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Federal » El Federaense
Fecha: 04/05/2025 21:04
Ferrari se encuentra en un momento complicado dentro de la temporada de Fórmula 1, y el Gran Premio de Miami no fue la excepción. Mensajes contradictorios por la radio, quejas de los pilotos y tensiones evidentes entre ingenieros y pilotos definieron una carrera que parecía más una novela que un evento deportivo. La famosa escudería, con una trayectoria impresionante y un palmarés que incluye más de 248 triunfos, se siente lejos de las expectativas que se han generado. Confusión y Rivalidad en Pista Con Lewis Hamilton y Charles Leclerc compitiendo en el mismo equipo, la presión es palpable. Ambos pilotos, entrenados en su arte y con un historial brillante, se encontraron luchando por posiciones que están muy por debajo de su nivel habitual. Mientras que Ferrari desplegaba una estrategia complicada, la carrera se convirtió en un tira y afloja en la que ambos pilotos se mostraban impacientes y preocupados. Una Estrategia Cuestionada El equipo italiano eligió diferentes estrategias de neumáticos para ambos pilotos. Mientras Leclerc optó por comenzar con neumáticos medios, Hamilton tomó rumbo opuesto. Esta elección resultó en un enfrentamiento sorprendente, donde en lugar de cooperar, ambos pilotos se vieron envueltos en una batalla interna por alcanzar el ansiado séptimo puesto. Con Hamilton mostrando un ritmo superior, comenzaron los mensajes por radio, que solo aumentaron la tensión en el cockpit de Ferrari. A medida que avanzaba la carrera, el heptacampeón comenzó a expresar sus frustraciones de manera clara. “¿Quieres que me quede aquí sentado toda la carrera?”, preguntó exasperado. La respuesta del equipo no fue la esperada: querían resguardar las posiciones y el DRS para el monegasco. La carrera avanzó y las tensiones aumentaron, llevando a ambos a cuestionar la lógica detrás de sus órdenes. El Fracaso de la Escudería Con una clasificación que dejó mucho que desear, Ferrari culminó la carrera sintiendo que había rascado la olla para obtener solo unos pocos puntos. Actualmente se encuentran cuartos en la clasificación de constructores, a ¡152 puntos del líder McLaren! Ambas estrellas, luego de la carrera, se presentaron a los medios, donde sus respuestas mostraron la tensión reinante. Leclerc expresó su frustración sobre la falta de velocidad y la necesidad de un cambio interno, mientras que Hamilton describió la situación como frustrante, prefiriendo hacer un trabajo en equipo en vez de involucrarse en luchas internas. Expectativas de Futuro Con una serie de actualizaciones programadas para la próxima carrera en Imola, el equipo espera cambiar el rumbo de su desempeño. Los tifosi, leales y apasionados, esperan que Ferrari regrese a la senda de las victorias, dejando atrás las novelas innecesarias por pequeños premios. Las miradas están puestas en los próximos pasos del equipo, que tendrá la difícil tarea de reenfocar su estrategia para reclamar su lugar en el podio.
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