Contacto

×
  • +54 343 4178845

  • bcuadra@examedia.com.ar

  • Entre Ríos, Argentina

  • Una red antes de las redes

    » Clarin

    Fecha: 08/08/2025 18:36

    Cuando era chico me gustaba jugar a los palitos chinos. ¿Se acuerdan? Una especie de varas finitas de diferentes tonos. El desafío era sacar uno del montón sin que se movieran o desmoronaran los otros. Ese pasatiempo -no lo sabía en aquel entonces- fue un aprendizaje de vida. Tenemos que dar vuelta fichas y andar caminos, pero cuidar que nuestras actitudes no perjudiquen a quienes queremos. Somos una red desde antes de que existieran las redes. Allá por los años 60, cuando nací, estaba de moda -empezaba la idea de la mujer autónoma- de que al bebé no había que tenerlo mucho a upa porque si no se malcriaba y no sería independiente. Cuando yo fui padre, la ecuación había cambiado radicalmente: “Mímenlo todo lo que puedan”, nos dijo el pediatra el primer día. Son cachorritos -agregó- y es el lenguaje que entienden, el que les da seguridad y les va a permitir ser independientes. Pese a teorías tan dispares, no veo mucha diferencia entre mis hijos y yo. Más bien una continuidad: a todos nos gusta estar cerca y también tener espacios propios. En cambio, sí siento cómo el ánimo de uno nos influye a todos. Y ahí hay que saber matizar (apechugar, en criollo) para que esa estructura familiar de palitos chinos no se vea afectada. ¿Corresponde dejar pasar lo que molesta? Sí y no. Me parece que en el momento de fragilidad, cuando alguien hiere porque está desorientado, no tiene sentido pedirle que analice lo que está pasando. Luego (¿unas horas después, el día siguiente?) sí vale la pena conversarlo, explicarnos, entendernos.

    Ver noticia original

    También te puede interesar

  • Examedia © 2024

    Desarrollado por