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» Diario Cordoba
Fecha: 07/09/2024 09:55
La Velá de la Fuensanta, una de las fiestas populares de la ciudad con más arraigo, ha comenzado ya. Lo hizo en la tarde de este viernes con la procesión de la Virgen en su traslado a la Catedral, acompañada por multitud de jóvenes que le dan carácter a esta fiesta en el barrio del mismo nombre. La Velá es un momento para disfrutar en familia, pero también se nota la presencia de la juventud y de los niños, que disfrutan en las atracciones de la pequeña calle del Infierno. A poco de salir la procesión ya comenzaron a ocuparse las mesas de las terrazas en la plaza del Pocito, donde un puñado de vendedores ambulantes siguen ofreciendo, como cada año, las campanillas de la Fuensanta. Prácticamente, no venden otra cosa, aunque eso sí, las hay de muchas variedades, desde las clásicas blancas hasta las más modernas decoradas con colores vivos. La procesión comenzó puntual, pasados cinco minutos de las 20.30 horas, pero hubo que esperar un poco más para disfrutar del pregón de la Velá de la Fuensanta, que este año ha corrido a cargo de Marcos Santiago. El inicio de la Velá de la Fuensanta, en imágenes / Manuel Murillo «Líderes sociales» En su discurso, el pregonero comenzó aludiendo a su profesión (es abogado), que puede suponer una fuente de oportunidades para los jóvenes tan presentes en esta fiesta: «La carrera de Derecho es como una fábrica de líderes sociales. Especialmente pido a la juventud de barrios populares como la Fuensanta que estudien Derecho porque es la principal forma de que el pueblo llano alcance puestos de responsabilidad. Y encima la tenemos cruzando Puerta Nueva», alegó. «Soy fuensantero», siguió diciendo Marcos Santiago, una característica que lleva a mucha honra porque «nací y sobre todo viví la niñez en la Fuensanta». También se siente, cómo no, andaluz, de «esta Andalucía trabajadora y luchadora que ha levantado España». El alcalde, José María Bellido, este viernes, en el pregón de la Velá de la Fuensanta. / Manuel Murillo Demandas Para honrar a su barrio, Marcos Santiago pidió tres cosas: que las familias empleen más el nombre de Fuensanta para sus hijas, que la Velá vuelva a llamarse «feria de septiembre» porque así «se ha llamado siempre» y una novillada en estas mismas fechas «en homenaje a la mujer fuensantera». Recordó el pregonero cómo era el barrio, y la vida en él, hace 35 años. «Siempre estábamos tirados en la calle para que nuestras madres estuvieran más libres en esos pisos chiquitos y de familias numerosas» que «nos dieron una vida digna», dijo. La gente respondió a ese esfuerzo de las administraciones públicas «haciendo un barrio alegre y trabajador». La Fuensanta no ha perdido ese carácter a pesar del paso del tiempo. Una familia con su pequeña en el inicio de la Velá de la Fuensanta, este viernes. / Manuel Murillo ¿Menos religión? Tuvo palabras también Marcos Santiago acerca del debate sobre si la Velá debe tener un carácter menos religioso: «¿Y eso para qué? ¿Qué ganamos hoy en día en democracia quitándole a la gente sus santos? Pues les quitas esperanza». El pregón terminó con Marcos Santiago reclamando más oportunidades de futuro para el barrio, que pueden pasar por el desarrollo inmobiliario hacia Levante o la recuperación de proyectos aparcados como la Ciudad del Ocio. Se despidió el pregonero diciendo «con orgullo, alto y claro: mi patria no es mi infancia, ¡mi patria es la Fuensanta!». Suscríbete para seguir leyendo
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