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Concordia » El Heraldo
Fecha: 28/08/2025 08:50
La caravana de La Libertad Avanza en Lomas de Zamora, realizada este miércoles, terminó en caos. Lo que comenzó como un acto de campaña se transformó en escenas de tensión cuando el presidente Javier Milei y el diputado José Luis Espert tuvieron que ser evacuados tras recibir insultos y agresiones con piedras. Ads Según relataron testigos, las agresiones alcanzaron incluso a una fotógrafa que sufrió un golpe en la cintura. “Se puso muy violento, había que preservar la seguridad de la gente y de nosotros”, explicó uno de los dirigentes presentes. Milei fue resguardado en su vehículo oficial, mientras que Espert debió abandonar la zona en una moto conducida por un militante. La situación dejó expuesta una grave falencia en el esquema de seguridad presidencial, que no logró prever ni contener un escenario de tensión previsible en una de las zonas más sensibles del conurbano bonaerense. La caravana avanzó sin una lectura adecuada del clima social, lo que derivó en un contacto directo con manifestantes hostiles y un operativo de evacuación improvisado. Ads Desde el Gobierno, el vocero Manuel Adorni y el titular de la Cámara de Diputados, Martín Menem, atribuyeron la violencia a sectores del kirchnerismo. Sin embargo, más allá de las acusaciones políticas, el episodio refleja la poca capacidad oficial para medir la temperatura social en territorios donde el malestar se profundiza y la recepción hacia la figura presidencial no es homogénea. El hecho no sólo encendió alarmas sobre la seguridad del Presidente, sino también sobre la estrategia política del oficialismo en la campaña: avanzar en caravanas masivas sin un diagnóstico certero del contexto social puede terminar, como en Lomas de Zamora, en un retroceso político más que en una demostración de fuerza. Ads
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