28/09/2025 13:19
28/09/2025 13:19
28/09/2025 13:19
28/09/2025 13:19
28/09/2025 13:18
28/09/2025 13:18
28/09/2025 13:18
28/09/2025 13:17
28/09/2025 13:17
28/09/2025 13:16
» Elterritorio
Fecha: 28/09/2025 11:39
Nuevo revés para los expolicías condenados. El STJ, máximo órgano judicial de Misiones, denegó la intervención de la Corte Suprema de Justicia en la revisión del fallo. domingo 28 de septiembre de 2025 | 10:00hs. Los expolicías fueron enjuiciados en diciembre del 2021. Foto: Marcelo Rodríguez En una reciente resolución, el Superior Tribunal de Justicia (STJ) de Misiones rechazó otorgar los recursos extraordinarios federales solicitados por las defensas de los expolicías condenados por el homicidio de Hugo Miguel Wasyluk (38), quien el 27 de abril de 2011 fue hallado muerto en una celda de la Seccional Primera de Oberá. Se trata de un nuevo revés para los implicados en un crimen icónico de la violencia institucional en Misiones, ya que se denegó la intervención de la Corte Suprema de Justicia de la Nación en la revisión del fallo. Según la resolución 384 del STJ fechada el pasado 13 de agosto, los planteos defensivos “no alcanzan a ser cuestiones federales, por la sola mención que con la sentencia se han conculcado principios constitucionales, además de que la defensa vuelve a reiterar agravios que ya fueron tratados y resueltos por este Superior Tribunal de Justicia oportunamente”. Asimismo, se cita que “el recurso extraordinario por arbitrariedad, reviste el carácter de excepcional y no tiene por objeto abrir una tercera instancia ordinaria donde puedan discutirse decisión que se estimen equivocadas (…) Se considera arbitraria una sentencia cuando la misma carece de todo fundamento o reposa únicamente en la voluntad o capricho de los jueces, o adolece de manifiesta irracionalidad o desacierto total, lo que no acontece en autos”. En consecuencia, el alto cuerpo judicial “resuelve denegar la concesión de los recursos extraordinarios federales” a favor de los condenados. Tres con prisión perpetua Según el expediente, el suplicio padecido por Wasyluk se extendió durante 27 horas, lapso que transcurrió desde su detención por efectivos de la comisaría de Villa Bonita y el hallazgo de su cadáver en una celda de la Seccional Primera de Oberá, a las 0.20 del 27 de abril de 2011. Tuvieron que pasar diez años y ocho meses hasta la realización del juicio oral contra trece imputados, doce policías y un médico policial, quienes llegaron a debate por diferentes grados de responsabilidad penal. Así, el 14 de diciembre de 2021, el Tribunal Penal Uno de Oberá dio su veredicto e impuso la máxima pena a tres implicados: el exsargento Pedro De Mattos, el excabo Carlos Antonio Gómez y el exagente Ricardo Javier Rodríguez fueron condenados a prisión perpetua por el delito de tortura seguida de muerte. Posteriormente, las respectivas defensas apelaron la sentencia ante el STJ, órgano que en noviembre del año pasado dejó firme la sentencia contra los tres citados. “(…) el Tribunal de juicio concluyó acertadamente que ha quedado sobradamente probada la coautoría de los imputados, con el grado de certeza necesario exigido a todo veredicto de condena y aplicando el derecho vigente al caso concreto; razones por las cuales considero que corresponde el rechazo del recurso interpuesto por las defensas de Gómez, De Mattos y Rodríguez y de la Provincia de Misiones”, expresó el ministro Froilán Zarza en los considerandos de la resolución 758 del STJ. Sentencia fundamentada En un escrito de 92 carillas, el máximo órgano judicial de Misiones avaló lo actuado por el Tribunal Penal de Oberá respecto de la responsabilidad de Gómez, De Mattos y Rodríguez. “No resulta innecesario recordar que el caso presenta una complejidad especial en razón del objeto que se estudia: se trata de una víctima que -según la condena- habría sido torturada por funcionarios policiales del Estado provincial y que habría fallecido a consecuencia de ello, de allí que están en juego derechos humanos básicos como ser la prohibición de la tortura y su vinculación con el derecho a la vida”, se cita. En su introducción, Zarza mencionó que “la sentencia recurrida en este punto cuenta con fundamentos suficientes que obstan (impiden) a su descalificación como acto judicial válido (…)”. En consecuencia, subrayó que “los nombrados, y en forma solidaria el Estado de la Provincia de Misiones, son responsables de abonar las indemnizaciones por el daño material y moral, tal como fueron regulados por el Tribunal de juicio”. Heijo y González Si bien los ministros coincidieron en los cargos imputados a Gómez, De Mattos y Rodríguez, hubo discrepancias en cuanto a la situación de los exoficiales Jorge Antonio Heijo y Wilson Ricardo González. Éstos completaron la comisión que detuvo a la víctima y en el juicio fueron condenados a 8 y 5 años de prisión, respectivamente, por no evitar la tortura y encubrimiento. En opinión de Zarza, que luego contó con el voto de Juan Manuel Díaz, la situación de Heijo y González ameritó la anulación de la sentencia y la realización de un nuevo debate para arribar a un veredicto. Contrario a ello, la ministra Ramona Beatriz Velázquez argumentó en sostener la validez del debate y acortar la pena un año, tanto para Heijo como para Gómez, lo que se aprobó por mayoría con los votos de Rosanna Venchiarutti Sartori, María Laura Niveyro, Roberto Rubén Uset, Cristina Irene Leiva y Cristian Marcelo Benítez. En consecuencia, además de dejar firme la sentencia contra los tres condenados a prisión perpetua, la resolución dejó en 7 años la condena a Heijo y en 4 González. Los dos últimos ya fueron beneficiados con la excarcelación extraordinaria bajo caución juratoria y recuperaron la libertad. Procedimiento ilegal En los fundamentos de la sentencia del Tribunal Penal de Oberá se precisa que la detención de Wasyluk se produjo por una exposición de su hermana Ana, quien concurrió a la comisaría de Villa Bonita para alertar que su hermano había bebido y estaba exaltado. Una comisión policial partió en dirección al domicilio y lo encontraron caminando sobre la ruta provincial 103, a pocos metros de su casa, donde lo “interceptaron sorpresivamente, ya que el móvil policial iba con las balizas apagadas, justamente para que no se diera cuenta”. En el juicio el propio De Mattos afirmó que “en la zona las detenciones no son formales, las personas saben que la Policía llega y procede”. Al aproximarse a Wasyluk el chofer De Mattos abrió la puerta en forma violenta y lo golpeó, tras lo cual él y Gómez bajaron con bastones. Si bien en el debate oral los policías diluyeron sus responsabilidades, en la instrucción habían reconocido la violencia del operativo. “O sea que, del relato de los tres -en sede instructora- y los mensajes de textos enviados entre ellos cuando estuvieron detenidos, surge claro que De Mattos y Gómez redujeron a Wasyluk golpeándolo con una tonfa y un palo de goma, colaborando Rodríguez, inmovilizando desde las piernas”, se cita en la sentencia. La autopsia constituye la prueba científica de los tormentos que padeció la víctima, al extremo que sufrió desgarros internos que causaron gran sangrado en distintos tiempos. Padeció una muerte horrenda ya que aspiró su propia materia fecal. “Hugo Wasyluk estuvo todo el tiempo esposado, lo tuvieron boca abajo con un gran peso encima, el tatuaje que le quedó en el pecho es compatible claramente con el enrejado de la carrocería de la camioneta de la comisaría de Villa Bonita”, se precisa en la sentencia. Beneficio de la duda para siete policías Además de los cinco expolicías de Villa Bonita, también fueron juzgados siete policías que al momento del hecho prestaban servicio en la Seccional Primera, quienes resultaron absueltos por el beneficio de la duda. Dicho fallo alcanzó a Miguel Ángel Espíndola, Carlos Ariel Lentini, Hugo Ariel Basaraba, Roxana Andrea Harasimezuk, Alejandro Fabián Núñez, Luis Alberto Silva y Gustavo Javier Fontana. En relación al médico policial José Orlando Morales, consideraron que la acción penal se hallaba extinguida porque hacía más de dos años que había pasado a retiro. En cifras 3 Son los expolicías que recibieron prisión perpetua por el brutal asesinato de Hugo Miguel Wasyluk (38), perpetrado el 27 de abril de 2011.
Ver noticia original