17/07/2025 17:07
17/07/2025 17:06
17/07/2025 17:06
17/07/2025 17:05
17/07/2025 17:04
17/07/2025 17:03
17/07/2025 17:03
17/07/2025 17:02
17/07/2025 17:02
17/07/2025 17:02
Buenos Aires » Infobae
Fecha: 17/07/2025 10:53
El emotivo reencuentro de una mascota con su familia en el programa de Guido Kaczka (Eltrece) “¡Golda, Golda, Golda! Mirá la alegría que tiene Golda. Se encontraron Golda y su familia. Pero qué lindo, por favor. Qué hermoso”, exclamó Guido Kaczka en pleno aire de Buenas noches Familia, mientras la emoción desbordaba el estudio. El reencuentro en vivo entre una familia y su perra perdida, conocida hasta entonces como “Pandy”, se transformó en el momento más conmovedor de la noche y reveló la verdad detrás de la historia del primer perrito adoptado en el programa. La noche del miércoles, una familia se presentó en el ciclo conducido por Guido Kaczka para recuperar a su mascota extraviada, generando un clima de lágrimas y alegría. El conductor explicó que el animal, presentado como “Pandy”, en realidad se encontraba perdido. “Alguien viene a adoptar y alguien pone en adopción el perro. Lo tiene en tránsito. Pero después hay un seguimiento. A veces se da la adopción y a veces no se da”, relató el conductor, detallando el proceso habitual del programa. El caso se resolvió gracias a un mensaje recibido por la producción, que permitió contactar a Cecilia, la verdadera dueña. “En el seguimiento no se había dado la adopción con la pareja, eso es lo que me cuentan ahora. Pero además llegó un mensaje y cuando llegó ese mensaje se pusieron en contacto con Cecilia”, explicó el conductor. La familia había perdido a la perra hacía aproximadamente un mes, y la producción corroboró que se trataba de los dueños originales. La historia de “Pandy”, el primer perrito adoptado en Buenas Noches Familia capturas La dueña, visiblemente emocionada, compartió su experiencia: “Yo estaba trabajando. Cuidando a personas, acompañantes. Estuve mirando el programa y mirá las cosas que pasaron”. El reencuentro en el estudio, con la perra respondiendo a su verdadero nombre, Golda, marcó el desenlace de la historia. La emoción fue absoluta cuando todos se abrazaron en el set. Guido Kaczka relató con asombro cómo se desarrollaron los hechos: “¿Qué puede pasar? Que la familia se arrepienta. Pero lo que pasó... ¿Qué lo llevó a este lugar? Que lo hayan abandonado, que esté lejos de su familia, o que se haya perdido. Y eso pasó con Pandy”. El conductor subrayó que, en este caso, la adopción no se concretó porque el animal no era realmente un perro en situación de abandono, sino una mascota extraviada. El caso de Golda, conocida como Pandy en el programa, expuso la importancia del seguimiento en los procesos de adopción animal y la posibilidad de reencuentros inesperados gracias a la exposición televisiva y la colaboración del público. Otro reencuentro en el estudio “Te mando un mensaje por Instagram y te llamo y no me das bola. Tengo que venir acá para que lo hagas”. La frase de Gustavo Jerry Sarlenga en el horario central de eltrece, sorprendió a Guido Kaczka durante la emisión de Buenas noches Familia al reconocer a un amigo de la infancia, sin que la producción hubiera planeado ninguna sorpresa. El gracioso reencuentro de Guido Kaczka y un amigo El martes por la noche, la rutina habitual del programa se vio interrumpida cuando el conductor, al presentar a un nuevo concursante para el juego de la piña, escuchó un apellido que lo detuvo en seco. “¿Sos vos? Estás igual”, exclamó Kaczka, visiblemente emocionado, mientras el público celebraba el inesperado reencuentro. El saludo entre ambos, cargado de afecto, evidenció la profundidad de un vínculo forjado décadas atrás. La mecánica del programa no anticipaba ningún giro: Guido Kaczka simplemente dio la bienvenida a “Gustavo”, pero solo al oír el apellido, la memoria le jugó una carta inesperada. El conductor, aún incrédulo, preguntó: “¿Te anotaste para la piña?”, a lo que Sarlenga respondió: “Sí. Te vengo a ver a vos. ¿Hace cuántos años que no nos vemos?”. El inesperado reencuentro de Guido Kaczka y un amigo de la infancia La autenticidad del momento quedó confirmada cuando el participante negó cualquier intervención de la producción: fue él mismo quien se inscribió, sin cómplices ni guion. La evocación de aquellos años incluyó recuerdos de una librería en la esquina de Yerbal y Lope de Vega, el Club Amigos de Villa Luro y otros escenarios compartidos en la infancia. Durante el reencuentro, Kaczka bromeó: “Si querías verme, nos hubiéramos tomado un café”, subrayando el carácter insólito de la situación: para volver a verse, su amigo necesitó anotarse en un programa de televisión nacional. Jerry, estás cambiado”, dijo Kaczka con cariño El momento de la competencia añadió una cuota de humor. Jerry se acercó a la máquina del juego y apenas logró un golpe suave a la bolsa, lo que provocó la risa incontenible de Kaczka. “Seguís igual. Antes también eras re gracioso, no cambiaste. ¿Sabés lo que te hacía reír este hombre? Qué placer”, celebró el conductor, mientras el estudio se transformaba en un escenario de recuerdos compartidos.
Ver noticia original