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Buenos Aires » Infobae
Fecha: 08/09/2025 20:38
Un vendedor lleva una bolsa de ajo en el Mercado Central, el mercado mayorista más grande del AMBA (REUTERS/Matías Baglietto) La economía bonaerense llegó a las elecciones legislativas de este domingo con un impacto pronunciado en su nivel de actividad económica, con dos sectores como la construcción y la industria con una alta preponderancia en su territorio y con un impacto en salarios y jubilaciones más allá de la caída de la inflación. La radiografía económica de la provincia de Buenos Aires en un contexto electoral marcado por tensiones cambiarias, caída de la actividad y retrocesos en los ingresos reales. Según el indicador Pulso PBA, que el Banco Provincia elaboró junto con investigadores de la Facultad de Ciencias Exactas de la UBA, la actividad se contrajo 0,3% en julio y 1,4% en agosto. “Con estos números, septiembre debería crecer más de 5% para que la producción no caiga en el tercer trimestre y quede virtualmente en recesión”, señalaron desde el organismo. El panorama, de acuerdo con los datos disponibles, anticipó una caída en el tercer trimestre y una posible recesión técnica hacia fin de año. Según el indicador Pulso PBA, que el Banco Provincia elaboró junto con investigadores de la Facultad de Ciencias Exactas de la UBA, la actividad se contrajo 0,3% en julio y 1,4% en agosto La contracción de la actividad se vio agravada por el contexto financiero. El análisis del Banco Provincia destacó que con las tasas de interés vigentes la dinámica del crédito no permitió que las empresas se recuperaran en el corto plazo. Algo similar ocurrió con los salarios, que no alcanzaron a recomponer el poder adquisitivo de las familias. Aun cuando septiembre recién comenzaba, Pulso PBA proyectó que la economía provincial no lograría evitar un saldo negativo en la comparación trimestral. En caso de no repuntar en el último trimestre, “podría cerrar el año en recesión, ya no solo fáctica sino también técnicamente”, advirtió el informe. El contraste con el nivel nacional resultó evidente. Mientras que entre noviembre de 2023 y junio de 2025 el EMAE del Indec creció más de 3%, el Pulso PBA retrocedió 1% en ese mismo lapso, una caída que se estiró a 2,7% al incluir agosto. Esta diferencia respondió a la composición sectorial: a nivel nacional tuvieron fuerte incidencia minas, canteras y agro, mientras que en la provincia estos sectores tuvieron un peso menor. El reporte explicó que la minería representó apenas 0,2% del producto bonaerense frente a más del 8% en la Nación, lo que amplificó la brecha entre ambos indicadores. Caputo y Bausili ingresan a una reunión de gabinete en la Casa de Gobierno. RS Fotos En materia laboral, la divergencia también fue clara. Según el Ministerio de Capital Humano nacional, los puestos de trabajo formales retrocedieron 2,5% a nivel país entre mayo de 2025 y el promedio de 2023, pero en la provincia la contracción fue menor, de 1,3 por ciento. El instituto estadístico bonaerense también hace un seguimiento propio con indicadores provinciales de actividad económica. La industria bonaerense, según el dato oficial más reciente de mayo, tuvo una mejora interanual de 3%, y en términos mensuales en dos meses del año (enero y marzo) registró caídas, la más pronunciada en marzo, con -7,3 por ciento. Por otra parte, los supermercados en la provincia tuvieron una caída de ventas interanual de 3% en junio, mientras que en el Gran Buenos Aires específicamente se desplomó 6,6 por ciento. Se plantea ahí una diferencia con el resto de la provincia, cuyas ventas crecieron 5,9 por ciento. Se deja ver, así, una distancia entre el Conurbano y el interior de la provincia. Salarios y jubilaciones Por su parte, la consultora C-P describió un escenario económico inusual para los meses previos a las elecciones. “El gobierno priorizó mostrar una inflación baja utilizando un ancla salarial creciente”, indicó la consultora. Esa estrategia derivó en un deterioro del ingreso disponible de los trabajadores privados. Desde enero de 2025, el salario real en ese sector cayó 4% y no tuvo perspectiva de recuperación. La comparación histórica marcó la magnitud del retroceso: el nivel se ubicó en línea con el peor momento de 2021, en la salida de la pandemia, y muy por debajo de las elecciones de 2013 y 2017. Según los cálculos, los salarios reales fueron 14% inferiores a los de 2013 y 12% menores a los de 2017. La actividad bonaerense cayó en los últimos dos meses, según una estimación del Gobierno provincial. (Fuente: Bapro) El informe destacó también el deterioro de los salarios públicos, que “concentraron su caída a inicios de 2024 con un retroceso del 20% respecto de noviembre de 2023”. A pesar de una recuperación parcial de cinco puntos, en 2025 solo avanzaron 3 por ciento. El contraste con años previos fue notorio: en 2017 habían crecido 4,5% y en 2021 un 7,7%. Medidos en niveles, los sueldos estatales de junio de 2025 quedaron 12% por debajo de 2021 y 33% por debajo de 2017. Las jubilaciones atravesaron un proceso similar, enmarcado en una tendencia de largo plazo. El cambio de la fórmula de movilidad consolidó haberes más bajos, en el marco de un ajuste fiscal que tuvo a las prestaciones previsionales como eje central. La consultora indicó que “las jubilaciones registraron una caída muy grande en 2024” y que el gobierno decidió congelar los bonos que en la pospandemia habían compensado la pérdida de los ingresos mínimos. El resultado fue una contracción más severa en los haberes más bajos. Comparando los meses de junio de cada año, las jubilaciones de 2025 se ubicaron 11% por debajo de las de 2021, 26% menos que las de 2017 y 28% menos que las de 2013. La merma alcanzó también a los haberes medios, con caídas de 26%, 41% y 44% en relación con 2021, 2017 y 2013, respectivamente. La reducción de transferencias a beneficiarios de programas sociales reforzó este panorama de pérdida de poder adquisitivo en amplios sectores. El ajuste recayó así en asalariados privados, empleados públicos, jubilados y receptores de asistencia, en un año en el que, a diferencia de otras elecciones, el oficialismo no logró mostrar mejoras en el salario real. Federico Pastrana, economista de esa consultora, planteó en diálogo con Infobae: “Para nosotros 2025 fue muy diferente a 2024, eso lo veníamos detectando desde el principio del año y en nuestro seguimiento de salarios reales y de los ingresos nos habían aparecido indicadores muy malos, sobre todo en los indicadores de salario efectivo”. “Cando nos pusimos a comparar con otros años apareció muy claro que en los años electorales los salarios reales no caen y en este caso el Gobierno está encarando una elección con los salarios reales cayendo, ese es el primer punto. El segundo punto es la actividad y después otros ingresos, cuando ves en el histórico dónde estaban los ingresos, este Gobierno tiene una performance bastante mala”, continuó Pastrana. “Todo eso nos configuraba un escenario preelectoral muy complicado”, concluyó. Kicillof fue el ganador de las elecciones legislativas bonaerenses. Jaime Olivos A nivel provincial, los salarios y el empleo muestran números diversos, de acuerdo a una recopilación que hizo la consultora Politikón Chaco, especializada en finanzas y economía de las provincias. En base a datos oficiales, midieron que hubo una caída de puestos de empleo de 33.156 empleos, aunque en el peor momento de la curva de evolución laboral llegó a registrar una sangría de 55 mil puestos, a mediados del año pasado. En términos de salarios, hasta marzo, para el Conurbano bonaerense tenía una mejora en el poder adquisitivo de 2,2% desde el cambio de gobierno. Para el resto de la provincia, en tanto, hubo una leve caída de 0,1 por ciento. “Las consecuencias de la política económica nacional impacta de manera más fuerte en el GBA y en algunas zonas puntuales de la provincia por factores concretos: por caso, en el GBA se sintió mucho más el retiro de subsidios (tanto de energía como de transporte); esto hizo que pese a la mejora del salario real hasta marzo (estimamos que se cae luego entre abril y junio) no se refleje en mayor poder adquisitivo porque cayó fuerte el ingreso disponible ya que los costos fijos del hogar crecieron mucho”, argumentó Alejandro Pegoraro, economista de Politikón Chaco. “En esa línea, la caída fuerte de la construcción y de la industria pegan muy fuerte en el GBA y en polos industriales de la provincia, que lo sienten mucho más que en otras zonas del país. En términos muy generales, y más allá que el GBA tiene una ‘pertenencia’ política más afín al peronismo, es también una zona altamente atada a las decisiones del gobierno nacional, más que otras zonas del país, por lo que el retiro del Estado se siente de manera aun más fuerte allí”, consideró.
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