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Parana » Plazaweb
Fecha: 31/07/2025 21:53
María Cecilia Rhul realizó una grave denuncia pública sobre la situación de su hijo, Cristian Torres, quien se encuentra alojado en la Unidad Penal N°9 El Potrero de Gualeguaychú. Según relató en charla con el programa Cosas que pasan en Radio Plaza, su hijo es víctima de abusos sexuales, maltratos físicos y torturas psicológicas dentro del penal. “Mi hijo ha sido violado cinco veces con esta. Son cinco veces, diez personas diferentes”, aseguró. “Esta unidad penal es la granja de la tortura, es mentira que hay una granja para rehabilitación, que estén en huertas”, denunció. También cuestionó con dureza a la jueza Cecilia Bértora, a quien acusó de minimizar la situación: “Lo que salió a decir la doctora, que dice que él inventa algunos abusos, como que un abuso de sexo oral no es abuso”. “Está descalzo, no tiene baño, está sucio” En su testimonio, Rhul detalló las condiciones inhumanas en las que, según afirma, se encuentra su hijo. “Lo atan como chanchito, lo sacan, lo bañan a la madrugada con agua helada. La comida que uno le manda se la tiran. La última comida que comió, una hamburguesa, le pegaron fuerte por el estómago y vomitó, con sangre”, denunció. Asegura que, a pesar de que existe un oficio judicial que obliga a garantizar su integridad física, esto no se cumple. Además, señaló que su hijo sufre amenazas constantes: “Está amenazado. Hay audio donde dice: ‘Mami, me están amenazando de matarme, me voy a matar yo antes que me maten’”. Ante la falta de respuestas por parte de las autoridades judiciales y del Servicio Penitenciario, Rhul manifestó su desesperación: “Quiero a mi hijo vivo en un centro de rehabilitación o mañana a la mañana me encadeno en tribunales hasta que no me traigan”. Pedido de medidas urgentes y responsabilidad institucional La madre de Torres no solo exige su traslado inmediato a un centro de contención, sino también que se tomen medidas contra quienes estarían implicados en los maltratos: “Quiero la baja, que echen a todos los del servicio penitenciario, inclusive al jefe. A todas las guardias, porque le pegan”. Según su testimonio, su hijo intentó quitarse la vida, y en lugar de recibir asistencia, fue tratado con violencia: “Cuando se quiso ahorcar, lo trataron como un chanchito, de pies y manos, lo golpearon como más pudieron”. “Está equivocada la jueza porque hay pruebas de los abusos, de los daños que le han dejado”, insistió. En ese sentido, sostuvo que una de las últimas denuncias que intentó hacer su hijo fue frustrada por la presencia de un penitenciario que lo intimidó para no declarar. Enfatizó que “mi hijo no es ningún violador, ni asesino, está ahí por su adicción”. Por último, expresó su decisión de llevar adelante medidas de fuerza hasta que obtenga una respuesta concreta.
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