21/05/2025 16:37
21/05/2025 16:37
21/05/2025 16:37
21/05/2025 16:37
21/05/2025 16:37
21/05/2025 16:37
21/05/2025 16:37
21/05/2025 16:37
21/05/2025 16:36
21/05/2025 16:36
Buenos Aires » Infobae
Fecha: 21/05/2025 10:42
(Imagen Ilustrativa Infobae) Desde hace siglos, el jengibre fue utilizado como remedio natural para aliviar malestares digestivos y náuseas. No obstante, una nueva revisión científica publicada en marzo de 2025 en la revista Cureus sugirió que esta raíz picante podría tener un impacto todavía más profundo, proteger la salud cardiovascular. El trabajo, titulado Jengibre: un suplemento nutracéutico para la protección contra diversas enfermedades cardiovasculares en ensayos clínicos, evaluó múltiples estudios clínicos y concluyó que el jengibre puede actuar sobre varios factores de riesgo vinculados a enfermedades del corazón. 1- Reduce la presión arterial sistólica Revisión científica: el jengibre podría reducir factores de riesgo cardiovascular como la presión arterial alta (Freepik) Una de las conclusiones más consistentes de la revisión de Cureus es que los suplementos de jengibre pueden reducir la presión arterial sistólica, es decir, el número más alto de la medición que refleja la presión en los vasos cuando el corazón late. Esta reducción es relevante porque una presión sistólica elevada somete al corazón y a las arterias a un esfuerzo prolongado, aumentando el riesgo de eventos como infartos o accidentes cerebrovasculares. Liz Weinandy, nutricionista del Centro Médico Wexner de la Universidad Estatal de Ohio, explicó que algunos compuestos específicos del jengibre pueden funcionar de manera similar a los medicamentos bloqueadores de los canales de calcio. Estos fármacos relajan las paredes vasculares y reducen la frecuencia cardíaca, efecto que también podría atribuirse a ciertos componentes del jengibre. 2- Disminuye el colesterol LDL y los triglicéridos Los compuestos del jengibre alivian inflamaciones crónicas mediante efectos antioxidantes y fortalecen el sistema inmunológico (Imagen Ilustrativa Infobae) Otro de los efectos destacados en la revisión científica es la capacidad del jengibre para mejorar el perfil lipídico. En personas con obesidad que tomaban metformina, el consumo de hasta 1,8 gramos diarios de jengibre produjo descensos significativos en los niveles de colesterol total, colesterol LDL (conocido como “malo”) y triglicéridos. Según Lindsay Malone, instructora de nutrición en la Facultad de Medicina de la Universidad Case Western Reserve, estos efectos podrían deberse a que los componentes activos del jengibre inhiben la síntesis de colesterol en el hígado, aumentan la secreción de ácidos biliares y mejoran la actividad de las enzimas que descomponen las grasas. También, se mencionan fitoquímicos como polifenoles y flavonoides, capaces de prevenir la formación de colesterol. 3- Combate la inflamación crónica Estudios resaltan la capacidad de esta raíz para reducir colesterol LDL y mejorar triglicéridos en pacientes con obesidad (Imagen ilustrativa Infobae) La inflamación persistente en el cuerpo está reconocida como una causa estructural de numerosas enfermedades crónicas, incluyendo la cardiovascular. Según el análisis publicado en Cureus, el jengibre contiene compuestos fenólicos como gingeroles, shogaoles y paradoles, que ejercen efectos antiinflamatorios significativos. Un estudio citado en la revisión mostró que el consumo diario de 2 gramos de jengibre durante tres meses logró reducir los niveles de inflamación. “Algunos fitoquímicos ayudan a mantener a raya las bacterias, los virus y otros microbios al fortalecer nuestro sistema inmunitario”, señaló Weinandy. “Otros ayudan a neutralizar los radicales libres, que pueden dañar las células de nuestro cuerpo”, agregó. 4- Previene la aterosclerosis El consumo diario de jengibre contribuye a proteger contra la aterosclerosis mediante sus efectos antioxidantes únicos (Imagen Ilustrativa Infobae) Los efectos antioxidantes del jengibre también se reflejan en su capacidad para proteger contra la aterosclerosis, una condición caracterizada por la acumulación de placa en las arterias. Este proceso puede restringir el flujo sanguíneo y provocar complicaciones como ataques cardíacos o accidentes cerebrovasculares. Lindsay Malone sostuvo que los compuestos bioactivos del jengibre, en particular los antioxidantes naturales, ayudan a proteger las células del corazón y de los vasos sanguíneos del daño oxidativo provocado por los radicales libres. Este mecanismo podría interrumpir o ralentizar el desarrollo de la enfermedad arterial. 5- Contribuye a un mejor control de la glucosa Compuestos como el 6-gingerol del jengibre facilitan el control de la glucosa en diabéticos tipo 2 (Imagen Ilustrativa Infobae) El jengibre también mostró beneficios claros en el control del azúcar en sangre, especialmente entre personas con diabetes tipo 2. Uno de sus compuestos principales, el 6-gingerol, facilita el transporte de glucosa desde el torrente sanguíneo hacia el tejido muscular, lo que disminuye la glucemia y mejora la sensibilidad a la insulina. En uno de los ensayos evaluados, pacientes diabéticos que consumieron 1.600 miligramos de jengibre al día durante tres meses experimentaron una reducción significativa de la glucosa en ayunas, los niveles de insulina y la hemoglobina glucosilada (HbA1c), un marcador clave del control metabólico sostenido. Qué tener en cuenta antes de incorporar jengibre a la dieta Aunque los hallazgos son prometedores, los propios autores del estudio advierten sobre ciertas limitaciones. Tal como señaló Nyree Dardarian, profesora clínica adjunta de nutrición en la Universidad de Drexel, los estudios incluidos en la revisión varían significativamente en dosis, duración, población y forma del jengibre, lo que impide establecer recomendaciones universales o una dosis estándar eficaz. Además, el jengibre no es una cura ni reemplaza a los tratamientos médicos. Según Dardarian, es un gran complemento, pero funciona mejor en el contexto de un estilo de vida saludable en general. Se recomienda usarlo como ingrediente fresco o en polvo en comidas y bebidas, y consultar con un profesional de la salud antes de tomar suplementos si se padece alguna afección o se está bajo tratamiento farmacológico.
Ver noticia original