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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 23/08/2025 20:31
El impacto de una colisión inesperada en plena pista de speedway británico, una rama del motociclismo que se corre en óvalos de tierra, derivó en una escena insólita: Charles Wright y Jake Allen, dos pilotos con una larga amistad, terminaron enfrascados en una pelea a puñetazos ante la mirada atónita del público y los oficiales. El incidente, ocurrido durante la sexta manga del enfrentamiento entre Redcar y Scunthorpe en el circuito de Teesside, ha puesto en la mira a ambos corredores, quienes ahora podrían enfrentar sanciones disciplinarias, según informó The Sun. La tensión se desató tras la finalización de la carrera, cuando Wright, de 36 años, impactó contra Allen. El piloto australiano, de 30 años, relató que, tras cruzar la meta y reducir la velocidad, fue embestido por su colega: “He ganado la carrera. He soltado el acelerador y Charles ha calculado mal su trayectoria y me ha golpeado, no ha sido culpa mía”, explicó en declaraciones que reprodujo el citado medio británico. La secuencia de la pelea entre Charles Wright y Jake Allen Allen detalló que mantuvo su línea por el interior de la pista y que Wright se le acercó para decirle: “Pensé que quedaba otra vuelta”. La falta de una disculpa inmediata por parte de Wright incrementó la molestia de Allen, quien subrayó: “Somos buenos amigos, pero no hay excusa para que te tiren después de una carrera. No creo que nadie pueda culparme por esta situación. He sido amigo de Charles desde mi primera temporada en el Reino Unido. Eso no cambia”. El altercado físico se intensificó rápidamente. Ambos pilotos intercambiaron golpes y cayeron sobre la pista, lo que obligó a la intervención de varios oficiales para separarlos. El jefe de equipo de Scunthorpe, David Howe, fue uno de los que actuó para evitar que la situación escalara aún más. Howe describió el momento: “La carrera había terminado. Por lo que sabemos, Charles no se dio cuenta de que la carrera había finalizado. Jake iba bastante abierto y Charles compite siempre al máximo. Charles golpeó a Jake y este cayó con fuerza, chocando contra la valla”. El contexto agravó la frustración de Allen. Según Howe, el piloto australiano ya había sufrido la rotura de un motor en su primera salida y, tras liderar la manga, su motocicleta quedó destrozada por el impacto. “Jake no iba a toda velocidad cuando terminó la carrera y aun así destrozó la moto. Creo que fue una reacción en caliente. Incluso empujó a su propio mecánico para apartarlo”, relató Howe. El propio Allen lamentó las consecuencias materiales y físicas: “Hay 1.500 libras esterlinas (unos $1.900) en daños y el casco está arruinado. Mi cabeza golpeó el suelo también. La gente no entiende los costes que esto implica”. Además, Allen expresó su preocupación por una posible recaída en su lesión: “Acabo de volver de una lesión en el escafoides y ahora siento exactamente lo mismo otra vez”. Tras el incidente, Wright se acercó a Allen para reconocer su error. Howe, que intentó separar a los pilotos en la pista, comentó con ironía: “Pensé que tenía que parecer que realmente intentaba separarlos para que no me multaran a mí también”. El árbitro Craig Ackroyd intervino y conversó con ambos corredores, así como con Howe y el responsable de Redcar, Gavin Parr, para esclarecer lo sucedido. El juez calificó la acción como merecedora de tarjeta roja, aunque para entonces los ánimos ya se habían calmado en los boxes. La Speedway Control Bureau evaluará el caso el lunes siguiente, y se prevé que ambos pilotos reciban una sanción económica. Howe manifestó su deseo de que se tenga en cuenta el contexto: “Imagino que les multarán. Es un golpe duro para Jake: ha roto un motor, ha doblado la moto, se ha lesionado el hombro y el lunes probablemente le multen. Creo que la SCB debería considerar esto. Son mejores amigos, fue un momento de calentón y un error genuino de Charles”. Howe insistió en que el incidente no perjudica al deporte y confía en que no haya represalias mayores: “No creo que esto sea malo para el speedway. Espero de verdad que no les multen. Fue solo un incidente de carrera y ya no hay rencor. La próxima semana volverán a competir entre ellos y no habrá ningún problema”. El historial reciente de Wright añade un matiz particular al episodio. En 2023, el piloto británico tuvo que ser hospitalizado tras un grave accidente que requirió cirugía, y desde entonces había mantenido un perfil bajo fuera de las pistas hasta este altercado.
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