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Concepcion del Uruguay » 03442noticias
Fecha: 01/10/2025 16:30
Tal como lo adelantáramos este martes en horas de la tarde en 03442, pasado el mediodía se realizó la audiencia para tratar la situación procesal de Diego Antonio Luna (42), conductor del Chevrolet Meriva que el viernes por la tarde atropellara y matara a Jeremías Aguiar de solo 3 años de edad. La misma se desarrolló en la Sala de la Cámara Penal, ya que, por la presencia de familiares y amigos de los padres del pequeño, se necesitaba mayor espacio, lo que también llevó a mayor presencia policial. La audiencia fue presidida por la doctora Alejandrina Herrero, jueza de Garantías Nº 1, encontrándose presente las fiscales María José Labalta y Lara Prescia, la defensora oficial, doctora Valeria Irel y el acusado, quien en varios momentos meneaba la cabeza negando las afirmaciones de la parte acusadora. La Fiscalía y su relato La doctora Labalta explicó que la causa en principio estuvo en manos de la doctora Prescia, pero al producirse la muerte del niño, se pasó a su Fiscalía. La fiscal narró como sucedieron los hechos, señalando que Luna se conducía sin los cuidados del caso de sur a norte en el auto por calle Erausquin, entre Pablo Lorenz y Lorenzo Sartorio, cuando embistió al niño Jeremías Aguiar que jugaba junto a su abuela persiguiendo a unos pollitos. El fuerte impacto lo tiró por el aire y le causó gravísimas lesiones y lesiones leves a su abuela que iba junto al pequeño que cruzaba la calle, lesiones que al niño le causaron la muerte en momento que iban en una ambulancia rubo al San Roque de Paraná. Las fiscales señalaron que Luna intentó escapar del lugar y fue retenido por la gente del barrio y luego trasladado por la Policía, confirmando que el conductor presentaba un fuerte olor etílico en su aliento y que apenas podía sostenerse en pie, quedando todo el hecho grabado en cámaras de seguridad de un vecino. Tras su traslado, Luna se negó a la extracción de sangre y se puso violento, llegando incluso a intentar retirarse del hospital, lo que demandó la llegada de refuerzos policiales y la orden de extracción compulsiva autorizada por el juez de Garantías. Estos hechos son muy importantes para la Fiscalía a la hora de tener que peticionar la prisión preventiva, ya que existen riesgos evidentes de fuga y de entorpecimiento por parte del acusado y se debe esperar los estudios para saber el grado del alcohol en sangre y la velocidad de circulación. Por todo esto, la fiscal solicitó la prisión preventiva por 90 días, ya que también se necesitan las declaraciones de numerosos testigos, los padres y la abuela de Jeremías. La Defensa se opuso y comparó con otros casos Como era de esperar, la Defensa se opuso al pedido fiscal y comparó este caso con otros ocurrido en ciudad, con imputados como Charreun, Barrera y Orrico, quienes no fueron detenidos pese a ser responsables de muertes. También dijo que el pequeño no era la primera vez que cruzaba la calle, ya que en los videos se lo veía ir y venir al menos tres veces, como queriendo justificar que Luna se vio sorprendido y no pudo detenerse. La defensora trató de hacer valer su postura y pidió la libertad de Luna con reglas de conducta y ofreció su alojamiento en la casa de la pareja de su madre en la zona del Ciervo y bajo cuidado de esta, destacando que su cliente no cuenta con antecedentes. La Fiscalía escuchó el alegato de la doctora Irel y se negó rotundamente a la posibilidad de libertad del acusado. No son casos iguales La doctora Herrero finalmente hizo el análisis de las dos exposiciones y fue contundente al señalar que no se pueden comparar los casos mencionados por la Defensa con el que se trataba en esta oportunidad, ya que son muy diferentes. La jueza dejó claro que, más allá de la gravedad de los hechos y las tragedias a las que se hizo referencia, las conductas posteriores al los hechos de los acusados, no son las mismas, ya que en al caso de Luna, este se negó a obedecer a las autoridades en todo momento, intentó irse del hospital e intentó fugarse del lugar del siniestro, lo que claramente so sucedió con Charreun, Barrera y Orrico. La jueza consideró que hay elementos suficientes para tener por probable la posibilidad de fuga y de entorpecimiento, por lo que ordenó la prisión preventiva, pero por el plazo de 45 días, por lo que Diego Antonio Luna, estará en la Alcaidía los primeros 30 días y luego deberá ser trasladado a una Unidad Penal. Finalizada la audiencia los familiares y amigos de la familia de Jeremías, se confundieron en un abrazo, entre lágrimas y llantos, para luego desalojar la sala en completo orden.
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