28/04/2025 23:10
28/04/2025 23:10
28/04/2025 23:06
28/04/2025 23:06
28/04/2025 23:05
28/04/2025 23:04
28/04/2025 23:03
28/04/2025 23:02
28/04/2025 23:02
28/04/2025 23:01
» El Ciudadano
Fecha: 28/04/2025 19:43
La Justicia federal investiga una red de lavado con raíces en el narcotráfico rosarino que tiene como protagonista a un empresario que está a punto de cumplir su condena como integrante de la banda de Ignacio «Ojito» Actis Caporale y del ex comisario Alejandro Druetta. Tras los allanamientos de la semana pasada, Carlos “Charly” Colombi fue imputado este viernes por lavado de activos junto a su pareja abogada, y sus dos hermanos. El juez Marcelo Bailaque presidió la audiencia y dictó la libertad para el cuarteto. La investigación, a cargo del fiscal de la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar) en Rosario, Matías Scilabra, y su par de la Procuraduría de Criminalidad Económica (Proselac), Juan Argibay Molina, apunta a una empresa de plásticos y propiedades que sirvieron para ocultar el origen ilícito de fondos. El miércoles último, Gendarmería allanó siete inmuebles en Rosario, Granadero Baigorria y Alvear, incluyendo un galpón de la firma CyL Constructora SRL, un lavadero de autos y un estudio jurídico. También revisaron una caja de seguridad en la sucursal del Banco Galicia en Sarmiento al 700, pero no encontraron drogas. Pese a ello, las sospechas se mantienen: según escuchas telefónicas que surgieron tras una denuncia de un informante, Colombini expuso su intención de «vender todo e irse a Italia» si la Justicia lo «seguía presionando». La trama del lavado Colombini, de 39 años, cumple una condena de seis años por narcotráfico en la causa de Ojitos Caporale y el comisario Druetta que vence el 30 de enero de 2026, pero desde diciembre de 2023 gozaba de salidas transitorias. Según la hipótesis que mantiene la pesquisa, durante ese tiempo montó una estructura para blanquear dinero. La empresa CyL, dedicada supuestamente al rubro plásticos, mostró un crecimiento sospechoso: no tenía facturación en 2019 hasta que Charly compró la mayoría de las acciones y pasó a facturar 181.500 en 2020, hasta 297 millones en 2024. Además, investigan la compra de embarcaciones de alto valor (una de ellas cotizada en 180.000 dólares) y propiedades a nombre de sus hermanos, quienes oficiaron de testaferros. Su pareja, la abogada Damaris L., también está en la mira por manejar empresas que, según los fiscales, no tenían actividad real. Vinculación con Ojito y policías corruptos En 2012, Charly Colombini fue detenido como parte de la banda de Ojito Caporale, que proveía a Norma «La Tía» López en zona noroeste y que luego fue capturado en 2016 mientras competía en carreras de autos bajo un alias. Ahora, la pesquisa sugiere que Colombini mantuvo vínculos con el crimen organizado incluso tras su condena. Un informe de la Policía Federal señalaba que operaba una cocina de cocaína desde un galpón en Alvear, supuestamente con protección policial. «Si los investigan, esta gente ya se da cuenta apenas entrás al camino», fue la advertencia del informante, el cual dio a entender que también tenía vínculos con policías santafesinos. Allanamientos Los fiscales se enfocaron en el análisis financiero del principal investigado y sus familiares, lo que los llevó a enfocarse en: tres galpones (uno en Alvear, otro sobre la autopista Rosario – Buenos Aires y el tercero en Rueda al 3600), el departamento del matrimonio (Balcarce al 100 bis), el estudio jurídico de la esposa (Montevideo al 2000), un lavadero (avenida Pellegrini 5800) y una vivienda en Granadero Baigorria relacionada a un camionero, quien sería su empleado y también estuvo nombrado en una causa relacionada al proveedor de cocaína a gran escala boliviano Jorge Adalid Granier Ruiz. Estos inmuebles fueron el blanco de los operativos donde no sólo buscaron estupefacientes, dinero en efectivo, celulares, objetos de electrónica, dispositivos como billeteras frías (para almacenamiento de monedas virtuales) sino también documentación como contratos, escrituras que den cuenta del patrimonio real de Charly. Siguiendo esta última línea, el octavo de los procedimientos fue en la caja de seguridad que estaba a nombre de Damaris L. en la sucursal del banco Galicia de Sarmiento al 700. Sobre los resultados de estas medidas, voceros relacionados al caso sólo dejaron trascender que no hallaron drogas pero sí documentación de interés para la causa. Libertad con inhibiciones El juez federal Bailaque resolvió dejar en libertad a Colombini, su pareja Damaris y sus hermanos Alicia y Martiniano. Les dictó la inhibición de bienes.
Ver noticia original