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Parana » AIM Digital
Fecha: 26/03/2025 19:24
Se trata de una hembra nacida en los esteros del Parque Nacional Iberá. Es, además, el primer caso de translocación de un yaguareté silvestre con fines de conservación en el mundo. Miní, una yaguareté nacida en libertad en el Parque Nacional Iberá fue liberada en el Parque Nacional El Impenetrable, convirtiéndose en la tercera hembra en ser soltada en el área protegida para aportar a la recuperación de la especie en el Gran Chaco. "Su llegada es clave para la restauración del ecosistema chaqueño, no solo porque aumenta el número de individuos en la región, sino porque su genética aporta diversidad y fortalece la población en crecimiento", explicaron en un comunicado por redes la Administración de Parques Nacionales (APN) y la Fundación Rewilding Argentina. La incorporación de estos felinos en El Impenetrable es fundamental, ya que "en la región sobrevivían menos de 10 machos solitarios", lo que hacía "urgente la incorporación de hembras, para garantizar el futuro de la especie", señalaron. En este sentido, recordaron que fue el macho Qaramtá quien con su aparición en 2019 marcó el comienzo de "un proyecto histórico", que es "la vuelta del yaguareté en el Gran Chaco argentino". "Desde entonces, con esfuerzos de conservación y reproducción en semicautiverio, ya son seis los ejemplares que habitan El Parque Nacional El Impenetrable", garantizaron. Sin embargo, reconocen que, a pesar de estos avances, la situación sigue siendo crítica. Los dos casos que anteceden a Miní son los de Nalá, una yaguareté --hija de Qramta y Tania-- nacida en el Centro de Reintroducción de Yaguareté de El Impenetrable; y el de Keraná, rescatada en Paraguay y trasladada a Argentina. Ambas fueron liberadas en 2024. "Hoy, es el turno de Miní, una hembra silvestre nacida en los esteros del Parque Nacional Iberá. Con casi dos años, fue capturada y trasladada a los recintos del Parque Nacional El Impenetrable. (Ésta es) la primera translocación de un yaguareté silvestre con fines de conservación en el mundo. (...) Miní da sus primeros pasos en libertad y se convierte en la tercera hembra en habitar El Impenetrable, brindándonos la esperanza de recuperar al gran predador tope del norte argentino", concluyeron. En Argentina se estima que quedan menos de 200 yaguaretés en poblaciones fragmentadas. En este sentido, el presidente de la APN, Cristian Larsen, declaró: “Con la liberación de Miní marcamos otro hito en la historia de la conservación del yaguareté, poniendo todos nuestros esfuerzos para protegerlos de su extinción. En conjunto con la Fundación Rewilding Argentina, trabajamos para lograr la reintroducción de especies en lugares donde estaban extintos y protegemos la biodiversidad a través de una gestión activa que combina protección, restauración, reintroducción y suplementación de flora y fauna en nuestros Parques Nacionales. Cada paso que damos nos llena de orgullo y renueva nuestro compromiso”. Por otro lado, Sebastián Di Martino, director de Conservación de Rewilding Argentina, afirmó que "algunos yaguaretés machos silvestres siguen sobreviviendo en lugares aislados del norte de Argentina pero necesitan hembras, diversidad genética y conectividad para prosperar". Además, agregó: "Esta acción ayudará a transformar una población casi extinguida en una población reproductiva saludable y llamará la atención sobre la necesidad de expandir las áreas protegidas para proporcionar un hábitat seguro". Proyectos de conservación del Yaguareté Los yaguaretés tuvieron una presencia abundante hasta finales del siglo XIX. “Hemos visto no menos de veintisiete tigres en tres días" escribió el explorador Arthur Dobsonen en 1899 durante una recorrida por un sector del río Bermejo, donde hoy está el Parque Nacional El Impenetrable. En 2019 se encontró una huella de yaguareté en el Parque Nacional El Impenetrable. Esto propició el comienzo de un ambicioso proyecto de recuperación de la especie. Las cámaras trampa instaladas en la región confirmaron que había un yaguareté en libertad en el Chaco argentino. Lo bautizaron Qaramta y se le colocó un collar con transmisor GPS para iniciar su monitoreo. Ante la falta de hembras registradas en la región, el siguiente paso fue la construcción de grandes corrales dentro del Parque Nacional, donde se logró cruzar a Qaramta con la hembra de cautiverio Tania, algo que nunca se había hecho en el mundo con un gran felino. Esto decantó en el nacimiento de Nalá y Takajay, una hembra y un macho, respectivamente. Al mismo tiempo, se comenzaron a traer felinos silvestres de otras regiones del Chaco paraguayo, como Keraná.
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