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» Elterritorio
Fecha: 28/09/2025 11:32
La mamá y la hermana de la niña abusada en San Vicente expresaron sentimientos encontrados tras el fallo judicial. "Me parece muy poco, pero igual doy gracias porque, al menos, mi hermana tuvo justicia. Hay mucha gente que no tiene ni siquiera eso". La pequeña falleció el año pasado. sábado 27 de septiembre de 2025 | 20:00hs. Vera fue condenado y luego alojado en la UPII de Oberá. //Fotos: Cristian Valdez. Tras la condena a 15 años de prisión contra Nicolás Ramón Vera, el hombre hallado culpable de abusar sexualmente de su hijastra en San Vicente, la mamá y la hermana de la niña -que hoy tendría 13 años- expusieron sentimientos encontrados. Por un lado, alivio por haber obtenido justicia, pero a su vez un dolor imposible de reparar por la ausencia física de la pequeña, que falleció hace cuatro meses tras estar internada en Posadas producto de una enfermedad renal. "La que debería estar tranquila con este fallo es mi hija, porque ella fue la que sufrió el daño”, dijo la madre, aunque advirtió que "15 años no son nada para una persona que hizo tanto daño, porque sabía lo que estaba haciendo. Pero bueno, ¿qué vamos a hacer? Otra cosa no podemos pedir". La mujer, que declaró en el transcurso del debate oral en el Tribunal Penal de Oberá, recordó la lucha de su hija contra la enfermedad que terminó por complicar su estado de salud. "Ella tenía problemas renales. Estando en San Vicente comenzó a enfermarse, luego tuvo dengue, hemorragias nasales, de acá la mandaron al hospital de Oberá y allí descubrieron que tenía problemas en los riñones". El diagnóstico, contó la madre, fue devastador. "El deceso fue por vasculitis, una enfermedad que, como explicó la doctora, no tiene cura, pero se puede controlar", y en ese contexto lamentó que "para la corta edad que ella tenía y con todos los problemas que estaba enfrentando, la enfermedad fue muy agresiva". Los esfuerzos de los médicos no fueron suficientes. La progenitora, quien con su denuncia puso al sujeto tras las rejas, admitió creer que el padecimiento de su hija en manos de su abusador pudo haber influido en su irreversible cuadro de salud. "Creo que eso también influyó. Ella era una persona buena, una chica muy estudiosa, y después de todo lo que pasó empezó a perder la memoria, se olvidó de leer y de escribir, y tuvo que empezar todo de nuevo. Yo pienso que eso también fue parte de lo que le pasó. Pero uno, como mamá, no sabe tanto como un experto", sostuvo con la voz entrecortada. La mujer, que ahora tiene la tutela absoluta de sus hijos, dijo que son ellos quienes le dan fuerzas para seguir adelante. En tanto, para la hermana de la víctima la condena fue un alivio parcial, un paso de justicia, aunque insuficiente. "Me parece muy poco, pero igual doy gracias porque, al menos, mi hermana tuvo justicia. Hay mucha gente que no tiene ni siquiera eso". Conmovida, añadió: "Me hubiese gustado que ella estuviera acá, para que pudiera ver que sí existe la justicia". Tanto la madre como la hermana de la niña coinciden en que la pena de 15 años no refleja la magnitud del daño sufrido, pero valoran que se haya alcanzado una condena. "Es poco, pero es algo. No todas las familias que pasan por esto tienen la posibilidad de decir que hubo justicia", señalaron. El juicio y la condena El Tribunal Penal Uno de Oberá condenó el miércoles a 15 años de prisión a Nicolás Ramón Vera, hallado culpable de abuso sexual con acceso carnal agravado por la convivencia y amenazas coactivas contra su hijastra, cuando tenía 8 años. La sentencia coincidió con lo solicitado por la fiscalía y fue leída tras una extensa jornada de debate. El fallo rechazó los planteos de la defensa y acreditó los abusos, así como las amenazas. Tras la lectura, Vera fue esposado y trasladado de inmediato a la Unidad Penal II para comenzar a cumplir la condena.
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