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» El Ciudadano
Fecha: 11/11/2025 13:36
El conflicto en el Hospital Garrahan escaló luego de que el interventor Mariano Pirozzo decidiera sancionar a varios integrantes del equipo de salud, entre ellos a Norma Lezana, secretaria general de la Asociación de Profesionales y Técnicos (APyT). Según trascendió, el funcionario los acusó de coacción, resistencia a la autoridad y usurpación por las medidas de protesta realizadas durante los últimos meses. Desde el gremio calificaron la situación como “gravísima” y repudiaron el accionar del interventor, quien fue designado en julio de este año por el ministro de Salud, Mario Lugones. Los trabajadores denunciaron que se trata de una represalia tras haber conseguido, luego de meses de reclamo, un aumento salarial del 61%. “Después de recibir el 61% de aumento salarial, tras meses de reclamo, Pirozzo acaba de aplicar sumarios a Norma y a otros trabajadores acusándolos de coacción, resistencia a la autoridad y usurpación por las protestas que se realizaron en el hospital. Este personaje, que no es pediatra y que tuvo entrenamiento en el hospital militar Cosme Argerich, nunca aceptó recibirnos a los representantes de la APyT ni a las demás organizaciones que estuvieron al frente del reclamo”, señalaron miembros del equipo de salud en declaraciones a Noticias Argentinas. En medio de la tensión, la APyT convocó para el próximo jueves 13 a un cabildo abierto con el objetivo de “fortalecer la unidad” frente a la reforma laboral y las modificaciones previsionales impulsadas por el Gobierno Nacional, además de repudiar las sanciones aplicadas. El encuentro se realizará en el hall central del hospital, ubicado en Combate de los Pozos 1881, con modalidad presencial y virtual. Desde la organización informaron que se invitará a participar a sindicatos, agrupaciones sociales, organismos de derechos humanos, jubilados, colectivos de discapacidad, periodistas, reporteros gráficos y universitarios, en rechazo a las medidas del Gobierno y al accionar de la intervención. Por su parte, Norma Lezana expresó su repudio a las sanciones y calificó la medida como “ridícula, infundada e insólita”. Además, apuntó directamente contra Lugones y Pirozzo, asegurando que “evidentemente haber tenido que reconocer, después de negarlo a lo largo de casi un año, que teníamos razón, ahora se complementa con esta represalia increíble: nos acusan casi de terroristas por reclamar ser recibidos por la dirección del hospital”. La dirigente gremial advirtió que los sumarios “son una herramienta extrema para sancionar al personal con suspensiones e incluso despidos” y remarcó que “si estos señores creen que nos van a intimidar o nos vamos a quedar cruzados de brazos, demuestran una vez más que no entendieron absolutamente nada”. El conflicto entre la conducción del hospital y los trabajadores se da en un contexto de fuerte malestar gremial por las políticas del Gobierno Nacional sobre reforma laboral y previsional, que fueron señaladas como un intento de debilitar la organización sindical dentro del sector público de salud. Fuente: DataClave
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