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Parana » Informe Digital
Fecha: 10/10/2025 16:13
CÓRDOBA.- En Monte Buey (departamento cordobés de Marcos Juárez, casi en el límite con Santa Fe) se encuentra la granja porcina más grande del país: tiene 13.000 madres en producción y está en obras para ampliar a 17.000, además de contar con 175.000 plazas de engorde. El proyecto comenzó en 2008 con 700 madres; con el tiempo se incorporó un socio y, en 2015, escalaron a 3000 a partir de un modelo de “asociación productiva”. Por estos días trabajan para avanzar en el eslabón industrial. Lisandro Culasso y Fernando Villavicencio producían cerdos y advirtieron que “solos es difícil crecer, escalar. Así que nos unimos para desarrollarnos de manera más rápida y eficiente”, cuenta el primero a LA NACION. Fue así como nació Isowean SA. “Somos asociadores seriales”, comenta. En 2012 se sumó la familia Grassi, dueña de un grupo dedicado al comercio de cereales. El establecimiento de Interpork SA, del cual son socios los productores Concentrada en fortalecer los procesos productivos y organizativos y en mejorar la calidad de sus productos, la granja se dedica exclusivamente a la producción de lechones, que son destetados y enviados a los establecimientos de terceros asociados para su engorde. En 2015 pasaron a 3000 madres y ahora cuentan con 13.000. Ya están en marcha obras de ampliación que les permitirán llegar a 17.000. Desde Monte Buey, la empresa provee los lechones a los 12 productores asociados que están en un radio de unos 200 kilómetros, en las provincias de Córdoba y Santa Fe. Mensualmente se calculan los aportes de las partes y se reparte el resultado de las ventas: cobran en función de la rentabilidad. Los lechones destetados son enviados directamente a granjas de engorde con sistema Wean-to-Finish hasta que están listos para la venta, lo que permite optimizar la producción y minimizar los tiempos muertos entre el destete y la comercialización. Los socios se benefician de la experiencia y el aprendizaje que la compañía va acumulando. Hace unas semanas inauguraron una fábrica de alimentos, Porfeed SA, con capacidad para producir 20 toneladas/hora, en la que invirtieron US$7millones. Los asociados más cercanos van a moler allí el cereal propio. Culasso explica que están buscando un socio para avanzar en la construcción de un frigorífico para faena: “Hasta el año pasado solo vendíamos animales en pie; hemos avanzado en el desarrollo comercial, pero es un porcentaje chico el que industrializamos nosotros. El objetivo es contar con desposte con un socio industrial. No queremos meternos en una planta solos porque la curva de aprendizaje sale cara. Mantenemos nuestro modelo de asociación”. El empresario precisa que Córdoba tiene un “déficit de plantas de faenamiento, aun cuando es la productora más importante del país”. La mayor parte de los capones se faenan afuera de la provincia. Isowean analiza tierras en Villa María y en Bell Ville para la planta: “Se necesita agua cerca y eso condiciona la elección”. Los productores tienen un esquema asociativo. Un establecimiento de engorde fue inaugurado junto a Prince Cereales SA En la empresa están convencidos de la importancia de la integración vertical para agregarle valor a la producción primaria y fomentar el crecimiento de las exportaciones. El consumo de carne porcina –que se ubica actualmente en torno a los 18 kilos/habitante/año– tiene margen para seguir creciendo en el mercado interno, al tiempo que debe desarrollarse la presencia en el exterior para seguir los pasos de Brasil en la materia, un líder en exportaciones.
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