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» Santafeactual
Fecha: 09/08/2025 00:51
Beber un vaso de agua en ayunas estimula la digestión, facilita la eliminación de toxinas y ayuda a mantener las funciones corporales óptimas desde el comienzo del día. Pocas prácticas son tan simples y efectivas para mejorar la salud como beber agua al despertar. Esta costumbre, recomendada por expertos, no solo repone los líquidos perdidos durante la noche sino que también activa el aparato digestivo y promueve una mayor producción de orina, ayudando así a eliminar sustancias de desecho del cuerpo. El Instituto Europeo de Hidratación explica que el agua es el medio donde se desarrollan numerosas reacciones químicas vitales, actuando como solvente y transportando nutrientes a cada célula del organismo. La nutricionista y licenciada en Ciencia y Tecnología de los Alimentos, Carmen García Torrent, aconseja: “Lo recomendable es tomar uno o dos vasos de agua en ayunas y luego seguir hidratándose durante el día hasta completar los dos litros”. Además, para aprovechar mejor sus beneficios, sugiere esperar al menos diez minutos antes de desayunar, permitiendo que el cuerpo asimile correctamente el líquido. Una práctica con larga tradición es la llamada “Terapia del Agua” en Japón, avalada por la Asociación Médica local. Esta consiste en beber varios vasos de agua apenas se levanta la persona, con la intención de prevenir diversas enfermedades. Aunque faltan estudios concluyentes, se valora positivamente su posible impacto en la salud cardiovascular y la mejora de la circulación. Sin embargo, la experta advierte que el consumo excesivo puede ser contraproducente: “Beber más de tres litros de agua puede tener efectos negativos para la salud, ya que al orinar no solo se elimina agua, sino también sales minerales. Si se bebe mucha agua, se hace trabajar al riñón más sin necesidad”. Encontrar un equilibrio adecuado es clave, especialmente teniendo en cuenta la actividad física y el clima. La sed suele aparecer cuando el cuerpo ya está parcialmente deshidratado, por lo que es mejor hidratarse de forma periódica y no esperar a sentirla. En resumen, mantener una correcta hidratación a lo largo del día, y comenzar la mañana con un vaso de agua, puede marcar una diferencia significativa en la salud integral y el bienestar general. Fuente: LA CIEN
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