20/02/2025 17:42
20/02/2025 17:42
20/02/2025 17:41
20/02/2025 17:41
20/02/2025 17:41
20/02/2025 17:39
20/02/2025 17:39
20/02/2025 17:38
20/02/2025 17:37
20/02/2025 17:37
Buenos Aires » Infobae
Fecha: 18/02/2025 15:04
En el ámbito de los contratos de futuros, el precio de abril de 2025 subió un 13%, mientras que la curva de precios futuros en general avanzó en promedio 21 dólares de dólares por tonelada (Foto: Shutterstock) Las exportaciones de maíz desde Argentina crecen impulsadas por un contexto internacional favorable. La combinación de una demanda global sostenida, un mercado financiero con tendencia alcista y la demora en la cosecha brasileña ha llevado a un incremento en las cotizaciones del cereal. Según información del mercado agropecuario, las ventas anticipadas de la nueva campaña alcanzaron contratos cerrados por 2,3 millones de toneladas desde el inicio de 2025, de las cuales 1,9 millones tienen precio en firme. El repunte de los precios refleja esta tendencia, con un incremento del 7,5% en la cotización de exportación del maíz temprano desde principios de año. A esto se suma el impacto positivo de la reducción temporal del 20% en las retenciones, lo que fortaleció el poder de compra de la exportación y elevó las cotizaciones en el mercado local. En el ámbito de los contratos de futuros, el precio de abril de 2025 subió un 13%, mientras que la curva de precios futuros en general avanzó en promedio 21 dólares de dólares por tonelada. Retraso en la cosecha de Brasil y presión sobre los precios Las lluvias en Brasil han complicado la cosecha de soja y generado un retraso en la siembra de maíz de segunda, conocido como safrinha, que representa más del 75% de la producción del país. Aunque las condiciones climáticas mejoraron en la última semana, el ritmo de avance sigue por debajo del promedio histórico, lo que añade incertidumbre sobre la oferta futura. Hasta el 9 de febrero, la cosecha de soja cubría solo el 14,8% de la superficie cultivada, con un rezago de seis puntos porcentuales respecto a la media de las últimas tres campañas. En Mato Grosso, el principal estado productor de safrinha, el retraso es de más de 21 puntos, lo que genera preocupación sobre la disponibilidad de grano en los próximos meses. La siembra del maíz de segunda avanzó sobre el 18,8% del área prevista, muy por debajo del 28,8% promedio de los últimos tres años. En este escenario, los precios del maíz en Brasil superaron los 220 dólares de dólares por tonelada, el nivel más alto desde abril de 2023. China impulsa la demanda y fortalece los precios en Brasil El mercado chino atraviesa una restricción de oferta de soja, lo que ha disparado la demanda de harinas vegetales y aumentado los márgenes de la industria procesadora. A pesar de un récord de importaciones el año pasado, las reservas estatales han absorbido más de la mitad de los embarques recibidos en 2025, reduciendo la disponibilidad en el mercado interno y provocando un alza del 18% en los contratos de futuros de harina de soja en Dalian desde enero. En respuesta a esta situación, las empresas chinas intentaron adelantar embarques de soja desde Brasil, pero el retraso en la cosecha ha complicado la logística de exportación. Como resultado, las primas de exportación del maíz brasileño pasaron de estar en negativo a ubicarse un 2% por encima de las cotizaciones de Chicago. Este fortalecimiento de los precios podría no sostenerse en el tiempo, ya que la cosecha brasileña alcanzará su punto máximo en abril y coincidirá con una mayor oferta desde Argentina. La combinación de una demanda global sostenida, un mercado financiero con tendencia alcista y la demora en la cosecha brasileña ha llevado a un incremento en las cotizaciones del maíz (Foto: Shutterstock) La suba de precios también benefició a la soja argentina, cuyo valor a cosecha pasó de 260 dólares de dólares por tonelada en diciembre a 295,5 dólares de dólares el 13 de febrero, lo que representa un incremento del 13,6%. En este contexto, las primas locales facilitaron ventas externas de poroto con entrega entre mayo y junio por 263.000 toneladas, en su mayoría destinadas a China. Mientras la incertidumbre climática en Sudamérica mantiene la atención de los productores y exportadores, el fortalecimiento de los precios del maíz y la soja en Argentina genera nuevas oportunidades de negocio. Con la cosecha brasileña aún por definirse y la presión de la demanda asiática en juego, el comportamiento del mercado en las próximas semanas será determinante para consolidar la tendencia alcista o moderar las expectativas de los operadores.
Ver noticia original