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» Elterritorio
Fecha: 23/08/2025 21:12
Con funciones en la Capital Federal, ‘Argenta modo trío’ es una obra que reúne a Liliana Tasso, Fabián Kessler y Gabily Anadón para reflexionar sobre el cuerpo, el arte y sus heridas sábado 23 de agosto de 2025 | 4:00hs. La obra se vio el jueves y se repite el 28. Fotos: Marcelo Rodríguez Un espectáculo en el que la danza habla de sí misma. La danza reflexiona. Piensa en voz alta, bien alta. Se interpela. Se cuestiona. Se afirma y se duda. ¿Será porque la presentación de Argenta modo trío se celebra en el subsuelo? ¿Será porque para poder decir lo indecible hay que bajar, hurgar, raspar en lo profundo? La danza hace ruido. Hace mucho ruido. Se desdobla en imágenes. Se deshace en capas. Se proyecta, se multiplica, se baila con intensidad -sí, con todo el cuerpo- en la sala Solidaridad del Centro Cultural de la Cooperación en Caba. Allí, en ese lugar donde tantas veces se encendió la palabra, ahora se enciende el cuerpo. El estreno fue el pasado 14 y la noche del jueves 21 vio la luz la segunda puesta en escena. Y no fue una repetición, sino otra vez un alumbramiento. Liliana Tasso, Fabián Kessler y Gabily Anadón (nuestro crédito en esta lid) son los responsables de una obra en la que juegan imágenes de archivo, sonidos, videos, historias que son confesiones que desnudan procesos y luchas. Los tres se exponen y se entregan en escena. Lo que traen no son personajes ni máscaras: es lo que late por debajo. Lo que dolió. Lo que todavía duele. Lo que se pudo transformar. En los asientos, la gente de la danza asiente. Afirma con la cabeza, con los ojos, con el cuerpo entero. Como si lo que sucede en el escenario de la Solidaridad ocurriera, de alguna manera, en cada galpón, escenario, sala de ensayo, salita, salón comunitario, en cada cuerpo que alguna vez buscó crear en movimiento. Palabras fuertes. Silencios también fuertes. Luces. Oscuridad. Contraluces. Pausas que son gritos. La danza cuenta, a los que quieran oírla, que ella también cuenta. Que tiene voz. Que tiene memoria. Que tiene algo que decir. Aun cuando tenga muchas cuentas pendientes. Aun cuando esas cuentas estén abiertas, como las heridas. La siguiente cita es el jueves 28. Otra vez en la misma sala. En el mismo centro. Avenida Corrientes 1543, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. A las 20.30. Las entradas pueden adquirirse allí mismo. El que quiera escuchar, que vaya. El que quiera mirar, que se acerque. La danza tiene algo urgente para mostrar. Un momento para encontrarse con tres autores, tres historias, tres procesos. Una obra con varias capas de sentido. En la puesta hay desazón y muerte. Hay bronca. Hay angustia. Hay renuncias. Ilusiones que se desvanecen. Traición. Incomodidad. Memoria. Un viaje al pasado -personal y colectivo- en un presente que también está marcado por la incertidumbre. Un presente oscuro. ¿Cuál es la frase del final? ¿Hay luz? En todo caso, se sale. Se vuelve. Se prueba. Hay exploración. Hay espejos. Hay deformación. Hay recreación. Hay búsqueda. En todo caso, lo que se mueve, no muere. Lo que se atreve a decir, lo que se atreve a exponer la fragilidad, también construye fuerza. Argenta modo trío es, en definitiva, una danza que habla de la danza. Pero también, y sobre todo, una danza que habla del mundo. De lo que vivimos. De lo que callamos. De lo que nos duele y nos transforma. Una danza que respira y se resiste al olvido. Una danza que, incluso en el subsuelo, encuentra una forma de alumbrar.
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