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Paraná » Confirmado.ar
Fecha: 24/12/2025 02:48
Un fallo de Camara obliga al Ejecutivo a explicar que hizo con los lingotes del Banco Central enviados al exterior en 2024. Opacidad, evasivas y silencio oficial alrededor de uno de los activos mas sensibles del Estado. - Por AF La Justicia volvio a correr el velo sobre una de las maniobras mas oscuras del gobierno de Javier Milei: el destino del oro de las reservas del Banco Central. Un fallo de la Camara Contencioso Administrativa Federal ordeno al Ejecutivo informar donde estan los lingotes que, en junio de 2024, fueron sacados del pais sin explicaciones claras y en medio de un hermetismo absoluto. Los jueces consideraron que no se trata de un dato menor ni de una cuestion tecnica reservada a expertos, sino de un asunto de indudable interes publico, directamente vinculado a la administracion de las reservas nacionales. Dicho de otro modo: el Gobierno no puede esconder bajo la alfombra que hizo con uno de los principales activos liquidos del pais. La causa se origino a partir de una presentacion de La Asociacion Bancaria, el gremio que detecto y denuncio la operatoria. Desde entonces, el Banco Central, con Santiago Bausili al frente y Luis Toto Caputo como arquitecto politico del esquema, se nego sistematicamente a dar respuestas. Incluso rechazo requerimientos formales de la Auditoria General de la Nacion, consolidando un patron de ocultamiento que ahora quedo en evidencia judicial. El traslado del oro tuvo ribetes de operativo clandestino. No hubo comunicacion oficial detallada, ni informes tecnicos publicos, ni precisiones sobre montos, destinos o condiciones. Sergio Palazzo presento pedidos de informes para conocer donde estan los lingotes y que tipo de garantias o compromisos pesan sobre ellos. La respuesta del Gobierno fue el silencio o, en el mejor de los casos, declaraciones vagas en television, donde Caputo hablo de una supuesta colocacion para generar intereses, sin decir quien tiene el oro ni bajo que contrato. La Sala V de la Camara fue categorica: el Banco Central no justifico de manera suficiente su negativa a informar y vulnero los principios basicos de transparencia. Los magistrados advirtieron que no alcanza con invocar de manera generica la administracion de reservas para negar datos, y remarcaron que el Estado debe probar de forma concreta que difundir la informacion causaria un dano real a un interes protegido. El argumento oficial es siempre el mismo: confidencialidad. El mismo escudo que el ministro de Economia utiliza para no explicar el contenido del swap, los bonos entregados al Tesoro o las intervenciones cambiarias de cierre de campana. Una logica de gobierno donde todo lo sensible es secreto y toda pregunta es tratada como una amenaza. Hasta ahora, el Banco Central apenas admitio que se hicieron transferencias entre cuentas de las reservas en oro, sin precisar cuanto, a donde ni para que. La respuesta encendio aun mas las alarmas, porque el oro no es simbolico ni decorativo: representa alrededor de 4.900 millones de dolares, una porcion clave de los activos externos del organismo. Aunque el discurso oficial insiste en que el volumen total de reservas no se altero, nadie puede confirmar hoy donde estan fisicamente los lingotes, si siguen bajo control estatal o si fueron utilizados en operaciones financieras opacas. Incluso hubo balances del BCRA donde el componente oro aparecio desdibujado, casi como si se hubiera evaporado entre cifras tecnicas. La Auditoria General tambien choco contra un muro. El Central se nego a entregar documentacion sobre la ubicacion, las condiciones de custodia y la posible conversion del oro en instrumentos financieros. La excusa fue la seguridad. La consecuencia, la desconfianza. Ahora la Justicia puso un limite. Y la pregunta, simple y brutal, quedo formulada en terminos institucionales: donde esta el oro? Es Milei, y su equipo economico, quienes deberan responder. Sin slogans, sin misticismo libertario y sin mas secretos. Porque las reservas no son del Gobierno: son de todos.
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