09/10/2025 17:30
09/10/2025 17:30
09/10/2025 17:30
09/10/2025 17:30
09/10/2025 17:30
09/10/2025 17:30
09/10/2025 17:30
09/10/2025 17:30
09/10/2025 17:30
09/10/2025 17:30
» SL24
Fecha: 09/10/2025 13:35
Facebook Twitter LinkedIn WhatsApp Miguel Ángel Russo, quien había superado un cáncer de próstata en 2018, se encontraba bajo tratamiento domiciliario debido a un debilitamiento general que lo había alejado de sus funciones en el club xeneize. La recaída de los últimos días había encendido las alarmas en su entorno, y los médicos habían recomendado mantenerlo bajo observación permanente. Su estado comenzó a agravarse a principios de septiembre, cuando fue internado en el Instituto Fleming por una infección urinaria y un cuadro de deshidratación severa. Aunque recibió el alta y volvió brevemente a sus tareas, en los últimos partidos se lo notó visiblemente deteriorado y finalmente dejó el banco para ser reemplazado de forma interina por Claudio Úbeda. Russo fue uno de los entrenadores más respetados del país. A lo largo de su extensa trayectoria dirigió a clubes como Estudiantes de La Plata, San Lorenzo, Racing, Vélez, Lanús, y especialmente a Rosario Central, donde es considerado un ídolo por haber sido jugador y técnico, y por su vínculo permanente con la institución. Sin embargo, su mayor consagración llegó con Boca Juniors, al conquistar la Copa Libertadores de 2007 con un equipo histórico liderado por Juan Román Riquelme, quien años después lo convocó nuevamente para asumir el mando del plantel profesional. Con una carrera marcada por la seriedad, el trabajo y el respeto, Miguel Ángel Russo deja una huella imborrable en el fútbol argentino y en todos los clubes donde estuvo.
Ver noticia original