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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 27/07/2025 14:34
(Foto: Shutterstock) Tras la finalización de la cosecha gruesa, el Gobierno decidió aliviar la carga fiscal al agro, lo cual, según el sector, aumentará la producción y las exportaciones por la mejora de competitividad. No es la única vía por la que el campo se verá beneficiado: el tipo de cambio real avanzó 4,1 por ciento. El presidente Javier Milei anunció este sábado en La Rural un recorte permanente de los Derechos de Exportación (DEX) para productos clave del complejo agroindustrial: la carne bovina y aviar pasará del 6,75% al 5%, el maíz y el sorgo del 12% al 9,5%, el girasol del 7% y 5% al 5,5% y 4%, respectivamente, y la soja del 33% al 26%, mientras que sus derivados bajarán del 31% al 24,5%. Según Nadin Argañaraz, presidente del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), en la medida que la exportación es la base imponible de las retenciones, “el costo fiscal depende de la magnitud en que se incremente la producción. Si llega a aumentar la base imponible alrededor de una quinta parte, el costo fiscal tiende a ser nulo”. “Dado esto, el costo fiscal concreto está en la base imponible que surge de la liquidación de los stocks actuales, que en lugar de liquidarse a las alícuotas vigentes, se liquidarían a alícuotas menores”, detalló. Este efecto es particularmente importante si se tiene en cuenta que, según CREA, la superficie sembrada con soja venía en tren de caer un 11,3% respecto al ciclo anterior, dejando más de 2 millones de hectáreas fuera del mapa agrícola 2025/26. El presidente Javier Milei en La Rural (Jaime Olivos) “Debe tenerse en cuenta que la baja de derechos de exportación aumenta el precio de los productos, lo que a priori significa una baja de pérdidas o una suba de ganancias, derivando en una posible mayor recaudación del impuesto a las ganancias y de otros impuestos provinciales que gravan la facturación”, advirtió Argañaraz. “También, debe considerarse el posible efecto de la suba de precios internos sobre el consumo doméstico, básicamente por los cambios en los bienes más consumidos”, agregó David Miazzo, economista especializado en agro, había estimado que el costo fiscal de la rebaja temporal de retenciones hasta junio fue de unos USD 1.000 millones y que ese monto, sin considerar los “efectos dinámicos” de una mayor producción y exportación (el aumento de la “base imponible” que cita Argañaraz), podría estirarse entre USD 500 y 600 millones en lo que resta del año, con el recorte permanente de alícuotas anunciado en la Exposición Rural. Mejora significativa Vale destacar que aunque en el caso de la soja, por ejemplo, las retenciones bajaron del 33% al 26%, en términos efectivos la reducción de la carga impositiva equivale al 21,3%. Entonces, a cierto volumen y precio de exportación, quien antes pagaba $100 ahora abonará 78,7 pesos en concepto del tributo. Al mismo tiempo, vinculado a una mayor competitividad para concretar ventas al exterior (en las últimas semanas alicaídas por el fin del recorte temporal de DEX que rigió durante el primer semestre del año como incentivo a la liquidación de la cosecha gruesa), GMA Capital calculó que “desde que empezó julio, la mala performance del peso (con una caída de 7,2% en el mes y de 19,4% en lo que va del año) ayudó a que el tipo de cambio real subiera cerca de 4,1 puntos porcentuales”. Desempeño de monedas emergentes en 2025 “Parte de este repunte también se debe a la debilidad global del dólar, que a su vez explicó el fortalecimiento de la mayoría de las monedas emergentes”, indicó la consultora. En perspectiva, el peso fue la moneda más apreciada del mundo en 2024, con un crawling peg al 2% mensual y luego al 1% para el dólar oficial. El campo venía cuestionando este esquema, que sumado al incremento de costos, deterioraba la rentabilidad. Además, las bandas de flotación implementadas en marzo tampoco habían implicado un aumento significativo de la divisa. En términos políticos, la medida generó posturas opuestas entre el oficialismo y la oposición. La ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner sostuvo que se está gobernando para los ricos y que allí no importa el superávit fiscal. Ante esas declaraciones, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, le respondió en diálogo con Radio Rivadavia: “Oponerse es no entender lo que pasa con la economía”. Añadió que “el daño que le hicieron al campo las medidas que tomaron es enorme”. Por cierto, los anuncios del sábado fueron muy bien recibidos por los dirigentes y entidades del campo. “Reducir la carga tributaria sobre el campo no solo mejora la competitividad, sino que dinamiza toda la economía regional, genera empleo y potencia las exportaciones”, dijo, por ejemplo, Miguel Simioni, presidente de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR). A su vez, Lucas Magnano, titular de Coninagro, señaló: “Es un incentivo y un alivio para todos nuestros productores. Nos alegramos por esto. Creemos que es un camino que recién ha iniciado y que, sin lugar a dudas, muy pronto nos llevará a hablar de retenciones cero. El presidente de la Nación nos escuchó“. “Vamos por el camino correcto”, afirmó en la misma línea Nicolás Pino, presidente de la Sociedad Rural, pero puntualizó que “tenemos que seguir avanzando hasta que las retenciones sean cosa del pasado”.
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