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Concordia » Hora Digital
Fecha: 29/09/2025 18:42
El presidente colombiano, Gustavo Petro, minimizó la revocación de su visa estadounidense, destacando su doble nacionalidad y visión de libertad sin fronteras. La decisión del Departamento de Estado de Estados Unidos de revocar la visa del presidente colombiano Gustavo Petro desató un nuevo episodio de tensión diplomática entre Washington y Bogotá. El hecho se produjo después de la participación del mandatario en una protesta en Nueva York, donde instó a soldados estadounidenses a desobedecer órdenes del presidente Donald Trump, relacionadas con la guerra en Gaza. En un mensaje publicado en su cuenta de Twitter, Petro confirmó la medida y aseguró que no le preocupa: "Llegó a Bogotá. Ya no tengo visa para viajar a EEUU. No me importa. No necesito Visa, sino ESTA, porque no solo soy ciudadano colombiano sino ciudadano europeo, y en realidad me considero una persona libre en el mundo". También añadió: "La humanidad debe ser libre en todo el mundo. Tenemos el derecho humano de vivir en el planeta. Soy libre y todo ser humano debe ser libre en la tierra". El mandatario colombiano participó en una manifestación en Times Square, que reunió a unas 2.000 personas y que fue convocada en rechazo a la visita del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, a la Asamblea General de la ONU. Vestido con una guayabera blanca y acompañado por la delegación colombiana, Petro ondeó banderas nacionales y se unió a las consignas en apoyo a la población palestina en Gaza. En medio de la marcha, el presidente Petro se dirigió a un grupo de soldados estadounidenses y los exhortó a desobedecer las órdenes del entonces presidente Donald Trump relacionadas con una eventual intervención militar en Gaza. Estas palabras fueron consideradas por las autoridades estadounidenses como un llamado a la insubordinación y catalogadas de "imprudentes e incendiarias". El retiro de una visa a un jefe de Estado latinoamericano tras un episodio de protesta pública y declaraciones políticas marca un hecho inusual en la diplomacia hemisférica. La medida refleja la sensibilidad del gobierno estadounidense frente a mensajes que puedan interpretarse como un estímulo a la desobediencia militar. El anuncio del Departamento de Estado, realizado en la noche del 26 de septiembre a través de su cuenta oficial de Twitter, generó una oleada de reacciones en ambos países. El Departamento de Estado confirmó que la notificación se emitió cuando Gustavo Petro ya viajaba de regreso a Bogotá. El exalcalde de Medellín, Daniel Quintero, reaccionó con un mensaje breve en su cuenta de Twitter: "Mejor la vida que una visa". El congresista Alejandro Toro defendió la postura de Petro, señalando: "La legitimidad del presidente Petro se la dio el pueblo colombiano en las urnas, no el gobierno estadounidense y si el costo por estar en el lado correcto de la historia es perder la Visa e ingresar al país que está financiando un genocidio es un costo muy bajo". Desde Estados Unidos, la congresista María Elvira Salazar calificó la decisión como "más que merecida". En contraste, la precandidata Claudia López criticó al presidente colombiano por "victimizarse, para llenarse el ego y posar de mártir no solo local sino global". La senadora María Fernanda Cabal aseguró que "Petro no solo destruye a Colombia, ahora se dedica a incendiar la relación con EE. UU.". El ministro del Interior, Armando Benedetti, respondió señalando: "al único que tenían que quitarle la visa era a Netanyahu".
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