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» Diariopinion
Fecha: 19/11/2024 13:53
La inflación se ha convertido a lo largo de estos once meses de gobierno de Javier Milei en uno de los datos objetivos más elocuentes a los que echa mano el gobierno para mostrar el "éxito" de su plan motosierra. Aunque para muchos, por si solo, no alcanza. Allá por el 19 de noviembre del 2023, el libertario ganaba el balotaje de las elecciones que lo llevarían a la presidencia de la Argentina a partir del 10 de diciembre, tras derrotar por más de 10 puntos a Sergio Massa. Su desembarco en el poder estuvo teñido de múltiples opiniones divergentes, con fuerte preocupación de quienes veían como la motosierra y el ajuste profundizaba la caída de los ingresos y creaba nuevos pobres. En esos momentos, la inflación dominaba la escena y la cabeza de los argentinos, todos pendientes de un dato que mes a mes se superaba y seguía licuando los magros ingresos. Tras el 13% de IPC registrado en noviembre, el dato de diciembre de 2023 se elevaba a un dramático 25,5% y marcaba un récord difícil de olvidar. Once meses después, el último dato registrado por el INDEC descendió a un 2,7% y mantiene una tendencia a la desaceleración para lo que queda del año, con la ilusión de alcanzar el 1% en algún momento del año próximo. Y un dato toma preponderancia. En la cabeza de la gente la inflación deja de ser "el" tema de interés. Por caso, una encuesta nacional reciente de D’Alessio IROL reflejó que el votante de Javier Milei en el balotaje del año pasado va virando respecto a sus preocupaciones. En los primeros puestos del ranking ya no figuran los temas económicos, al menos hasta el quinto lugar, cuando surge "la inflación", e inmediatamente después aparece el ítem "incertidumbre en la situación económica". Algo parecido mostró el último Índice de Incertidumbre Económica UCA correspondiente a septiembre de 2024 que registró una nueva caída que lo ubica en valores similares al 2021 por un descenso en la preocupación por la inestabilidad económica (inflación, dólar). Sin embargo, en contraste, las preocupaciones relacionadas con la pobreza mantuvieron el constante incremento demostrado a lo largo del año, justamente el dato que corre en desventaja en la era Milei con el aumento de la marginalidad y el hambre. Una de cal: "Lo que más ayudó fue la tremenda voluntad política de hacer las cosas" "Lo que más ayudó fue una tremenda voluntad política de hacer las cosas, y rápido", señaló el Economista jefe de la Fundación Libertad y Progreso, Eugenio Marí al señalar la terapia de shock como uno de los factores que más contribuyeron a la merma de la inflación. "Recordemos que, en diciembre del año pasado, Argentina realmente estaba coqueteando con una hiperinflación y ahí es donde llega el programa de transición que inició el gobierno de Javier Milei, donde aparecen tres medidas fundamentales que ayudaron a bajar la inflación: el equilibrio de las cuentas públicas, la baja de la tasa de interés y el crawling peg tras el sinceramiento del tipo de cambio", indicó. En su mirada, el equilibrio de las cuentas públicas rápidamente significó que el Tesoro dejara de pedirle plata al Banco Central de un día para el otro, "Ahí, el Banco Central lanzó dos medidas: la baja de tasa de interés -con lo cual el Banco Central pagaba menos intereses por la deuda que tenía en ese momento-, y la medida cambiaria, porque tras un sinceramiento inicial del tiempo de cambio oficial, aparece el famoso crawling peg". comentó. Para Marí, con esas tres patas "empieza a bajar la nominalidad y se pasa relativamente rápido del 25 a menos del 3% en 10 meses, lo cual para un plan de estabilización es bastante digno, y lo más interesante para mí, es que se nos abre otra discusión en el país que ya no es cómo hacemos para empezar a bajar la inflación, sino cómo hacemos para crecer y vivir mejor, que es algo que estaba totalmente ignorado", apuntó el economista. En este plano agregó: "Nosotros nos acostumbramos a esto de vivir con inflación, pero realmente si nos ponemos a pensar ha sido tremendo, porque dejamos de discutir política educativa, dejamos de discutir política en términos de infraestructura, dejamos de discutir política energética, dejamos de discutir todas las cosas que hacen que un país crezca, por una cuestión muy sencilla que es estar tratando de ver cómo llegábamos a fin de mes", completó el economista jefe de la Fundación Libertad y Progreso en diálogo en El Lunes puede esperar por FM MIlenium. Una de arena: "Un esfuerzo demasiado grande para un resultado limitado" En tanto, el economista Pablo Tigani resumió hace unos días el malestar que pesa entre aquellos que "no ven" milagro en el ajuste de shock del presidente Milei con una frase contundente: "Un esfuerzo extraordinario con resultados limitados: inflación 2,7% ", aseguró el también docente. Si bien para Tigani "existen señales de desaceleración en el ritmo inflacionario, las mejoras no han sido suficientes para asegurar un futuro económico estable", Incluso sostuvo que, "a menos que se implementen políticas efectivas y sostenibles, el año 2025 podría presentar riesgos de envergadura, con posibles turbulencias". "La cifra de IPC fue de 2.7% (37,67% anualizada), e indica una inflación mensual con una desaceleración desde el 3,5% de septiembre. Esta podría interpretarse como una tendencia positiva, pero debe abordarse con cautela: el IPC de CABA, por ejemplo, fue del 3,2% en octubre, mostrando también una desaceleración. No obstante, estas mejoras responden a factores estacionales y regulaciones puntuales, sin una base económica sólida que garantice su continuidad", alertó. En lo que respecta al costo de vida se refirió a los alimentos, uno de los sectores más sensibles, "Ha mostrado la mayor desaceleración desde julio de 2020, situándose en un 1,7% mes contra mes. Sin embargo, las verduras y frutas frescas han experimentado repuntes significativos, lo que indica que la reducción en el costo de vida es, en gran medida, inestable y vulnerable a factores externos y climáticos", señaló. En este contexto, para Tigani vuelve a surgir una pregunta recurrente ¿podrá Argentina mantener su recuperación fiscal en 2025, sin los ingresos extraordinarios del "Impuesto PAIS" y otras medidas temporales? "Si bien las proyecciones sugieren que la actividad económica podría despuntar, en sintonía con un leve aumento del PBI ("ceteris paribus"), la eliminación de estos impuestos temporales y la falta de un crecimiento sostenible ponen en riesgo el draconiano ajuste fiscal. Sin una reestructuración de deuda y una promoción más efectiva de la inversión, la recaudación de impuestos podría experimentar una caída significativa, incrementando el déficit y debilitando aún más la economía", alertó el economista. Finalmente, expreso: "Los esfuerzos ciudadanos han sido admirables, pero se necesita mucho más que buena voluntad para soportar el deterioro del poder adquisitivo actual. Sin cambios de fondo, el esfuerzo colectivo podría diluirse, la débil recaudación producto de la recesión y la volatilidad financiera potencial, ponen riesgo a la estabilidad social y económica del país". Crecimiento, cepo y la voluntad de sólo dar "buenas noticias" Sin embargo, algunos datos preocupan al argentino de a pie, porque el descenso del Índice de Costo de Vida tuvo como contracara una recesión de la economía. Hasta el Fondo Monetario Internacional estimó que este año el PIB caería el 3,5%. Y como si fuera poco, aumentó considerablemente la pobreza. El Indec registró a mitad de año que el 52,9% de los argentinos eran pobres, una suba de 11 puntos respecto de diciembre. Aunque en el último relevamiento del Observatorio de la Deuda Social de la UCA parecen ir remitiendo esos picos, aunque siguen en niveles muy elevados del orden 49% de la población. Pero, el gobierno no desacelera en su prédica por bajar la inflación. Y en los últimos días ató esa baja a la quita del cepo. "Si le restamos la inflación inducida (devaluación prefijada más la inflación internacional), la inflación monetaria viene viajando al 0,2% mensual, esto es, 2,4% anual", calculó Milei en sus redes sociales hace unos días. "De confirmarse dos meses más esta inflación se bajará la devaluación mensual al 1%". El Gobierno mantiene el cepo junto con un ajuste gradual del tipo de cambio -crawling peg- que, hasta ahora, es del 2% mensual. La salida del cepo cambiario es una de las promesas de Milei que aún no pudo cumplir. "De acá para adelante solo vienen buenas noticias", asegura el presidente en cuanto discurso realiza. El optimismo parece ser compartido por el Banco Mundial y el FMI, que han estimado que en 2025 Argentina crecerá un 5%, pasando de ser la economía latinoamericana con la mayor contracción económica a la de mayor crecimiento. La gran pregunta es si el 2025 se convierte también en el año de la recuperación de los ingresos.
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