15/12/2025 03:04
15/12/2025 03:03
15/12/2025 03:03
15/12/2025 03:02
15/12/2025 03:01
15/12/2025 03:00
15/12/2025 02:57
15/12/2025 02:56
15/12/2025 02:54
15/12/2025 02:53
» Clarin
Fecha: 15/12/2025 00:54
Olvídense de lo que fue Glass Onion: Un misterio de Knives Out (2022) y quédense con el recuerdo de Entre navajas y secretos (2019), la primera película en la que apreció Benoit Blanc, el personaje creado por Rian Johnson, interpretado por Daniel Craig y que había traído un regocijante aire fresco a las películas de suspenso e intriga. Fanático de las novelas de Agatha Christie, Johnson -que venía de dirigir una de las películas de Star Wars, el Episodio VIII: Los últimos Jedi y capítulos de Breaking Bad- demostraba que poniendo en escena un cadáver y un montón de sospechosos ya era suficiente, si había ingenio, para armarse un festín, de un lado y del otro de la pantalla. Josh O'Connor es el cura acusado de asesinar a otro párroco. Bueno, tiene sangre en los dedos... Fotos Netflix Todo por 450 millones de dólares Fue tan exitosa esa primera Knives Out, como era su título en inglés, que Netflix le echó el ojo y le ofreció a Johnson 450 millones de dólares por los derechos de dos secuelas. Johnson, en plena pandemia de Covid, escribió, filmó y estrenó Glass Onion. Habrá sido el apuro y encontrarse de pronto con semejante cantidad de dinero que lo llevó a hacer una película en la que las vueltas de tuerca y del guion, en vez de generar atracción, nos alejaban de la historia y de los personajes. Daniel Craig junto a Mila Kunis: desentrañando un nuevo crimen. No funcionó. Punto. Así que ahora que regresa con el mismo detective privado bien podíamos sentarnos a ver Wake Up Dead Man (Despierta hombre muerto) con menos entusiasmo, menos esperanzas, menos expectativas. Y bueno, esta vez Johnson nos regala una película casi tan buena como la primera. Kerry Washington y la gran Glenn Close, que se merecería otra nominación al Oscar, como actriz de reparto. Un elenco de estrellas Volvió a contar con un elenco de primera, lleno de estrellas, nuevas y veteranas, asentadas, a ponerle como título, igual que a sus predecesoras, el nombre de una canción (ésta es del álbum Pop, de U2, de 1997) y ofrecernos un crimen del que nos costará descifrar quién es el o quiénes son los responsables. Wake Up Dead Man tiene un clima y una atmósfera gótica, una tonalidad más oscura y un sospechoso (el joven cura que interpreta Josh O’Connor, de The Crown) que todos queremos que sea inocente. Es que es un whodunit, como los estadounidenses denominan a estas tramas casi policiales en que hay que adivinar quién es el criminal. Todas estrellas para interpretar a todos sospechosos. Un cura asesinado Aunque rodada enteramente en Inglaterra, la película se ambienta en un pequeño pueblo del norte del estado de Nueva York, donde Monseñor Jefferson Wicks (Josh Brolin), canoso y con barba, predica furiosamente. Es un tipo de derecha, hasta podría haber allí una alegoría al presidente Donald Trump, si lo quieren ver. A Nuestra Señora de la Perpetua Gracia es enviado el reverendo Jud Duplenticy (Josh O’Connor) después de golpear a un diácono, como su asistente. Jud tiene antecedentes de violencia (es un exboxeador que mató a alguien en un ring) y Wicks cree que viene a suplantarlo a la larga en su parroquia. Nunca lo permitirá. Bueno, tampoco tendrá mucho tiempo, porque aparece asesinado en medio de una misa. Y hay como una media docena de feligreses que cualquiera de ellos bien podría ser el asesino. Motivos, parece, no es lo que faltan. Josh O'Connor es Jud, aquí algo sucio. Tiene sus motivos. La película se va convirtiendo de a poco en una buddy movie, con Benoit y el cura como pareja tratando de resolver el crimen. No vamos a contarles más, ni decirles qué roles juegan en la trama los intérpretes que acompañan a Craig, O’Connor y Brolin (mientras vive). Y que son Glenn Close, Mila Kunis, Andrew Scott, Jeremy Renner, Kerry Washington, Cailee Spaeny, Daryl McCormack y Thomas Haden Church, entre otros. Daniel Craig, elegante detective. Ojalá no sea ésta la última aparición de Benoit Blanc. Wake Up Dead Man es un filme de misterio con giros realmente inesperados. Pero que se disfruta de principio a fin. Puede parecer que es muy largo (142 minutos con sus créditos finales), pero a no temer que todo pasa volando. Y la pasamos tan bien que ojalá Netflix le ponga otra torta de dinero a Rian Johnson, porque sería una lástima que la serie de Knives Out se termine. “Wake Up Dead Man: Un misterio de Knives Out” Muy buena
Ver noticia original