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CABA » Plazademayo
Fecha: 24/08/2025 19:10
El politólogo e investigador Mariano Fraschini dialogó con Amado Boudou y el equipo del programa Sin Diarios (AM530 Somos Radio, sábados de 9 a 11) y analizó el fenómeno de los liderazgos populares en América Latina y los desafíos que enfrentan sus procesos de sucesión. En el centro de su análisis, destacó la imposibilidad de que emerjan nuevos liderazgos legítimos cuando los referentes históricos son apartados del escenario político mediante mecanismos de proscripción. Fraschini se refirió particularmente a la situación política en Bolivia, donde el enfrentamiento interno entre Evo Morales y el actual presidente Luis Arce debilitó al Movimiento al Socialismo (MAS), que sufrió una fuerte derrota en las últimas elecciones. “Lo que se expresó fuertemente es esa discusión interna, que terminó por ocultar el problema de la proscripción de Evo Morales”, señaló el investigador. Recordó que en 2019, Bolivia vivió un golpe de Estado contra el entonces presidente Evo Morales, y que el posterior gobierno interino de Jeanine Áñez, lejos de encaminar una transición democrática, excluyó al exmandatario de las siguientes elecciones. “Se llama a elecciones presidenciales con la proscripción de Evo Morales, que era el presidente legítimo cuando se da el golpe”, afirmó. Fraschini remarcó que la continuidad de un proyecto político requiere de un proceso ordenado de sucesión, que respete a los liderazgos históricos y no los excluya del juego democrático. En ese sentido, destacó como caso excepcional la transición entre Hugo Chávez y Nicolás Maduro en Venezuela, donde —según su visión— se logró preservar el liderazgo popular dentro del mismo movimiento político. “Inclusive en fuerzas de derecha no se pudo establecer una sucesión exitosa, por ejemplo entre Álvaro Uribe y Juan Manuel Santos en Colombia”, agregó, evidenciando que la dificultad para sostener liderazgos coherentes no es exclusiva de un sector ideológico. En clave local, Fraschini vinculó este análisis con la situación de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien fue condenada judicialmente en una causa que el kirchnerismo considera parte de un proceso de persecución política. “Es una tendencia que quien asume intente independizarse del liderazgo histórico, pero esa tendencia no tiene posibilidad de realizarse con éxito si hay proscripción del liderazgo histórico”, advirtió. De esta manera, Fraschini subrayó que la legitimidad y la fuerza de los liderazgos emergentes no pueden consolidarse si los pilares fundacionales del movimiento son desplazados mediante procesos judiciales o decisiones políticas que los excluyen artificialmente del debate democrático.
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