19/11/2024 20:21
19/11/2024 20:20
19/11/2024 20:20
19/11/2024 20:20
19/11/2024 20:20
19/11/2024 20:20
19/11/2024 20:20
19/11/2024 20:20
19/11/2024 20:20
19/11/2024 20:20
» Diario Cordoba
Fecha: 19/11/2024 17:27
Iba yo a escribir del día de la escritura a mano, que se acaba de celebrar y que moviliza en todo el mundo a amantes de los instrumentos de escritura de cualquier índole, en especial de las plumas estilográficas, entre cuyos adeptos me cuento. Iba a decir que es necesario prestar atención a lo hermoso e inútil, sobre todo cuando la vida ruge, porque en definitiva, como decía Nuccio Ordine, lo inútil es lo más necesario que tenemos. Viva lo inútil, porque significa que nuestra vida sigue en su lugar y que podemos abstraernos en cosas de poca monta. Significa, por ejemplo, que el agua no se nos lo ha llevado todo, que en nuestra familia no falta nadie, que no tenemos la casa llena de barro o que no hemos de escuchar a políticos abstrusos echándole la culpa a personas mucho más diligentes y capacitadas que. Así que hay días en que no se puede hablar de ciertas cosas. Días en que hay que buscar el WhatsApp de la Cruz Roja y aportar algo, lo que sea. Hacerse el propósito de no olvidar. La memoria es demasiado fugaz. Lo más difícil del dolor siempre llega después, cuando todos piensan que está superado. El año pasado visité un instituto de Alaquàs, el IES Clara Campoamor. No son los más afectados, pero están al lado de Aldaia, donde la riada fue mucho peor. Les escribí para preguntarles si estaban bien. Me contestó Sara, profesora de Lengua y Literatura, para decirme que sus alumnos están a salvo y que la mayoría se habían lanzado a las labores de limpieza y desescombro «con la fuerza de la juventud». Llevo días pensando en esa frase y en esos chicos y chicas valientes y comprometidos. Ellos son un ejemplo de lo hermoso e innecesario, lo que hace que la vida valga la pena. De lo que quería escribir hoy, precisamente.
Ver noticia original