04/10/2025 11:32
04/10/2025 11:32
04/10/2025 11:31
04/10/2025 11:31
04/10/2025 11:31
04/10/2025 11:31
04/10/2025 11:31
04/10/2025 11:31
04/10/2025 11:31
04/10/2025 11:31
» Elterritorio
Fecha: 04/10/2025 09:25
Es un análisis en el que coincidieron algunos referentes de la producción. Muchos agricultores no pudieron fertilizar este año y se notó una menor productividad de las plantaciones. sábado 04 de octubre de 2025 | 6:00hs. Productores prevén menos hoja verde en 2026. Foto: Víctor Piris/Archivo La cosecha gruesa de la yerba mate terminó oficialmente el pasado 30 de septiembre y según algunos referentes de la producción se levantó casi toda la hoja verde. Esto a pesar de los bajos precios y extendidos plazos de pago que se vieron en los últimos meses para el lamento de los plantadores. Se coincidió en que la producción de hoja para 2026 sería menor, por la falta de cuidado en las plantaciones debido a los bajos valores. Los productores insisten en que el Inym pueda fijar al menos un precio de referencia para la hoja verde que hoy debería estar por encima de los $400. “Se hizo la totalidad de la cosecha, se llevaron todas las hojas. Llevaron hasta la última hoja regalada. Digo regalada en el sentido del precio bajo que nos pagaron. También hubo secaderos que llevaron la hoja, dieron cheques a seis meses y ahora esos papeles están rebotando”, comentó Ariel Steffen, productor de la zona de San Pedro. Y agregó que hay pena entre los productores porque no podrán recuperar dinero para reinvertir en sus chacras. “Los secaderos están con depósitos llenos, pero esa yerba recién el año próximo se va a pagar. Al menos hay poca inflación, pero igual se va a ir licuando todo el valor de la cosecha”. En la zona de Andresito, también al Norte de la provincia, Darío Bruera, presidente de la Federación de Asociaciones Rurales y Forestales de Misiones, coincidió en que hubo una cosecha casi total. “En Andresito se habrá cosechado casi todo, se levantó prácticamente toda la cosecha. En agosto y septiembre se trabajó bien, fueron pocos los días de lluvia y los precios como sabemos fueron en baja”, analizó. Apuntó que este año a comparación del 2024 se observó un menor volumen de hoja en las plantas. “Los rendimientos bajaron, en general se puede estimar que un 20 por ciento menos de hoja. Hubo yerbales con una caída mayor, pero en general la merma habrá sido del 20 por ciento”, estimó. En la zona de San Vicente, el productor Ángel “Cacho” Ozeñuk coincidió en que se entregó casi toda la hoja verde de yerba disponible. Y detalló que los precios a los productores fueron notablemente en baja. “En San Vicente la verdad que habremos sacado un 90% de la yerba que había para cosechar. Terminamos con un precio en caída de entre 170 y 200 pesos puesto en acopio y en secadero. Menos la corresponsabilidad gremial, menos flete, prácticamente le quedó al productor entre 90 y 100 pesos dependiendo de la cantidad y del trato que se tiene con los secaderos o industriales”, comentó en diálogo con El Territorio. Observó en tanto que los precios en baja no se corresponden con las ventas del producto final. “Este año tuvimos un crecimiento en el consumo interno, crecieron las exportaciones, tuvimos un bajo rendimiento en lo que fue la cosecha con respecto al año pasado. Yerbales buenos que rendían 10.000 kilos por hectárea, este año habrán rendido 7.000 kilos”, comentó. Más allá de los valores y rendimientos, el productor enfatizó que es necesario que el Instituto Nacional de la Yerba Mate (Inym) vuelva a fijar “al menos” valores de referencia para la producción. “Esperamos que se trate el DNU famoso que hubo sobre el Inym que hizo que no se pueda fijar costo sobre la producción. Esperamos que al menos el instituto pueda fijar los costos de producción, que hoy deberían estar en torno a los 411 pesos más un margen de ganancia para el productor”, recordó. Advirtió finalmente que si no hay una mínima regulación, “el precio de la yerba mate va a seguir en caída y eso en un contexto en que sube el consumo y las exportaciones crecen termina favoreciendo exclusivamente a las grandes industrias molineras”. Por otra parte y referido al Inym esta semana se supo que el actual directorio vuelve a contar con la presencia de un representante por el gobierno de Corrientes. Así lo confirmó el propio ministro de Producción de la vecina provincia, Claudio Anselmo, que vuelve a ocupar ese lugar. En decadencia Sergio Delapierre, productor y dirigente del sector agropecuario consideró que en su región hubo un alto porcentaje de cosecha pero también se observaron plantaciones descuidadas por la falta de fertilización. “En la zona de la ruta 12, Montecarlo hacia el norte, la mayoría de los yerbales fueron cosechados. Hoy no hay grandes excedentes de hoja verde en la planta. Y lo que se notó es que algunos yerbales que fueron muy atacados por algún tipo de plaga, caída de hoja, el mal de la tela por ejemplo, hizo que los productores abandonaran esas parcelas porque no rendían para la tarefa”, relató. En tanto agregó: “Hay decaimiento en el mantenimiento de los yerbales, que va a generar para la zafra que viene una menor producción. Hay muchos productores que invertían en fertilización, pero este año no lo han hecho, eso presagia la decadencia de muchos yerbales”. Coincidió en que ya este año “se observó una caída en la producción con respecto al año pasado, así que estimo que el año próximo podemos llegar a estar en los mismos niveles”. En Paraguay también precios en baja y cupos Para Lisandro Benitez, productor yerbatero en la zona de Itapúa (Paraguay), la cosecha yerbatera terminó con un sabor amargo para los pequeños agricultores. Explicó que además del precio que fue en baja (una situación muy similar a lo visto en Argentina) también deben estar atentos para ver si consiguen “cupos” de compra para su materia prima en los secaderos e industrias. “Aquí en mi zona terminó la cosecha, pero creo que igualmente no se llegó a cosechar todo por el tema de los cupos que establecieron los secaderos”, comentó. Y detalló que en cuánto a precios “lo último que vendí fue a 400 guaraníes (unos 90 pesos) para retirar en finca. Pero más allá del precio lo que es una lástima es que todavía hay mucha gente que sigue sin cobrar la hoja que entregó”. Adelantó que en estos días tenían una reunión entre productores por la situación de los cupos. “Teníamos que tener una reunión porque en breve va a comenzar de nuevo el tema de los cupos y queremos tener un panorama más certero”, dijo. El Inym aconseja a los productores planificar los cuidados en yerbales Para el ingeniero agrónomo Matías Bazila, jefe del Servicio de Extensión del Instituto Nacional de la Yerba Mate (Inym), en octubre y noviembre, cuando está prohibida la cosecha de yerba mate, los productores pueden planificar los trabajos a hacer sobre sus plantaciones. “Lo más importante para el productor es planificar, por ejemplo si hoy se quiere fertilizar, ya se está llegando tarde, porque el fertilizante ya debería estar en la solución del suelo cuando la planta comienza a brotar, para que sea eficiente el uso de ese recurso, que tiene su valor”. Apuntó que “otro de los puntos que venimos trabajando desde el servicio de extensión es que el suelo tiene que estar siempre cubierto. Puede ser por especies que vienen en forma espontánea o por especies implantadas, esto es crucial para la vida del suelo y para mantener el efecto que tienen estas cubiertas verdes. Las coberturas evitan las altas temperaturas, la insolación, la pérdida de agua. Hay que tener en cuenta que para el próximo verano vamos a tener un faltante de agua, así que es crucial mantener esas cubiertas verdes que atenúan las altas temperaturas del suelo”. Otra cuestión a atender en estos meses antes de la zafriña de verano es la limpieza de las plantaciones. “Hay que tener en cuenta que la planta saca los nutrientes de la producción que tenga en la copa. Y las especies que más le compiten son las gramíneas de hábito perenne, así que hay que trabajar sobre éstas para que no afecten el crecimiento del cultivo. Hay que empezar haciendo limpieza sobre las plantaciones nuevas, que tienen más competencia de agua y luz por diferentes especies. En las plantaciones nuevas se recomienda plantar detrás de cada planta la especie poroto sable, que en los últimos años se vio que se comporta muy bien y atenúa mucho los efectos de la insolación y falta de agua”. También recomendó proyectar la descompactación de suelos, que se realiza con el suelo seco. “La mayor compactación se ve en enero y febrero, así que hay que proyectar esos trabajos de descompactación. Y es crucial observar el momento en que la planta dejó de brotar para ocasionar con los laboreos el menor daño en la brotación del cultivo”. Anticiparse a las plagas Bazila mencionó también la oportunidad de aprovechar los meses de no cosecha para hacer un buen relevamiento sobre posibles plagas que pueden afectar a la yerba mate. “Es crucial llegar en tiempo y forma con el control, antes de que las plagas produzcan un daño económico para el productor. Hay que estar atento a lo que es el psílido (rulo) y el marandová (mariposa) que son dos de las plagas que afectaron el último año pero su llegada se da justamente en esta época”. Finalmente consideró que es siempre muy importante dedicarle tiempo al análisis de suelo de las plantaciones para saber con qué necesidades específicas de minerales o nutrientes se encuentran las chacras. “El análisis del suelo es muy importante hacerlo porque antes de hacer la plantación ya podemos tener la corrección con enmienda de los elementos que el suelo está necesitando. En base a eso podemos tener una buena producción del cultivo y una buena producción en el futuro”.
Ver noticia original