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» Diario Cordoba
Fecha: 26/08/2025 15:42
El flamante director general del Banco de Pagos Internacionales (BIS, por su sigla en inglés) y exgobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha aprovechado su primer discurso público desde que está al frente del organismo con sede en Basilea (Suiza) para ensalzar el valor de la independencia para quienes están al frente de los bancos centrales del mundo. "La independencia permite a los bancos centrales tomar decisiones de política monetaria basadas en consideraciones económicas de interés público a largo plazo, libres de interferencias políticas a corto plazo. Esto les permite actuar con rapidez y credibilidad ante los riesgos para la estabilidad de precios", ha dicho De Cos ese martes en Ciudad de México, dentro de un discurso conmemorativo del centenario del Banco de México. "Los bancos centrales necesitan independencia institucional, funcional, personal y financiera, todo lo cual debe estar respaldada por un marco jurídico sólido", ha añadido el exgobernador del Banco de España, situado al frente del BIS desde el pasado 1 de julio. El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, y el de EEUU, Donald Trump, durante la visita de las obras de remodelación de la Fed, el pasado 24 de julio. / Daniel Torok / White House / Planet Pix Aunque sin citarlo de forma expresa, la reflexión de De Cos se produce en plena ola de ataques institucionales y personales del presidente de EEUU, Donald Trump, al presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, por no haber atendido sus peticiones de recortar los tipos de interés en lo que va de 2025. Este mismo lunes (madrugada del martes en España), Trump ha redoblado su ataque a la independencia de la Reserva Federal al anunciar en su red social (Truth Social) el despido de la gobernadora de la Fed Lisa Cook, nombrada por Joe Biden, sobre la que ha lanzado acusaciones de fraude en unas solicitudes hipotecarias. El Banco de Pagos Internacionales es propiedad de 63 bancos centrales que representan a países de todo el mundo y tiene como principal función apoyar a estos en su búsqueda de la estabilidad monetaria y financiera. El antecesor de De Cos al frente del BIS, Agustín Carstens, también aprovechó su última intervención en Basilea -el 29 de junio, antes de pasar el testigo a De Cos- para subrayar que los cambios en la política arancelaria de EEUU han venido acompañados del "cuestionamiento de la independencia de los bancos centrales", entre otros perjuicios. Los tres pilares clave Ahora, la intervención de De Cos vuelve a enfatizar la importancia de la independencia de los banqueros centrales para el ejercicio de sus funciones. Según el director general del BIS, "un mandato claro de estabilidad de precios, independencia y rendición de cuentas" son los tres pilares clave "para que los bancos centrales de todo el mundo logren estabilidad de precios y construir una sólida credibilidad en la lucha contra la inflación". El mandato de estabilidad de precios especifica que la política monetaria debe proteger el valor del dinero. Para un número creciente de países, esto se materializa a través de objetivos de inflación, como es el caso del BCE y de la propia Fed, donde sirve de referencia un objetivo del 2%. Desde el punto de vista de De Cos, la rendición de cuentas de los bancos centrales a los legisladores y a la sociedad es un factor clave para la independencia. "Un medio clave para la rendición de cuentas es una comunicación clara que explique las decisiones políticas al público, racionalice las acciones del banco central y describa cómo contribuyen al cumplimiento de su mandato". Desafíos pendientes De cara a los retos a los que se deben enfrentar los bancos centrales, De Cos ha señalado que "es probable que los cambios estructurales en curso, como la desglobalización, el envejecimiento de las sociedades, el cambio climático, las disrupciones tecnológicas y la elevada y creciente deuda pública, planteen nuevos desafíos para los bancos centrales en el futuro". Son retos, todos ellos, sobre los que existe aún una gran incertidumbre sobre la capacidad de cada uno de condicionar el equilibrio entre la oferta y la demanda y, con ello, las perspectivas de inflación y crecimientos y el nivel de los tipos de interés. "Dadas estas incertidumbres, ¿cómo pueden los bancos centrales seguir cumpliendo sus mandatos y servir al interés general?", se ha preguntado de forma retórica De Cos antes de responder: "Los tres pilares institucionales de mandatos claros, independencia y rendición de cuentas siguen siendo cruciales para garantizar la estabilidad de precios", gestionados con una mezcla de "robustez, flexibilidad y realismo". Suscríbete para seguir leyendo
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