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Colon » El Entre Rios
Fecha: 10/05/2025 08:30
Cambios en la política de hidrógeno verde Otros desafíos territoriales El gobierno de Yamandú Orsi analiza la política de Uruguay en torno al hidrógeno verde, una industria con potencial de inversiones de miles de millones de dólares, a la que quiere dotar de una visión que abarque aspectos territoriales y socieconómicos además de los ambientales, incluso estableciendo zonas para este tipo de proyectos. En ese sentido, se detallaron algunos cambios que tendrá el proyecto de HIF Global en Paysandú (la que podría convertirse en la mayor inversión en la historia del país con unos US$ 6.000 millones) para producir e-fuels.Hace dos semanas, se informó de una reunión entre representantes de HIF, la ministra de Industria, Energía y Minería, Fernanda Cardona y el secretario de Presidencia, Alejandro Sánchez en Torre Ejecutiva. Allí, según relataron los informantes, la empresa transmitió al gobierno que avanzó en la consolidación del financiamiento para llevar adelante el proyecto. Y que tiene previsto presentar a las autoridades modificaciones a la propuesta que fue presentada en 2023 también con el objetivo de que sea una obra que se concrete “en el corto plazo”.Las fuentes señalaron que en la renegociación, se va a explorar también si se puede volver a incluir la cláusula que da a Ancap la opción de participar o no de la inversión en HIF con un porcentaje de hasta 30%. Esto fue quitado del acuerdo por el anterior gobierno de Luis Lacalle Pou y generó la renuncia del entonces presidente de Ancap, Alejandro Stipanicic. La exministra de Industria, Energía y Minería, Elisa Facio entendía que esa cláusula obligaba a Ancap a participar y Stipanicic entendía que solo le daba la opción (a definir más adelante) de hacerlo. El actual gobierno entiende que Ancap no debería amputarse la posibilidad de participar en caso que se vea que es una inversión rentable y que tiene que tener esa opción.Si la producción de hidrógeno verde -para lo que se necesita contar con energía eléctrica generada con fuentes renovables como la solar, eólica y biomasa- puede ser una industria que genere inversiones de miles de millones de dólares, como la de HIF, el gobierno quiere tener una nueva política al respecto.En ese sentido, la directora Nacional de Ordenamiento Territorial del Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial (MVOT), Paola Florio dijo a El País que “cuando uno piensa en el emplazamiento de estos tipos de emprendimientos, necesariamente se necesita un estudio transversal e integral” que tome en cuenta también los lugares donde se van a instalar los proyectos.Florio explicó que el hidrógeno verde implica articular entre distintos tipos de infraestructura: por un lado, las granjas solares o parques eólicos que dada sus extensiones y características suelen estar ubicadas en suelos rurales, y por otro, la planta industrial, que debe instalarse en suelo urbano o suburbano.“El abordaje tiene que ser mucho más integral que el proceso industrial en sí, dado que se crean enclaves suburbanos que deben abastecerse de energía producida en el campo. Eso implica una tensión entre la producción de alimentos y la producción energética”, analizó Florio."El desafío territorial no está en la ubicación de la industria en sí, sino en la extensión y localización de la infraestructura energética asociada”, agregó.Para la funcionaria estos proyectos pueden ser positivos, no obstante se deben evaluar con cuidado los equilibrios territoriales y remarcó la necesidad de pensar en la “capacidad de carga que tiene Uruguay para dar respuesta a este tipo de desarrollos o cuál es el equilibrio entre la producción, los ecosistemas, el desarrollo, y la generación de energías” .“Creemos que es necesario, a través de las directrices nacionales, generar herramientas para atender la capacidad de carga que tiene el país y facilitar la instalación de este tipo de emprendimientos en aquellos lugares que sean aptos para su instalación y no donde el mercado de suelo acceda a la venta”, afirmó Florio.Para ello, planteó la importancia de contar con un mapa de aquellas zonas que tendrían la capacidad para dar respuesta a las necesidades que requieran las plantas de hidrógeno verde, teniendo en cuenta el sistema productivo, zonas que cuenten con menos riesgos de impactos ambientales y donde haya infraestructura necesaria para el transporte del producto final.Esto incluye también la utilización del agua. El hidrógeno se produce mediante la electrólisis, un proceso que consiste en utilizar energía eléctrica para separar las moléculas de agua (H2O) en hidrógeno (H2) y oxígeno (O2). De hecho, a nivel del Ministerio de Industria, Energía y Minería se trabaja con la Facultad de Ingeniería para definir cuáles son las áreas críticas del recurso agua (y por tanto se deben preservar) y aquellas en las que un incremento en la demanda por la producción de hidrógeno verde no modificaría significativamente las condiciones, dijeron a El País fuentes del gobierno.También se realizará un estudio sobre "el impacto socioeconómico" de la industria del hidrógeno verde y derivados, agregaron las fuentes.Florio indicó que la instalación de estas industrias también genera desafíos en términos de planificación urbana y habitacional. Recordó lo que sucedió con la empresa UPM, en donde se tuvieron que elaborar diferentes espacios destinados a viviendas, no solamente para los operarios que estaban en los procesos de construcción, sino también para aquellos que iban a trabajar luego en la planta.“Históricamente, este tipo de desarrollos y emprendimientos han generado entornos asociados a la vivienda que también hay que planificar”, indicó y por eso, hay que “pensar dónde reside y dónde vive la gente que trabajaría en este tipo de emprendimientos que están directamente asociados a áreas que no están en entornos urbanos”, antes de que avance el proyecto.“Estas consideraciones asociadas a una planificación eficiente de los territorios, permite un desarrollo sostenible del país, pero también definiciones claras para las empresas que luego también se traduce en menos tiempo en los procesos de gestión”, concluyó Florio.Actualmente hay tres proyectos de hidrógeno verde en Uruguay con distinto grado de avance: el mencionado de HIF Global, el de Tambor Green Hydrogen Hub en Tambores (Tacuarembó), que prevé producir 15.000 toneladas anuales de hidrógeno verde y el proyecto Kahirós que planea una planta para abastecer a ocho camiones de carga de madera de la empresa Montes del Plata a partir de 2026.
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