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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 29/05/2025 08:40
En una noche vibrante en el estadio Maracaná, Agustín Rossi protagonizó una atajada decisiva que selló el destino de Central Córdoba de Santiago del Estero en el plano internacional. El arquero argentino, hoy en Flamengo, evitó sobre la hora el empate de Deportivo Táchira y aseguró la victoria por 1-0 del conjunto brasileño, que clasificó a los octavos de final por diferencia de gol. Como contracara, el equipo argentino, en su primera participación histórica en el certamen, quedó relegado a la Copa Sudamericana a pesar de haber sumado once puntos en la fase de grupos. Corría el minuto 94 de partido cuando Deportivo Táchira ejecutó un córner que derivó en una pelota suelta en el área chica. Lucas Cano, delantero del equipo venezolano, se encontró con la oportunidad de empatar el encuentro y modificar el panorama del Grupo C. Pero cuando parecía que el remate tenía destino de gol, Rossi, con un movimiento instintivo, despejó el disparo con su pierna izquierda, salvando a Flamengo y cambiando el desenlace del grupo. La jugada, que rápidamente se viralizó en redes sociales, no solo preservó la victoria del Mengao, sino que tuvo consecuencias directas en la tabla de posiciones: gracias a ese resultado, el Fla alcanzó los 11 puntos y, por diferencia de gol, desplazó a Central Córdoba al tercer puesto del grupo. El Grupo C terminó con un triple empate en la cima entre Liga de Quito, Flamengo y Central Córdoba, todos con 11 puntos. Sin embargo, la diferencia de gol fue determinante: el equipo ecuatoriano finalizó con un +4, Flamengo con +3 y Central Córdoba con 0. Esta mínima diferencia dejó al conjunto argentino fuera de la Libertadores. Central Córdoba llegó a la última fecha como líder de su grupo, pero su visita a Quito fue clave en su eliminación. Liga lo derrotó por 3-0 en un partido que se definió por la contundencia del equipo local en momentos decisivos. Alexander Alvarado, a los 15 minutos, abrió el marcador con un cabezazo. Antes del descanso, Lisandro Alzugaray amplió la ventaja con un zurdazo cruzado que pasó por revisión del VAR y fue convalidado. En el segundo tiempo, el propio Alzugaray selló el resultado con otro tanto dentro del área. A pesar de que los dirigidos por Omar De Felippe intentaron descontar para mejorar su diferencia de gol, la falta de eficacia en los metros finales fue un obstáculo insalvable. La goleada recibida terminó siendo determinante, y el destino de Central Córdoba pasó a depender del resultado en Río de Janeiro. La eliminación de Central Córdoba con 11 puntos es un hecho excepcional en la historia del torneo. Solo existe un antecedente similar: ocurrió en la edición 2007, cuando Audax Italiano, de Chile, también quedó eliminado en la fase de grupos con 11 unidades. En aquel entonces, el equipo trasandino compartió el grupo con Necaxa y San Pablo. El elenco mexicano avanzó con 12 puntos, mientras que los brasileños lo hicieron con los mismos 11 que Audax, pero con mejor diferencia de gol (+7 contra +2). El conjunto chileno contaba en su plantel con un joven Franco Di Santo como principal carta ofensiva. Central Córdoba, que vivió una experiencia inédita en la Copa Libertadores, dejó una imagen competitiva al sumar tres triunfos, dos empates y apenas una derrota. Sin embargo, la caída ante Liga y la posterior victoria de Flamengo lo relegaron a los 16avos de final de la Copa Sudamericana, instancia en la que se enfrentará con un equipo que haya terminado segundo en su grupo del otro certamen continental. La Conmebol realizará el sorteo de esa fase el próximo lunes. Allí se definirá el futuro inmediato del equipo santiagueño, que buscará prolongar su histórica participación internacional en un nuevo escenario. Tabla de posiciones del Grupo C de la Copa Libertadores:
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