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Federal » El Federaense
Fecha: 15/05/2025 21:22
En el último episodio de Gran Hermano, las tensiones entre los participantes alcanzaron un nuevo nivel. Este jueves, Eugenia Ruiz no tuvo reparos en confrontar a Tato por su comportamiento dentro de la casa, acusándolo de egoísmo en momentos críticos. “Agarraste la carne, cuando no había comida, y te importó nada que no teníamos comida. Has tenido una actitud egoísta”, expuso la santiagueña, dejando claro su desagrado. La discusión se intensificó cuando Tato, intentando apaciguar las cosas, le preguntó: “¿Me aceptas las disculpas?”. A lo que Eugenia respondió con dureza: “Yo te las acepto, pero tuvo que pasar mucha agua bajo del puente para que vos pidas disculpas”. La Actitud Egoísta de Tato Eugenia continuó desmenuzando la actitud de su compañero, reseñando un momento crítico: “Te comiste la comida cuando no había ni un chorizo en la heladera. Elegiste hacerte carne para vos”. La situación se volvió aún más tensa cuando recordó un intercambio durante una gala anterior, donde según ella, Tato intentó desviar la atención de sus actos egoístas señalando que “eligieron los puchos en vez de la comida”, resaltando su propia hipocresía. Al cerrar su intervención, Eugenia no tuvo reparos en calificar a Tato de “manipulador”, acentuando la falta de gratitud que mostró hacia Sandra. “Sos ingrato con Sandra. Te hacés el bueno con ella y no sos capaz de darle un pucho. Jugás con hacerte el correcto”, sentenció, dejando el ambiente cargado de tensión. Otra Pelea Cargada de Emociones No solo Eugenia y Tato protagonizaron momentos explosivos en el reality; en una transmisión previa, Lucía y Selva también se enfrentaron en una pelea que rápidamente escaló en gritos e insultos. Esta situación se desató durante una conversación sobre la organización de la comida de la semana, donde Selva lanzó un comentario desafiante hacia Lucía, que se sintió herida y se retiró llorando. Sin embargo, Lucía no se quedó en el silencio. En un arranque de furia, regresó para confrontar a Selva: “Selva, te voy a decir una cosa… Querés jugar así, vamos a jugar así. Te lo aviso, porque conmigo no vas a hacer giladas… no te vas a hacer la piola”, exclamó enfadada. La escena culminó con un portazo, dejando claro que la tensión estaba lejos de disiparse. Selva, armada de calma y sarcasmo, decidió no reaccionar ante la explosión de Lucía. Más bien, lo usó como un espectáculo para los espectadores, observando con ironía que Lucía parecía desesperada tras haber sido una de las menos votadas en la última placa. Conclusiones Los altercados en Gran Hermano no solo revelan las personalidades de los concursantes sino que también destacan una atmósfera cargada de emociones. Esta temporada promete más confrontaciones, rivalidades y dramas que mantendrán a la audiencia al borde de su asiento.
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