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» Jackemate
Fecha: 25/09/2025 11:27
Comparte este Articulo... Por Eduardo Romagnoli (*) En Argentina vivimos los últimos meses debatiendo cuestiones vinculadas a temas presupuestarios relacionados con el sector de la salud, tema que lleva años de atraso y lo hacemos, como siempre, sobre el efecto final o el problema ya instalado, (la falta de partidas presupuestarias para financiar el sistema), sin detenernos a pensar en diferentes maneras de controlar estos desajustes desde su origen. El cortafuego más apropiado para evitar situaciones como la actual, es la implementación de la HISTORIA CLÍNICA DIGITAL ÚNICA que acompañaría a cada ciudadano durante toda su vida, herramienta que presentaría enormes beneficios para todos los integrantes de la cadena en cuestión, obras sociales, medicina pre paga, hospitales, clínicas, sanatorios, efectores y prestadores en su totalidad, industria farmacéutica, laboratorios y pacientes. El principal beneficiado sería el Sistema de Salud de la República Argentina, en función de que la unificación de toda la información mejoraría la eficiencia, el control presupuestario o auditoría previa y una notable mejoría en la productividad, hechos que permitirían asignar recursos de manera más racional y eficaz, lo que reduciría de manera impresionante los costos asociados con la duplicación de estudios, pruebas, procedimientos y prescripciones médicas, impactando directamente en el proceso una carga administrativa abreviada y menos costosa. El beneficio colateral más relevante es que este sistema proporciona datos precisos y actualizados sobre la salud de la población, lo que permite tomar decisiones veraces y objetivas sobre políticas de salud pública. El resultado final redundaría en una reducción de gastos impresionante. Los pacientes resultarían beneficiados porque se evitarían la duplicación de prácticas médicas, pruebas de laboratorio o repetición de estudios de imágenes que reduce el riesgo de complicaciones y mejora la eficiencia del sistema de salud. Los pacientes podrían tener un mayor control sobre su salud y tomar decisiones a partir de la información acumulada que beneficiarían la implementación de tratamientos y cuidados paliativos. Si se aplican los protocolos ya existentes a nivel mundial, la HISTORIA CLÍNICA DIGITAL ÚNICA , garantizaría la seguridad y privacidad de la información médica de cada paciente, ya que sólo los profesionales autorizados podrán acceder a ellas. Este último punto referido a la privacidad, es tal vez una de las principales objeciones que esgrimirían los impedidores de siempre, para la implementación del sistema, aunque si tomamos en cuenta la existencia de protocolos específicos que se utilizan en la industria de la salud, sólo será necesario que los legisladores e integrantes de la cadena en su totalidad, recurran a las experiencias más exitosas a nivel mundial para generar una Ley que aporte seguridad y tranquilidad a todo el sector. A modo de ejemplo podríamos recurrir a los resultados obtenidos por Suecia y otros países nórdicos; Reino Unido; España; Estados Unidos, con sus particularidades, toda vez que no hay una legislación federal específica, aunque algunos hospitales y sistemas de salud han implementado sistemas de historias clínicas electrónicas avanzados; Uruguay que a través de la ley 16.736 permite la validez y eficacia de la firma electrónica y la Historia Clínica Electrónica como documento electrónico con valor probatorio. O para citar un antecedente más cercano la Provincia de Buenos Aires, que promulgó la Ley 14.494 que establece la creación de un sistema de historia clínica electrónica única para cada persona, que abarcará desde el nacimiento hasta el fallecimiento. La implementación de este sistema facilitaría un acceso rápido y seguro a la información. Los profesionales de la salud podrían acceder a la historia clínica completa y actualizada de un paciente en cualquier momento y lugar, lo que permite tomar decisiones informadas y precisas. La disponibilidad de información precisa y completa reduciría el riesgo de errores médicos y mejoraría la seguridad del paciente. Optimizaría la coordinación de la atención y facilitaría la coordinación entre diferentes niveles de atención y especialidades, lo que redundaría en una mayor y mejor calidad de la atención médica. En otro orden debemos tomar en cuenta algunas cuestiones puntuales. La implementación de un sistema de historia clínica única requiere una inversión significativa en tecnología y capacitación y puede enfrentar resistencia por parte de los profesionales de la salud, la industria farmacéutica y laboratorios, efectores y prestadores en general, principalmente aquellos que pertenecen al sector público y también de parte de los pacientes. El mayor esfuerzo debería enfocarse en que la HISTORIA CLÍNICA DIGITAL ÚNICA debería garantizar la seguridad y privacidad de la información médica del paciente, lo que requiere medidas de seguridad robustas y una gestión adecuada de la información y debería asentarse sobre una plataforma que asegure la interoperabilidad con diferentes sistemas y tecnologías, lo que requiere estándares y protocolos comunes. En resumen, la implementación de un sistema de historia clínica digital única en Argentina puede tener numerosos beneficios para la atención médica, los pacientes, el sistema de salud y una enorme reducción de recursos económicos que hoy insume el sistema de salud. Sin embargo, también requiere una planificación e implementación cuidadosas para abordar los desafíos y consideraciones asociados, que deberían estar contemplados en la redacción de la Ley correspondiente. Para mejorar el estado actual de las cosas, sólo debemos atrevernos a pensar de manera diferente. Hasta la próxima… (Jackemate.com) (*) Licenciado en Cooperativas – Expresidente Directorio Aeropuerto Internacional Rosario
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