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» Noticiasdel6
Fecha: 08/10/2025 17:11
El procedimiento judicial bajo la orden del juez Juan Manuel Monte, del Juzgado de Instrucción Dos de Posadas, comenzó en la mañana de este miércoles en el local ubicado sobre la calle Colón casi Entre Ríos. Contó con la presencia de personal de Gendarmería, Policía Ambiental y agentes del Ministerio de Ecología. Es la primera vez que se hace un allanamiento en protección de la fauna silvestre de semejante envergadura donde participaron Juzgado, Gendarmería, Ecología, Policía de Misiones y la Fundación Dante Piesco en representación de la sociedad civil organizada. Fernando Piesco, de la Reserva Ohana y Fundación Dante Piesco, dijo que se presentó como Fundación de Rescate y Conservación de Fauna por una investigación de Gendarmería por «maltrato animal, tenencia ilegal de fauna silvestre, presunta comisión de comercio ilegal». Según sostuvo, se pudo verificar la tenencia de los animales de distintas procedencias. «En principio manifestaron tener permiso de tenencia del Ministerio de Ecología pero no hay forma de vincular ese permiso con los animales», observó. Entre otros animales hallados se encuentran iguanas del Brasil, tortugas en peligro de extensión, lagartos autóctonos, reptiles exóticos. En la veterinaria encontraron Monos Titi pincel, tortugas carbonarías, iguanas muertas congeladas en un freezer. Además un centro de reproducción ilegal de reptiles. «El Juez Monte va a decidir adónde se derivan estos animales. Nosotros estamos como asesoría», afirmó Piesco. Centro ilegal de reproducción de reptiles Comunicado de OHANA y la Fundación Dante Piesco Desde el Centro de Conservación de Fauna Silvestre OHANA queremos compartir nuestra experiencia del día de hoy en el allanamiento de la veterinaria de Posadas. Fuimos convocados por el por el Juez de Instrucción Dr. Juan Manuel Montes como apoyo técnico, para colaborar en la identificación y evaluación de los animales encontrados, tras una investigación llevada a cabo por Gendarmería Nacional Argentina. Lo que se halló dentro del lugar fue una escena que duele profundamente: tortugas, iguanas, lagartos, yacarés y hasta monos, encerrados en recintos diminutos, sin espacio, sin higiene, sin agua suficiente. Algunos habían muerto y estaban guardados en un freezer, otros sobrevivían con signos de abandono y miedo. “Nos llenó de dolor ver animales que deberían estar libres en la selva misionera tratados como si fueran objetos. Cada tortuga, cada lagarto, cada mono, es un ser vivo que siente, sufre y necesita lo mismo que cualquier otro ser: respeto y libertad”, expresaron desde OHANA. Estos animales no son mascotas. Son fauna silvestre, pertenecen a los ecosistemas que nos rodean y están protegidos por leyes nacionales e internacionales. Criarlos, venderlos o tenerlos como animales de compañía no solo está prohibido: es maltrato animal. Significa quitarles su naturaleza, su libertad y su posibilidad de vivir como lo que son. Las pruebas halladas (114 animales silvestres y 14 congelados) confirman un delito que destruye la biodiversidad y causa un enorme sufrimiento. “Cada animal silvestre que se captura para ser vendido es una historia de dolor. Detrás de cada tortuga que alguien compra ‘porque le parece tierna’, hay decenas que murieron aplastadas o deshidratadas en cajas. Nueve de cada diez no llegan vivas a destino. No es rescate, es crueldad”, señalaron desde OHANA. Desde la organización remarcaron que no se trata de atacar a una persona, sino de defender un principio básico de humanidad: los animales sienten, y la selva no es un criadero ni un negocio. El tráfico y la domesticación de fauna silvestre son prácticas que parecen “inofensivas” pero destruyen el equilibrio de la naturaleza y reflejan una grave falta de empatía. “Lo que ocurrió no puede quedar en silencio. Como sociedad, tenemos que elegir si queremos una Misiones que respete la vida o una donde la selva se convierte en mercancía. La justicia necesita el acompañamiento de todos. No hay conservación posible sin conciencia social”, concluyeron desde OHANA. Desde OHANA y la Fundación Dante Piesco llamamos a toda la comunidad a informarse, a no comprar, tener ni promover animales silvestres como mascotas, y a apoyar la acción de la Justicia para que este tipo de maltrato no vuelva a repetirse en nuestra provincia. Los animales no pueden hablar. Hoy, necesitan que hablemos por ellos.
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