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Parana » Informe Digital
Fecha: 14/08/2025 03:00
Finalmente, llegó el día. Este miércoles 13 a las 9:30 de la mañana se cumplió el plazo para que Cristina Kirchner y los demás condenados en la Causa Vialidad abonen los 530 millones de dólares que, según la Justicia, deben restituir al Estado para compensar el latrocinio del que se les acusa. Dado que esto no ocurrió, más allá de un último recurso legal de la ex presidenta, los investigadores iniciarán el proceso de liquidación de los bienes embargados de CFK y los demás acusados para obtener esa suma. Este será un proceso lento y, a la vez, revelador, ya que, a pesar de las demoras, arrojará luz sobre su patrimonio real y no solo el declarado. Un dato que los investigadores consideran clave es que la última rendición de cuentas presentada por Cristina, que asciende a 249 millones de pesos, es solo la punta del iceberg. Están convencidos de que la verdadera fortuna de la ex presidenta está “camuflada” en las declaraciones juradas de sus hijos, Máximo y Florencia, lo que explica por qué los inmuebles heredados también figuran en la extensa lista de bienes a rematar. Los investigadores sospechan que la herencia en vida que Cristina llevó a cabo en marzo de 2016 —¡tres meses antes de volver al llano!— es una “maniobra fraudulenta” para ocultar esas propiedades ante la Justicia. Justamente en el período de la transferencia a sus hijos, el fallecido juez federal Claudio Bonadio comenzó a investigar a CFK en una de las múltiples causas en su contra. La ecuación es sencilla. La última rendición de cuentas presentada por Máximo Kirchner ante la Oficina Anticorrupción supera con creces el monto declarado por su madre: 8.311 millones de pesos frente a los 249 millones de ella. Florencia, que no está en el ámbito político, no se ve obligada a presentar su declaración ante la OA. Sin embargo, en base a lo que declara su hermano, quien posee el 50 por ciento de lo heredado, los investigadores pueden deducir lo que le corresponde a ella, la otra mitad. En términos más directos, pueden exigir el levantamiento del secreto fiscal que rige para las declaraciones de cuentas presentadas ante la ex AFIP, hoy ARCA. Con la declaración de Máximo K en mano, se puede realizar el siguiente cálculo: el patrimonio propio que presenta el hijo de la ex presidenta no alcanza los 1.000 millones de pesos, sobre un total, insistimos, de 8.300 millones. El resto proviene de herencias. Si se suman a esos números los bienes que le corresponden a su hermana, la fortuna que CFK oculta en las declaraciones de sus hijos supera los 14.000 millones de pesos. Muy lejos de los 249 millones que ella declara. Los investigadores judiciales son conscientes de estos datos y están realizando el mismo cálculo. Galería de imágenes En esta Nota
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