos de Candela Teicheira) – Yo la paso mal en general… – Yo tiendo a pasarlo un poquito mal, jajajaja. Tiendo a eso. Estoy trabajándolo para permitirme más momentos de placer, más momentos de relax y que el trabajo no sea tan sufrido. Y me parece que de la temporada uno a la dos pude disfrutar más del proceso y mi meta es no estresarme tanto en el próximo por sobre todas las otras cosas. – Para eso es terapia. – Para eso hago terapia, para eso trato de meditar, para eso hago ejercicio, para eso todo. “SOY UNA PERSONA QUE AGARRA LO QUE TIENE A MANO PARA TRATAR DE BAJAR LA ANSIEDAD” – ¿Todos los días meditás? – No, me encantaría. No, lejos de eso, me pongo un audio de una meditación guiada o me pongo a contar del uno al diez mientras respiro. Son esas cosas que uno hace cuando está mal, cuando está bien cuesta mantenerlas. Cuando estás pasado de ansiedad, ahí lo hacés. En la temporada uno tenía un coach en relación a la meditación y antes de ir al set meditaba. En esta fue más esporádico. No soy ningún gurú, soy una persona que agarra lo que tiene a mano para tratar de bajar la ansiedad. – La terapia no la largás. – Desde los 18 que voy cambiando de terapeutas y voy mejorando poquito. – Para mí sos un nerd. Sos licenciado en Comunicación Social y además estudiaste Diseño de Imagen y Sonido. – Estaba terminando la carrera de Comunicación Social y me puse a hacer optativas materias de otras carreras. Hay un formulario de la UBA que te permite, si tenés un porcentaje de materias de una carrera, podés hacer de otra. Qué pasaba? Yo hice dos veces el ingreso a la a la Escuela Nacional de Cine mientras cursaba Comunicación, se anotan 300 personas y a dirección entran diez por año. Quedé 11 la primera vez y la segunda entre el diez y el 20. Dije: termino la carrera y al final viste como son los caminos de la vida, probablemente haya sido mejor por dónde me llevó el azar. Gracias a eso llegué desde otro lugar, con otros conocimientos, con otra mirada. La carrera de Comunicación en la UBA me dio mucho de lo autogestivo. Te das cuenta que no te va a llamar Clarín, Infobae o Página 12 para que escribas una nota, mejor gestionate tu medio. Los medios están en un momento complejo, no sobra el trabajo. Me pasa mucho en la actuación también, no te quedes esperando a que te llamen. Esa sensación de ansiedad que te da depender de que otro venga a ofrecerte un trabajo. Yo empecé a hacer videos en YouTube y eso me llevó a que me llame Martín Piroyansky para actuar. Videitos por Instagram, y eso me llevó a que me llame Wainrach para actuar y así sketch y presentar proyectos. Yo encontré esa salida, otros encontrarán otra en los medios. Si quieres trabajar en un medio y lo conseguís genial, si no lo conseguís, hay otras herramientas y creo que la facultad me sirvió para eso. "Yo empecé a hacer videos en YouTube y eso me llevó a que me llame Martín Piroyansky para actuar", contó Santiago Korovsky – “División Palermo” ¿como la pensaste? ¿Cómo se te ocurrió que la Guardia Urbana podía ser un golazo? – Yo venía con varias ideas y no estaba pudiendo dirigir. Tenía un hambre de demostrar que yo podía hacer cosas y hacer reír, y actuaba en proyectos de otros y escribía para proyectos de otros y cada vez iba creciendo en eso, pero no estaba logrando meter un proyecto mío. La idea se me ocurrió pensando en que nosotros fuéramos policías, eso fue lo primero que se me ocurrió. La contradicción de esta cara, de este sujeto miedoso y ansioso siendo policía. Yo y mis amigos y compañeros, teatro. Después, charlando con Martín Piroyansky me dice: ¿si es guardia urbano en vez de policía? Y mi papá me dice: había una policía en la provincia de Buenos Aires, policía comunal a la que le decían los pitufos. Todos se reían y les hacían un poco de bullying porque no tenían armas. Me puse a investigar ese mundo de las fuerzas de seguridad formadas por civiles y me dije, acá hay algo distinto. – No son militares, no tienen armas. – Tampoco pueden hacerte una multa, no pueden labrarte un acta. – ¿Cómo relacionaste eso con las minorías y las discapacidades? – Pensé, qué época para hablar de las fuerzas de seguridad. Con todo lo que pasa entre las fuerzas de seguridad y la población en general, lo escindido que parece, y la fuerza de seguridad y las minorías, es todo un tema en discusión. Esta Guardia Urbana quiere mostrarse inclusiva, quiere mostrarse cercana a la gente, como una acción de marketing vacía. ¿Qué pasa si incluimos minorías? Y cuando apareció eso tuve que empezar a estudiar y a formarme en cosas que no sé. Cómo vive el mundo una persona en silla de ruedas, por ejemplo. Nos acercamos a una escritora, una chica en silla de ruedas que nos daba un montón de conocimientos que con los guionistas bajábamos a tierra y lo mismo hicimos para esta segunda temporada. SE CREE QUE LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD SON ‘SERES DE LUZ’, SON ‘GUERREROS’. – Todas estas minorías están en la serie en distinto lugar de lo que solemos verlas. Vemos personajes con una discapacidad que discriminan, que hacen cosas que están mal. ¿Cómo llegaste a eso? – Me fui dando cuenta charlando con muchas personas con discapacidad. que algo que suele hacerse es creer que las personas con discapacidad son ‘seres de luz’, son guerreros. Nuestra guionista, decía que fue al súper chino a comprar algo y le dicen: qué divina, viniste a hacer las compras. Señora, estoy acá en un supermercado. “TENÍAMOS QUE DARLES LA POSIBILIDAD DE REÍRSE DE ELLOS MISMOS” – Todos son buenos. – Todos buenos. Hay como una solemnidad que infantiliza y termina anulando al otro. Hay algo de “pobrecito, tanta desgracia tuviste”... No podíamos caer ahí. Teníamos que hacer personajes con contradicciones como somos nosotros, teníamos que darles a ellos también la posibilidad de reírse de ellos mismos. Así como yo me río de mí mismo en la serie, ellos también. Para esta segunda temporada nos juntábamos con los actores a tratar de entender las cosas que les pasaban, sus perspectivas del mundo y esas cosas las íbamos incorporando. MARÍA LAURA SANTILLÁN CON SANTIAGO KOROVSKY: “SE CREE QUE LAS PERSONAS CON DISCAPACIDAD SON ‘SERES DE LUZ’, ‘GUERREROS’, TENÍAMOS QUE DARLES LA POSIBILIDAD DE REÍRSE DE ELLOS MISMOS” – Tienen sexo, además. – Por supuesto, porque el sexo y la discapacidad parece un tema tabú. – Lo que más me gusta es que los personajes hacen cosas malas. – Jajajaja. Hace poco hicimos una proyección accesible para chicos y chicas autistas, para personas con discapacidad. Y decían eso, qué bueno que podamos reírnos de las cosas, somos personas con contradicciones. Y también: no pienses que necesitamos ayuda, preguntanos qué necesitamos nosotros. No significa que las personas con discapacidad no necesitan ayuda. Por ejemplo, en la temporada uno hay una escena de una chica en silla de ruedas parada en una esquina y la cruzan. Por ahí no quiere cruzar esa persona. Pero hay una necesidad de sentirse bueno. – Tenés que estar todo el tiempo gestionando que el chiste no choque. ¿Cómo hacés para hacer un chiste y reírte, pero que no te cancelen? ¿Cómo se prueban los chistes? ¿A quién le preguntás si un chiste no es muy zarpado? – A ellos mismos, siempre. Porque en la serie el 98% de las de las personas que tienen una discapacidad o que forman parte de una minoría están actuados por ellos. Primero asesores, después los actores y después, a veces un doble, triple chequeo. ¿Esto es gracioso? ¿Estamos en el lado correcto? – Porque podés ofender. – Podés ofender, pero algo peor es que a veces yo no me animaba a hacer los chistes y eran aburridos los personajes. Entonces lo que me decía Lucre, es que no sea aburrido, que no sea solemne. Busquémosle el humor a los personajes. “HAY EXCESO DE CORRECCIÓN POLÍTICA Y HAY EXCESO DE CRUELDAD” – Es interesante correrse del lugar políticamente correcto deliberadamente. Para que no sea tan obvio todo. – Sí. Más allá de que no sea tan obvio, también hay un exceso, así como hay un exceso de lo contrario. Hay un exceso de corrección política y hay un exceso de crueldad. Es encontrar un punto de empatía, de acercarse y tratar de entender. "Podés ofender, pero algo peor es que a veces yo no me animaba a hacer los chistes y eran aburridos los personajes", dijo Santiago Korovsky en entrevista con María Laura Santillán – Hay indiferencia, también. Lo que están atravesando las personas con discapacidad, la cantidad de problemas con sus escuelas, con sus transportes, con los pagos. – Sí, es un mundo que está siendo bastante complejo para todas las minorías y donde la empatía está muy cuestionada en todas partes del mundo. – ¿Te pasó que con algunos chistes te dijeron: con esto no? – Lo peor de un chiste que no sea gracioso, si no queda forzado. Eso es lo peor. Me escribieron personas a las que no les gustó la serie, pero en general fueron muchas las personas con discapacidad que me escribieron para ser parte de la segunda temporada. – Hay muchos personajes, todos distintos. ¿Cómo catalogamos al personaje de Betty? – Betty es un ángel, es una mujer con muchos años viviendo en un neuropsiquiátrico. Una actriz increíble. – Nilda Sindaco, la actriz, vivió muchos años en el Moyano. – Nilda es una genia, la voy a extrañar siempre. Falleció mientras estábamos en la serie, fue bastante complejo editarla y verla porque soy amigo desde hace mucho. Yo escribí un personaje para ella, la conocía, hice un documental sobre ella, me parecía que era una actriz increíble y que tenía que tener un rol. Y pensé en la secretaria, me acordé de Gasalla, de esos personajes que le iba bien a esa Guardia Urbana. Y esta temporada fue toda una discusión porque me decía: ‘¿Santi, me estás escribiendo más papel en esta segunda temporada?’ Bueno, Nilda, son seis capítulos en vez de ocho. ‘Pero no entendés nada, si la gente dice que soy el mejor personaje’. – Ella representa una minoría, personas con enfermedades mentales que vivieron años en un neuropsiquiátrico. – Sí, sin duda hay algo de esa cadencia de la voz que tiene el personaje que tiene que ver con también muchos años de clona. Sí, la salud mental siempre está presente, siempre está representada en la serie. – Está representada por distintos personajes. – Por todos, por mí y el resto. “SOY NEURODIVERGENTE TOTAL, SIEMPRE HUBO SOSPECHAS PERO AHORA ESTÁ MÁS CONFIRMADO” – Vos te asumís así, como naturalmente obsesivo, ansioso. – Sí, neurodivergente, total. Por ahí siempre hubo sospechas, pero ahora ya más… MARÍA LAURA SANTILLÁN CON SANTIAGO KOROVSKY: “ME ASUMO NEURODIVERGENTE TOTAL . SIEMPRE HUBO SOSPECHAS, AHORA MÁS CONFIRMADO.” “TENGO RASGOS VINCULADOS AL TOC, AL TDAH, A LOS TRASTORNOS DE ANSIEDAD, UN COMBO DE ESAS COSAS” – ¿Está confirmado? – Más confirmado. Tampoco soy un especialista en el tema y puedo ofender a alguien hablando. Tengo obviamente rasgos vinculados al TOC, al TDAH, a los trastornos de ansiedad, un combo de todas las cosas. Por ahí uno puede decir: ¡uy, Santi, qué personaje! Uy, Santi llega a un lugar y se quiere ir, no se lo puede abrazar, llega y no saluda porque está en sus cosas. Toda una suma de cosas que son muy particulares y muy personales. Tienen nombre, no para etiquetar, no para medicar y quedarme tranquilo. Siento que un montón de gente que me rodea es neurodivergente entre los artistas, entre los que hacemos esto, cada uno con sus rasgos. Yo no sé tanto de estas cosas, pero en algún punto algo se tiene que flexibilizar entre los neurotípicos y los neurodivergentes, porque no hay dos barreras. No voy a minimizar a una persona que tiene TOC y no puede salir a la calle sin abrir siete veces la puerta, hay cosas que realmente son discapacitantes. Yo dentro de todo, la llevo. “DIVISIÓN PALERMO ME OBLIGÓ A LIDERAR UN EQUIPO DE 100 PERSONAS. ALGO NUEVO QUE NO SUPE HACER MUY BIEN. APRENDÍ A LOS GOLPES”. – ¿No se te puede abrazar? – Me cuesta el contacto físico, por ejemplo. Un poco, tampoco es que no se me puede abrazar. Pero hay algo que me fui dando cuenta, a veces llegaba completamente exhausto y pasadísimo y totalmente alterado. Ahora hay cosas que puedo ir aprendiendo a regular, darme cuenta cuando necesito estar tranquilo y bajar y respirar y cuando es mucho ruido. Y también ir aprendiendo cosas sociales, porque “División Palermo” me obligó a lidiar con un montón de gente y entre comillas, a tener que liderar un equipo de 100 personas. Algo nuevo que no supe hacer bien, fui aprendiendo a los golpes y después terminó siendo bárbaro, pero que me hubiese gustado disfrutarlo. Aprender desarrollos sociales que no tenía y que tengo que seguir aprendiendo. Puedo estar ensimismado con mi celular tratando de resolver el vestuario del personaje y aprendiéndome la letra, pero en ese momento tengo que respirar, levantar la cabeza y saludar a todos los que están. Yo soy muy del híper foco y así como cuando estaba editando me costaba hacer una nota, cuando estoy tratando de resolver esto… También aprender que hay que motivar y que hay que tirar el equipo para adelante. – Las cosas que se hacen bien, que salen adelante, se hacen con los hiper focos para mí. – Porque también hay algo de estas características que son un don, sí como la gente sufre mi obsesión y la cantidad de tomas que repito. "Me cuesta el contacto físico, por ejemplo. Un poco, tampoco es que no se me puede abrazar", explicó Santiago Korovsky – Decime un límite de tomas. – El límite es el tiempo, me encantaría hacer muchas. Hay que ir rápido, pero puedo hacer ocho hasta que me digan ya está. En “División Palermo” en general hay cuatro o cinco como mínimo, cuando tenemos tiempo y no estamos en una urgencia. – Lo hacés bien porque estás hiper enfocado. – Hay algo de eso que me ayuda, uno empieza a ver estas cosas con menos culpa al poder usarlo a su favor. – ¿Culpa por qué? – La culpa es ser pesado para el otro. Lo que me cuesta aprender es a priorizar qué es lo central y cuál es el detalle. Pero sigo pensando que como decís vos, hay algo de eso que está bueno. Es aprender a trabajarlo y organizarlo en el tiempo. Porque algo que también tengo es una dificultad para llegar puntual a los lugares. Aunque esta vez, hoy, no fue culpa mía. No tengo un buen manejo del tiempo. Hay algo en el mundo del TH que se llama ceguera temporal, que es cierta dificultad del manejo del tiempo, no para poner excusas y andar diciendo che, ojo, yo tengo… – Creo que estás buscando las etiquetas para poner excusas. – Para zafar, jajajajaja. No, no es para eso, es para decir: loco, tengo dificultades en el manejo del tiempo, vamos a ponernos carteles. Desafíos. Aprender. – El enfocado resuelve, el disperso no resuelve porque abrió un montón de ventanitas y tengo mucho respeto y admiración por los enfocados. – Vos sos bastante enfocada. – Soy muy enfocada, pero no me pongo etiquetas. – Veo a directores y los que me gustan son obsesivos. Ni idea si son neurodivergentes porque ni idea que es ser neurodivergente, pero sin dudas tienen cierta sensibilidad en lo que les gusta y lo que no y van a tratar de que eso les guste. "Veo a directores y los que me gustan son obsesivos", aseguró Santiago Korovsky – No pareces de 40. Vos dudás, te planteás las cosas todo el tiempo. – Yo a los 40 me imaginaba más decidido. – Pero si sos re decidido, Santi, mirá lo que lograste. A los adultos les cuesta dudar, hacerse preguntas. Vos no te presentas como un señor de 40, sino como un chico joven que todo el tiempo está pensando. – Hay algo de tratar de ser honesto y ser vulnerable sino, no podés conectar con alguien. Armarte, ponerse una armadura es algo que no me sale. Cuando yo llegué a un set con un montón de personas dije, ¿cómo hago para dirigir? Es mi primera experiencia y tengo a 100 personas que tienen mucha más experiencia que yo. ¿De dónde saco la seguridad? Por ahí no tengo que sacar la seguridad, tengo que decir que estoy inseguro y tratar de dirigir con eso. – Hay gente muy conocida por vos en el elenco de “División Palermo”. Mejores amigos, hermana. – Me apoyo mucho en ellos. Aparte tengo una dificultad que es que actúo y dirijo, eso es complejo. Esta temporada tuve un codirector que me ayudó mucho, que es Rafa López Saubidet, pero además tengo un montón de amigos que son grosos y que me podían ayudar a encontrar a veces el tono o a buscar un chiste. – Martín Garabal dice que es la última temporada. ¿Por qué dice eso? – A priori es la última temporada. Yo, como ya sabés, tengo 40 y cada proyecto me lleva su tiempo, es un proceso de dos o tres años. – ¿Que tiene que ver con la edad? – No me quedan tantos años para hacer de un pibe de 30 o de 40, ciertos personajes. No voy a estar con “División Palermo” hasta los 50. Mi idea es ahora hacer una película, después podría ser otra y algún día volvernos a juntar. En un par de años, quizás para una última aventura, juntar a la Guardia, hacer un especial de Navidad, una película o lo que sea. Pero por ahora es la última temporada. “Los Simuladores” todavía están luchando para que se haga. Así que no vamos a prometer. – Una especial de Navidad, qué buena idea. ¿Es verdad que vivís en el piso de arriba de Martín Piroyansky? – En el piso de abajo. Y él vive arriba. Sí, tuve un poquito de complejo de inferioridad al principio de estar abajo de Piroyansky, jajajaja. Él siempre fue alguien que me fue marcando el camino en relación a la actuación y la dirección. Escribí con él la primera versión de la temporada de “Porno y helado”, lo vi dirigir. Con Martín Garabal también fui aprendiendo, aprendiendo a mis amigos. – ¿Y lo del piso? – Yo le cuidaba la casa porque viví diez años en un monoambiente y cualquier posibilidad que tenía de salir y estar en algo un poco más grande la aceptaba. Un amigo tenía que cuidar el gato, ahí estoy, dale, te cuido al gato. Durante par de años fui cuidador de casas y cuidando la casa de Martín, me enteré que la vecina de abajo vendía su departamento. Entonces empecé a tratar de hablarle. – ¿Para estar cerca de Martín? – No, no. Fue toda una contradicción porque pensé que se iba a dañar algo de la amistad, que iba a ser incómodo vernos todos los días. Es mucha cercanía, es no poder separarte ni aunque quieras. – ¿Cuánto hace que están viviendo casi juntos? – Tres años. Él viaja bastante igual, nos vemos una vez por semana. Nos cruzamos en el ascensor. – Pero no se dañó nada. – Al final no. Había algo de estar cerca de Martín que me gustaba y también me generaba eso. – ¿No puedo spoilear nada de la segunda temporada de “División Palermo”? – Podés espoilear haste el capítulo tres. – Pero sí que está Martín. – Que está Martín, que viene a sacarme el lugar, que es alguien que hace mejor las cosas que yo. – Mucho mejor. – Sí, sí, se juega. Él es un tipo más confiado y más seguro y jugamos también a eso. A la mirada de un pibe inseguro, como ve que otros resuelven más rápido que él algunas cosas. – Esta temporada de la serie es más violenta. ¿Es porque estamos en tiempos más violentos? – A mí me dan ganas de que la temporada se ponga un poquito más oscura, se ponga un poquito más adulta. "No me quedan tantos años para hacer de un pibe de 30 o de 40, ciertos personajes. No voy a estar con “División Palermo” hasta los 50", expresó Santiago Korovsky – Un humor negro, más dark. – Más negro, negro oscuro, ir por un lugar así, no quedarse en algo naif, infantil, ingenuo. Quizás también porque la vida se está poniendo compleja y porque a mí me gustan mucho las películas de mafia como “El Padrino”, como “Los intocables”. – Más sangriento. Hay sangre. – Más sangriento, más Tarantino, más de ese mundo. Y que aún así podía convivir con el humor. Y porque había que en algún punto subir la apuesta. La uno tenía una sorpresa que era presentar un mundo nuevo, un género nuevo. Este híbrido que tenemos. – Cruce de géneros – Me parece que ahora teníamos que subir la apuesta, seguir sorprendiendo y empezar a hacer giros de guión, personajes que se mueren, era una buena forma. – Cuando se supo que estabas en pareja con Celeste Cid pusiste un posteo muy lindo que decía: el robo del siglo, dos. ¿Cómo fue eso? ¿Cómo se dio? – ¿Cómo fue el posteo? Jajajajaja. Son cosas que me cuesta hablar, hay algo de la intimidad… Igual te la voy a contestar, pero hay algo que siempre fue parte de la intimidad y ahora de repente no. Hicimos una story y hay una nota sobre eso. – Ahora desde Grecia. – Y de repente estamos en Grecia y se vuelve una nota de Grecia y de la Acrópolis, una nota de un story. Es algo que a mí me cuesta, que no hablé todavía y hay que ir aprendiendo. ¿Cómo se dio? Nos conocimos en una entrega de premios a la distancia, nos saludamos, ella estaba por “Planners” y yo por “División Palermo”. Me felicitó por chat y varios meses después volvimos a chatear. “CHATEAMOS UN TIEMPO Y NOS ENCONTRAMOS UN DÍA SIN LOS CELULARES, SOMOS LOS DOS ADICTOS AL CELULAR” – Varios meses después. – Claro, ella estaba en ese momento en una relación. Varios meses después se termina esa relación, chateamos un tiempo y nos encontramos un día sin los celulares. Somos adictos al celular y decidimos encontrarnos un día. – O sea, recién se conocían y se pusieron de acuerdo en que no iban a llevar los celulares. – No los llevamos, los dejamos en nuestras casas. Eso fue difícil porque es una ansiedad... ¿Esta persona va a estar ahí en ese momento? ¿En ese lugar? ¿En esa esquina? Después nos costaba hasta pedir el menú, porque ahora viene todo con QR, nos dimos cuenta que no era fácil. “LOS DOS HABLÁBAMOS DE LA ANSIEDAD QUE NOS PROVOCA EL CELULAR” – ¿Cómo te ponés de acuerdo en eso de no llevar los celulares? Alguien tuvo que contar que le provocaba mucha ansiedad. – Los dos hablábamos de la ansiedad que nos provoca el celular. MARÍA LAURA SANTILLÁN CON SANTIAGO KOROVSKY Y LA PRIMERA CITA CON CELESTE CID: “NO LLEVAMOS LOS CELULARES, VENÍAMOS HABLANDO DE LA ANSIEDAD QUE NOS PROVOCAN” – Ya era tema en el chat. Vos hablás de la ansiedad, en general. – Hablo de mis contradicciones, jajajaja. – Ella todavía no había tomado nada con vos y ya sabía. – Que éramos, que era un tipo que tenía adicción al celular. ¿Pero quién no? Yo un poco más. “CUANDO CUMPLIMOS UN AÑO DE ESE ENCUENTRO QUISIMOS REPETIRLO. Y FUE TODO UN QUILOMBO.” – ¿Cómo fue ese encuentro sin los celulares? – Bien, nos fue bien, acá estamos. Cuando cumplimos un año de ese primer encuentro quisimos repetirlo. Y fue todo un quilombo. – ¿Por qué? – Porque yo ya iba a dormir a la casa de ella y tenía que hacer que el celular llegara a su casa. Al día siguiente tenía que seguir, entonces mandé mi celular, mi computadora, todo en un Uber a la casa de ella. ¡Confié en el Uber de una forma insólita! – Algo romántico, cumplimos un año y lo repetimos. Y después dijiste, ¿qué hago sin celular? – ¿Cómo hago para el día siguiente estar con el celular porque lo necesito? Salió todo bien, por ahora. El celular lo sigo usando igual. - Es una de las más lindas de todas. – Puede ser, sí. – No hay duda. – Sí, yo creo que sí. Es impactante. Sí, es bastante impactante, jajajaja. – Te da mucha vergüenza. – Me da vergüenza. Pero eso sí, sin duda. La mirás y decís: claro, es mucho. Pero es muy graciosa también, y muy genia. – Se estrena la serie, faltan solo cuatro días. Los nervios que debés estar padeciendo. – Pero ahora estoy pensando en la respuesta que te di recién y lo que te dije del tema, jajajajaja. Sí, muchos nervios, mucha ansiedad y mucha satisfacción de que esto se estrena, de que la gente lo va a ver, de que las personas con las que la vi se reían, la disfrutaban. Para algunos es mejor que la uno, hay una sensación de ‘uy, esto está bueno’. ¿A vos te gustó? – Me encantó. – Está bueno empezar a recibir ese feedback, se mezclan los nervios con la confianza, con las ganas. “A MÍ ME CUESTA RECIBIR LOS ELOGIOS, NO SE DÓNDE PARARME” – A los que nos gustó mucho la primera temporada pensamos ¿cómo una segunda va a sorprender? Y sorprendés. Volvamos al punto inicial, ganaste un premio importante y por lo que describiste de tu personalidad no le estás dando la importancia que tiene. – A mí me cuesta recibir los elogios, el afecto, no sé dónde pararme. Es un premio que está buenísimo, pero que si lo tenés ahí arriba también te pesa. "Está bueno empezar a recibir ese feedback, se mezclan los nervios con la confianza, con las ganas", dijo Santiago Korovsky (Fotos de Candela Teicheira) – Quizás la hacen en Estados Unidos. – Que la hagan en Estados Unidos, que la hagan en India. Que la hagan en Salzburgo, “División Salzburgo”, “División Chueca”, “División Condesa”. Que vayan por las lindas ciudades del mundo haciéndola y que me dejen una pequeña colaboración por asesoría. – ¿No es mucha plata? – No creo. La serie ya es de Netflix. Pero si sucede algo, vamos a hablar. – Felicitaciones. Me encantó, el 17 es el estreno de la segunda temporada por Netflix. – El 17. Estoy con el jet lag, me estoy despertando a las seis entre el viaje y la ansiedad. A las seis ya me como las uñas para no mandar mensajitos. El día que WhatsApp pueda mandar mensajes programados a otra hora va a ser genial. – ¿Te puedo ayudar en algo? – ¿Algún consejo? – Dejá el celular. – Gracias, ése es el mejor. Ahora justo lo necesito, jajaja. Pero cuando termine la temporada me voy de viaje sin celular.
Ver noticia original