Contacto

×
  • +54 343 4178845

  • bcuadra@examedia.com.ar

  • Entre Ríos, Argentina

  • Diego Peretti y Federico D’Elía, dos actores que comparten escenario y amistad: “Somos como hermanos”

    Buenos Aires » Infobae

    Fecha: 20/04/2025 02:39

    "El Jefe Del Jefe" con Diego Peretti y Federico D’Elía Reunidos por Teleshow, Diego Peretti y Federico D’Elía conversan sobre el significado de trabajar juntos nuevamente, el detrás de escena de la obra, el universo laboral que retratan y también, inevitablemente, sobre el esperado regreso de Los Simuladores. La charla fluye entre anécdotas, ideas sobre el liderazgo y carcajadas genuinas. “Creo que eso es lo más lindo de este proyecto es estar juntos este rato... va a ser un año que vamos a recordar siempre.”, sostiene D’Elía. “Nos conocimos en el ’94, con Alejandro Fiore, Sbaraglia, Pepe Monje… Yo estaba medio tangencial, pero ahí arrancó todo”, recuerda Diego Peretti sobre los primeros años de amistad con Federico D’Elía, a quien define como un compañero entrañable tanto dentro como fuera del escenario. “Pegamos onda enseguida” suma D’Elía, evocando los inicios de una relación que atravesó décadas de carreras, éxitos, fracasos, familias y proyectos. Hoy, aquel lazo se traduce en una nueva apuesta teatral: “El Jefe Del Jefe” una obra de Lars Von Trier, dirigida por Javier Daulte que los vuelve a reunir con roles protagónicos de miércoles a domingos en el teatro Paseo La Plata. Pero más allá del reencuentro escénico, lo que late es la historia de dos amigos que construyeron un vínculo tan sólido como intuitivo. Federico D'Elía y Diego Peretti (Crédito: Gastón Taylor) Con esa complicidad intacta, ambos se embarcaron en este nuevo proyecto, donde lo que aparenta ser una simple comedia se convierte en una reflexión hilarante y aguda sobre el trabajo, el poder y la identidad. “La obra parece una cosa, pero es otra. Es una mamushka. La historia va abriendo capas, y el espectador va armando ese rompecabezas junto con nosotros,” explica D’Elía. Peretti agrega: “Hay simulación, omisión, mentira. Todo lo que uno necesita para cumplir un rol… en este caso, en una oficina.” Una amistad nacida en los escenarios Aquel origen del vínculo entre Diego Peretti y Federico D’Elía se remonta a los años noventa, cuando ambos coincidieron en el montaje de El enemigo de la clase, dirigida por El Indio Romero. Fue Alejandro Fiore, amigo común, quien llevó a Peretti a una lectura junto al resto del elenco, en el que también estaban Damián de Santo y Miguel Cavia. “Y desde ahí, hasta el día de hoy, no nos separamos más.”, repiten. Federico D'Elía comparte cartel con Diergo Peretti, en "El Jefe Del Jefe" A lo largo de los años atravesaron momentos de más cercanía y otros de distancia, pero el lazo se mantuvo constante. “Siempre hubo algo que nos unía,” afirma D’Elía. “Coincidimos con el despegar de nuestras carreras, con nuestros hijos, con éxitos en la mano y fracasos también.” Para Peretti, la relación tiene un aire casi familiar. “Somos como hermanos. Viste que con el hermano por ahí no te ves, pero el vínculo está. Es eso,” señala. Y aunque ya no compartan veranos alquilando casas juntos ni pasen tanto tiempo pegados como antes, esa conexión sigue firme. “La verdad que nos divertíamos mucho. La vida: crecimos, pareja, hijos… ese pegote desapareció, pero quedó lo esencial,” completa D’Elía. Volver a compartir el trabajo El reencuentro de Peretti y D’Elía sobre las tablas no fue algo planeado, pero sí bienvenido por ambos desde el primer momento. La propuesta les llegó casi en simultáneo, y apenas supieron que el otro estaba involucrado, no dudaron. “A mí me hablaron el director Javier Daulte y el productor Pablo Kompel, del Complejo La Plaza” cuenta Peretti. “Había otro proyecto que se postergó, y me ofrecieron esta obra. La leí, me gustó, me dijeron que estaba él —Fede— y me encantó.” Del otro lado, la historia es parecida. “Me llamó Kompel, me pasó la obra. No había trabajado con Javier antes, pero me parecía buenísimo,” dice D’Elía, quien remarca que no se trataba solo de una buena oportunidad profesional, sino también de una coincidencia emocional. “Se daban muchas cosas que me daban ganas.” cuenta a Teleshow. "El Jefe Del Jefe" elenco completo, Federico D'Elía, Diego Peretti, Juan Isola, Ariadna Asturzzi, Andrea Lovera y Cristian Jensen Ambos destacan que trabajar con alguien con quien hay confianza y entendimiento es un plus, pero no una condición obligatoria. “No necesariamente tenés que ser amigo para laburar,” reflexiona D’Elía. “Pero cuanto mejor te llevás, mejor se trabaja. Eso no tengo duda.” Peretti coincide y exclama: “Rendís mejor.” Este proyecto teatral se convirtió, entonces, en una especie de regalo para ambos. “Me encanta que sea una experiencia teatral con Fede, donde los dos llevamos la batuta,” confiesa Peretti. D’Elía, por su parte, lo vive como un lujo personal: “Son estos gustos que no te das muchas veces en la vida”. Diego Peretti reflexiona sobre cómo las oficinas y el ámbito laboral moldean vínculos humanos cotidianos Los dos transmiten esta obra compartida como una oportunidad de estar en escena con alguien a quien se admira, se quiere y, sobre todo, se entiende. La trama : simulaciones, identidades y vínculos laborales La sinopsis de El Jefe... puede sonar simple: un empresario que jamás reveló que era el dueño de su compañía decide venderla y, para ello, contrata a un actor que lo represente como si fuera el verdadero jefe. Sin embargo, como explican sus protagonistas, la obra es mucho más que esa premisa. “Parece que la obra es eso, pero en realidad no. Es una anécdota. La obra está en todo lo que pasa en el medio,” explica Federico D’Elía, que interpreta al verdadero jefe encubierto. La historia se convierte en una comedia de enredos con capas de significados, donde la línea entre lo real y lo representado se vuelve difusa. “Vas abriendo cajas y cajas y van apareciendo cositas”. Diego Peretti, quien interpreta al actor contratado para hacer de jefe, completa la idea: “Se mantiene esa cosa del mundo de la oficina y el mundo del artista”. Federico D’Elía y Diego Peretti protagonizan “El Jefe Del Jefe,” una obra que combina comedia y crítica al mundo laboral En esa tensión entre verdad y representación es donde la obra encuentra su tono y su ritmo. No se trata solo de un juego de identidades, sino de una exploración sobre los vínculos humanos dentro del ámbito laboral. “Todo lo interesante es cómo llega este tipo al lugar, qué sabe y qué no sabe, qué se complica,” describe D’Elía, y anticipa que el espectador irá descubriendo junto al personaje de Peretti cómo se teje la red de relaciones dentro de esa oficina tan particular. Y aunque el tono es de comedia, no se trata de humor fácil. “Es una comedia más bien disparatada, de puertas, pero no de chistes fáciles. Es de situaciones,” aclara Peretti. El relato se apoya en la construcción de escenas inesperadas, diálogos cargados de ironía y momentos de sorpresa que exponen los pequeños absurdos de la vida cotidiana en el trabajo. Hay también una reflexión más profunda escondida entre risas. “En esta obra hay simulación, claro. Como en la vida. Simulación, omisión, mentira... todo lo que uno necesita para cumplir un rol en determinado lugar de tu vida. En este caso, en el trabajo,” dice Peretti. Y D’Elía lo resume con claridad: “Todo lo demás es lo lindo que tiene esta obra.” Diego Peretti protagoniza junado a Federico D Elía "El Jefe Del Jefe" en el Complejo La Plaza Oficinas, rutinas y realidades laborales Más allá de la ficción, tanto Peretti como D’Elía han transitado —aunque brevemente— el mundo de las oficinas en la vida real. Y si bien la experiencia no los marcó profesionalmente, sí les dejó sensaciones y observaciones que hoy resuenan. “Trabajé en una fotocopiadora, en un colegio secundario… que es medio una oficina también,” cuenta Peretti. Y añade que incluso los hospitales, donde ejerció como psiquiatra antes de dedicarse por completo a la actuación, tienen algo de ese universo. “Con sus rutinas, sus papeles, sus horarios... tienen esa cosa oficinesca.” D’Elía, en cambio, lo vivió con menos tolerancia. “Alguna vez trabajé en un estudio jurídico importante. No me gustó. Nunca me gustó,” afirma. “Usar saco y corbata me incomoda. No soy de esas personas.” Su experiencia fue breve, pero reveladora: “Estuve dos o tres meses. Para pagarme algo. Pero es un ámbito donde nunca me sentí cómodo.”, confiesa el actor a Teleshow. Diego Peretti y Federico D'Elía, comparten una amistad y el placer de trabajar juntos Esa distancia con el mundo corporativo no les impide entender la lógica que lo rige. La rutina, el piloto automático, la pertenencia. “Hay gente que trabaja en oficinas durante años. Como en esta obra. Mi viejo, por ejemplo, iba a La Plata a una oficina, y 40 años después se encontró al mismo tipo en la puerta,” cuenta D’Elía, entre risas. Pero también hay una mirada más empática. “La oficina te da pertenencia. Te da contención ante las crisis, ante los problemas. Son como una segunda familia,” dice Peretti, y destaca que cuando el clima es sano, puede ser incluso gratificante. “Si el jefe no es un psicópata… puede ser un lindo grupo.” En esa misma línea, destacan cómo El Jefe... retrata ese universo con acidez y ternura. “Son tipos que se ven todos los días de lunes a viernes sin plantearse qué hacen. Y de pronto sucede un descalabro y eso saca a la luz quién es cada uno,” explica Peretti. ¿Qué es ser jefe? Liderazgo, poder y responsabilidad Uno de los temas que atraviesa El Jefe... es el liderazgo: quién lo ejerce, cómo lo ejerce, y qué implica ocupar ese lugar. En la obra, el personaje de Federico D’Elía encarna al verdadero jefe de una empresa que ha decidido no ocupar ese rol de manera visible. Prefiere mantenerse como un empleado más, sin revelar que tiene el control. Esa decisión, que podría parecer excéntrica, es también profundamente estratégica. “Él nunca blanqueó que era el jefe. Siempre fue un empleado más, por una cuestión de dinámica, de cómo hacer que todo funcione mejor,” explica D’Elía. “No quiere saber nada con tener el rol de jefe. Se coloca en el rol de empleado y dice ‘para que mejore la dinámica del grupo, prefiero esto’.” Crédito: Gastón Taylor La conversación se traslada entonces a sus propias experiencias con el liderazgo, dentro y fuera del ámbito artístico. Diego Peretti recuerda su paso por la dirección de una película y cómo eso modificó por completo su relación con el equipo. “Ahí fui jefe. Y no es lo mismo que ser actor. Tenés que estar con todos, escuchar, ver si el catering está bien… sos como el capitán de un barco,” dice. “La tropa artística fue una experiencia extraordinaria, pero lo más difícil fue lidiar con los productores, que también son jefes, de alguna manera.” Para D’Elía, ser jefe no significa necesariamente ejercer poder, sino tener la claridad suficiente para liderar sin imponer. “Si estás seguro de lo que estás haciendo, tratás mejor a la gente. Cuando estás inseguro, ahí empiezan los problemas,” señala. Y Peretti lo complementa: “La seguridad te da poder de convicción, de seducir en vez de imponer.” Ambos coinciden en que un buen liderazgo se construye desde la empatía y la claridad de objetivos. “Una fe bien llevada, bien explicada, es seductora,” afirma Peretti. “Si vos tenés argumentaciones sólidas, la gente te sigue.” El Jefe del Jefe obra con Diego Peretti y Federico D Elía En ese sentido, también distinguen entre ser jefe, ser líder y ser gerente. D’Elía lo resume con una frase sencilla pero potente: “Vos podés ser jefe líder, pero el que gerencia es otro. Ahí es donde decís: ‘esto no lo decido yo, lo decide gerencia’.” El modelo que propone El Jefe —y que ambos defienden— se aleja del jefe autoritario y se acerca a la figura del líder que escucha, propone y se compromete. No se trata solo de dar órdenes, sino de construir sentido. El fantasma de "Los Simuladores" Es inevitable: cada vez que Diego Peretti y Federico D’Elía se juntan, la mención a Los Simuladores aparece como un eco constante. Y aunque ellos lo toman con humor, también sienten el peso de la expectativa. La charla sobre el proyecto pendiente de la película trae claridad sobre el estancamiento que tiene en vilo a miles de fanáticos. Según revelan, Paramount, la empresa que iba a producir el film, se retiró del proyecto, y eso los dejó atados a contratos que aún deben resolverse. “Estamos resolviendo lo contractual con Paramount. La empresa se retira, y entonces tenemos que desvincularnos,” explica Peretti. Recién después de ese proceso podrían renegociar con otra productora. Los Simuladores publicaron un video anunciando su pelicula y revolucionaron las redes El motivo, aseguran, es económico. “Yo tengo un contrato firmado hace tres años, donde se iba a arrancar lo más rápido posible,” cuenta D’Elía. “Pero después pasó todo esto que pasó. Paramount tuvo problemas económicos, en todo el mundo. Se vendió o entró alguien nuevo… no sé, pero están con una política totalmente distinta.” Hoy, la realidad es clara: “No se hace,” dice sin rodeos D’Elía. “Después veremos cómo nos encontramos, pero también vamos creciendo. Pasan los años. Estamos grandes.” Además del contexto financiero, hay un desafío logístico: encontrar un momento en que todos los integrantes del grupo puedan coincidir. “Siempre fue lo más difícil. Somos cinco. No es que uno o dos. Somos cinco,” recuerda D’Elía. Y agrega: “Esto parecía que era… y otra vez no fue.” El reconocimiento a Los Simuladores en la legislatura porteña (RS Fotos) La frustración está presente, pero no hay resignación. Solo una pausa obligada. Mientras tanto, ellos siguen eligiéndose para otros proyectos, como este regreso compartido al teatro. Porque aunque Los Simuladores estén congelados, la química sigue viva. En escena, y en la vida. Un vínculo inquebrantable Cuando se trata de describir su relación, Diego Peretti y Federico D’Elía no apelan a grandes palabras. Prefieren la ironía, el cariño en clave de broma, y una complicidad que se percibe en cada cruce. —¿Cómo definirían entre sí y qué les gustaría tener del otro? — D’Elía, fiel a su estilo, esquiva la solemnidad con humor: “La nariz. Me gustaría tener su nariz,” dice entre risas, y remata: “Porque empezó como un defecto… y ahora es un galán. Hijo de p…”. La risa general estalla, y Peretti, siempre más medido, pero igual de afectuoso, toma la posta. “Lo quiero mucho. Es una gran persona. Es un actor muy, muy bueno. Me siento muy seguro laburando con él.” Las primeras imágenes del elenco de "Los Simuladores" La confianza mutua atraviesa todo el relato. No necesitan decirse mucho para entenderse: “Hay camino transitado. Uno no tiene que explicar tanto,” afirma Peretti. Esa sincronía se refleja en escena y fuera de ella. Por eso esta obra tiene para ellos un valor emocional extra. “Más allá de cómo salga, es un gusto que no te das muchas veces,” asegura D’Elía. “Va a ser un año que vamos a recordar siempre.” Pero su conexión va más allá del escenario. El fútbol, por ejemplo, los une con la misma pasión que la actuación. “Nos gusta mucho el fútbol, más allá de jugarlo,” dice D’Elía. Y aunque Peretti se desmarca modestamente, su compañero no lo deja pasar: “Él siempre tuvo más nivel que yo. Podría haber sido un jugador de selección. Juega muy bien.” La charla termina como empezó: con risas, con barrio, con códigos compartidos. Uno es de River, el otro de Estudiantes de La Plata, pero la camiseta que realmente comparten es la de la amistad. Una que no entiende de tiempos, contratos ni promociones.

    Ver noticia original

    También te puede interesar

  • Examedia © 2024

    Desarrollado por