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Parana » El Once Digital
Fecha: 20/09/2025 16:31
La familia de Lautaro, un niño de Urdinarrain, vive una emotiva lucha contra un tumor que requiere un tratamiento largo y complejo. Germán y Leandra, padres del pequeño, no solo vieron la fortaleza de su hijo en esta batalla, sino también el apoyo fundamental del Hospital Garrahan. "Cada niño importa", afirmaron con profundo agradecimiento al recordar cómo, desde el primer día, encontraron en el hospital una contención invaluable. Este martes, Lautaro recibió el alta ambulatoria, un paso clave en su tratamiento, aunque la lucha aún continúa. El camino de Lautaro comenzó con una consulta médica en Gualeguaychú que derivó en una atención más especializada en Paraná. Fue allí donde una médica les sugirió llevar a Lautaro al Garrahan: "Allí están los mejores del país". Desde ese momento, Lautaro fue atendido en este hospital de referencia, donde la familia encontró no solo una atención médica de primer nivel, sino también una calidez humana que les dio esperanza en su difícil proceso. El apoyo y el compromiso del equipo del Garrahan A lo largo de su tratamiento, Lautaro y sus padres experimentó una atención integral que va más allá de lo médico. Germán y Leandra destacaron el trato humano del personal del hospital, quienes, desde el primer momento, se mostraron cercanos y atentos. "En el Garrahan hacen sentir que cada niño importa", subrayaron. Desde los médicos hasta los residentes y personal de limpieza, todos se involucraron activamente en el bienestar del pequeño, haciéndolos sentir que no estaban solos en este camino. Para los padres de Lautaro, esta calidez fue esencial en su proceso de adaptación y en la construcción de una red de apoyo. "Todos aprenden el nombre del paciente, saben lo que enfrenta, y eso nos dio a nosotros, como padres, una contención y un amor fundamental", contaron emocionados. En medio de la adversidad, se sintieron abrazados no solo por el equipo médico, sino también por la comunidad que rodea al hospital. El compromiso de la familia con la salud pública y la lucha por la pediatría Más allá de la historia de su hijo, Germán y Leandra se unieron al reclamo por una mayor inversión en el sistema de salud, especialmente en pediatría. Este esfuerzo fue especialmente importante después de que el Congreso de la Nación refrendara que el Poder Ejecutivo deberá cumplir con los fondos destinados al Hospital Garrahan. En este contexto, los padres de Lautaro también rechazaron públicamente las desafortunadas declaraciones de la senadora cordobesa Carmen Álvarez Rivero, quien, durante el debate de la ley, expresó que "los niños argentinos no tienen derecho a venir al Garrahan a ser curados". La frase generó un repudio generalizado, y tanto Germán como Leandra se manifestaron en contra, defendiendo el valor y la importancia del hospital como un centro de referencia nacional para todos los niños del país. Un pueblo unido en apoyo a Lautaro A lo largo de este proceso, Lautaro recibió el apoyo incondicional de su comunidad en Urdinarrain. El pequeño, que solía jugar al básquet en el Club Luis Luciano, fue abrazado por su pueblo, que no dejó de enviarle mensajes, dibujos y regalos. "Cada gesto, cada oración, cada muestra de amor, se transforma en fuerza para seguir adelante", afirmaron sus padres con gratitud. En medio de este difícil camino, Lautaro mostró una madurez sorprendente, y su historia conmovió no solo a su familia, sino a toda la comunidad. La historia de Lautaro y su familia, marcada por la lucha, la gratitud y el compromiso, es un testimonio de cómo, incluso en los momentos más difíciles, la solidaridad, el apoyo y el amor pueden brindar la fuerza necesaria para seguir adelante. Como dicen en el Garrahan: "Cada niño importa". (Con información de Radio Cristal Urdi)
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