07/06/2025 08:37
07/06/2025 08:35
07/06/2025 08:34
07/06/2025 08:33
07/06/2025 08:32
07/06/2025 08:32
07/06/2025 08:31
07/06/2025 08:31
07/06/2025 08:30
07/06/2025 08:30
» LaVozdeMisiones
Fecha: 06/06/2025 14:50
A través una carta fechada el 4 de junio pasado, el ex oficial ayudante, Diego Correa escribió una carta desde la Unidad Penal VIII de Cerro Azul -donde se encuentra detenido hace casi 9 meses- en la que relata “lo vivido” previo a su detención, incluyendo denuncias a jefes y presuntos sobornos “para levantar el acampe de mayo en 2024”, rechazados por él y sus pares. Una familiar de Correa se comunicó con La Voz de Misiones para facilitar el material y aseguró que “todo esto fue declarado en dos oportunidades ante el juez Fernando Verón, en declaración de indagatoria, pero jamás lo escucharon y mucho menos dieron lugar”. “270 días, casi 9 meses detenidos ilegalmente, con retraso en la tramitación, violando todos los derechos a la defensa, violando todos los derechos humanos, un abandono completo de persona por parte del gobierno y la justicia misionera” por una “denuncia falsa”, comienza la misiva en alusión a la situación que atraviesan los ocho ex policías privados de su libertad desde octubre pasado: Horacio Coutto, Iván Arrieta, Ramón Arrieta, Lisandro Canteros, Joaquín Orrego, Adolfo Guirula, Ramón Amarilla y el mismo Correa. Hasta el momento, los detenidos no cuentan con una condena y permanecen detenidos con prisión preventiva. “Conté verdades que no le importaron al juez Verón. Casi 9 meses detenidos por capricho de una sola persona, un expediente con fojas de puro humo. Luego de casi 9 meses de investigación, donde no investigaron nada, por fin citaron a los testigos”, señaló Correa, que fue a indagatoria en dos oportunidades. “Denuncié a dos jefes” Al momento de adentrarse en los motivos por los cuales considera fue detenido, expresó: “Hoy he tomado una gran decisión que puede llevarme a la muerte, a mi o a mi familia” y ratificó que “No fue por integrar el grupo Solo Cola”. “En el año 2023 denuncié a dos jefes de la Policía, al comisario mayor Rotela y al comisario mayor Malosky, ambos por cobrar coimas por venta ilegal de combustible, donde el señor jefe de Policía Sandro Martínez me ordenó cerrar la boca y fui tildado de traidor por varios jefes”, detalla en el escrito. Luego, menciona una supuesta coima que le habrían ofrecido “para levantar el acampe multisectorial” realizado en mayo de 2024 sobre avenida Uruguay de Posadas: “El 21 de mayo, en una oficina de la Jefatura de Policía, el jefe de Policía, el sub jefe, el jefe de Criminalística, junto a Héctor “Kiko” Llera, en ese momento, nos ofrecieron 50 millones de pesos, una casa, una camioneta y un coche a cada uno, lo cual no aceptamos. Y nos dijeron: “Van a terminar presos, solos y en la calle”. Lo cumplieron”. Y añadió: “Hoy Sandro Martínez sigue enviando a la Brigada para espiar a mi familia. Se detienen frente a mi casa, en la esquina, siguen a mi auto, ¡siguen infringiendo el miedo a mi familia!”. “Por esto y mucho más hago responsable de la seguridad de mi familia al gobierno de Misiones, al gobernador, al vice gobernador, al ministro de Seguridad, al jefe de Policía, al juez Verón, al diputado Carlos Rovira y al juez Verón”. Por último, denunció “allanamientos en la celda”, “malos tratos” y enfatizó: “No somos delincuentes, solo luchamos por una mejora salarial, por nuestros derechos y contra cualquier forma de opresión o silencio impuesto por el gobierno y jefes de Policía. No debemos permitir que la intimidación y represión nos silencien. La lucha es justa y necesaria. Nunca nos dejemos sobornar porque la dignidad y la libertad no se negocian”.
Ver noticia original