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Concordia » Hora Digital
Fecha: 17/07/2025 10:38
Dos ejemplares muertos de ballena sei fueron encontrados en Vicente López y Costanera Norte en menos de una semana. En menos de una semana, entre el 9 y el 16 de julio de 2024, dos ejemplares muertos de ballena sei (Balaenoptera borealis) fueron hallados en las costas de Vicente López, en la Zona Norte del Conurbano bonaerense, y en la Costanera Norte de la Ciudad de Buenos Aires. Esta especie, la tercera más grande del mundo según la Comisión Ballenera Internacional, solo es superada por la ballena azul y la ballena fin. Expertos de instituciones públicas y organizaciones como la Fundación Cethus están trabajando en la recolección de muestras para determinar las causas de las muertes. Laura Prosdocimi, bióloga del Museo Argentino de Ciencias Naturales e investigadora del Conicet, señaló a Infobae: “Se estima que las ballenas nadaban en grupo. Por alguna razón, la marea hizo que llegaran a las costas de Capital Federal y Zona Norte”. Sin embargo, advirtió que los estudios no serán rápidos ni necesariamente concluyentes. Mariano Coscarella, investigador del Centro para el Estudio de los Sistemas Marinos (CESIMAR-Conicet), explicó que la presencia de ballenas sei en la Cuenca del Plata no es inusual, ya que esta zona forma parte de su ruta migratoria. “No es tan infrecuente que las ballenas sei aparezcan en la Cuenca del Plata. Esa zona está dentro de la ruta de migración de la especie”, afirmó. Además, descartó por el momento evidencias de que un derrame de petróleo haya afectado a los ejemplares, aunque subrayó la dificultad de identificar las causas de los fallecimientos. La ballena sei, cuyo nombre proviene del noruego “seje” (abadejo), es una especie en peligro de extinción según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Su población fue drásticamente reducida por la caza comercial entre los siglos XIX y XX, con más de 300.000 ejemplares capturados globalmente. Aunque la caza cesó en 1979 en la Antártida, su recuperación es lenta, especialmente en el Atlántico sudoccidental. Los restos de los ejemplares hallados fueron trasladados a un banco de arena en el Delta del Paraná para facilitar su descomposición. La Fundación Cethus instó a la población a no tocar animales varados y a notificar de inmediato a las autoridades. Mientras tanto, investigaciones recientes del Conicet en el Golfo San Jorge (Chubut y Santa Cruz) han registrado un retorno significativo de la especie, con más de 70 ejemplares observados desde tierra y hasta 116 en conteos aéreos de mayo de 2022, lo que representa una esperanza para su conservación. Este hallazgo pone de relieve la importancia de proteger las rutas migratorias y los hábitats de la ballena sei, una especie que puede alcanzar entre 12 y 18 metros de longitud y pesar más de 20 toneladas, y cuya presencia en nuestras costas es un recordatorio de la riqueza de la biodiversidad marina en Argentina.
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