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Concordia » Hora Digital
Fecha: 25/11/2025 14:51
El expresidente brasileño, condenado a 27 años por conspirar contra Lula da Silva, fue arrestado tras intentar romper su dispositivo de monitoreo y aprovechar una manifestación para escapar. El juez A El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, fue detenido de manera preventiva este sábado tras intentar romper la tobillera electrónica que monitorea su arresto domiciliario, según informó la Corte Suprema. Bolsonaro cumple desde agosto prisión domiciliaria en su residencia en un condominio de Brasilia, luego de ser condenado a 27 años de cárcel por encabezar un complot militar para impedir la asunción de Luiz Inácio Lula da Silva en 2023. El juez Alexandre de Moraes, responsable del caso, explicó que la medida es preventiva y no corresponde a la ejecución inmediata de la condena. Según el magistrado, Bolsonaro intentó aprovechar una manifestación convocada por su hijo, el senador Flavio Bolsonaro, para facilitar su fuga. En la madrugada del sábado, el expresidente trató de romper el dispositivo electrónico de rastreo, lo que motivó la orden de traslado a una sede de la Policía Federal en Brasilia. De Moraes señaló que la manifestación organizada por Flavio Bolsonaro, que tuvo lugar cerca de la residencia del expresidente, formaba parte de una estrategia para posibilitar su escape. El juez advirtió que la intención era que Bolsonaro se refugiara en alguna de las embajadas próximas a su domicilio, presumiblemente la de Estados Unidos, ubicada a unos 15 minutos en auto del condominio donde vive el exmandatario. Bolsonaro, de 70 años y con problemas de salud según sus abogados, fue trasladado a un complejo policial donde se realizan exámenes médicos previos a la prisión. La Corte Suprema programó para el domingo una audiencia de custodia por videoconferencia y la orden de prisión preventiva deberá ser ratificada el lunes por los magistrados de la primera sala del tribunal mediante una votación virtual. Además, se dispuso que un médico acompañe al expresidente en todo momento. La esposa de Bolsonaro, Michelle, expresó en Instagram su confianza en la justicia divina, afirmando: “Confío en la justicia de Dios. La justicia humana, como hemos visto, ya no se sostiene. Pero sé que el Señor dará el escape”. El exmandatario, que gobernó Brasil entre 2019 y 2022, continúa siendo una figura central en la derecha brasileña. En noviembre, la Corte rechazó por unanimidad un recurso contra la condena, que debe cumplirse en régimen cerrado. Recientemente, los abogados de Bolsonaro solicitaron que pudiera cumplir la pena en prisión domiciliaria por “razones humanitarias”, debido a su delicado estado de salud, que incluye secuelas de una puñalada recibida en 2018 durante su campaña presidencial. Entre sus padecimientos se encuentran reflujo e hipo incontrolable que le provocan falta de aire y desmayos. El lugar de detención al que fue trasladado Bolsonaro cuenta con una habitación de aproximadamente 12 metros cuadrados, con baño privado, cama, silla, armario, escritorio, televisor, pequeña heladera y aire acondicionado. Estas condiciones son similares a las que tuvo el expresidente Lula da Silva durante su detención en Curitiba. La normativa brasileña establece que expresidentes y otras autoridades con privilegios especiales deben contar con espacios dignos que garanticen su integridad física durante la detención.
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